Tristán.
Son un par idiotas. ¿Por que mierda bien aquí? Así, por que soy un idiota sentimental.
Salimos del gimnasio y nos detenemos junto al auto de mi hermano.-¿Y bien? ¿Que quieren?- pregunta Richard.
-Queremos información sobre el paradero del cáliz de Lucifer- dice Tina con sequedad.
-¿El cáliz de Lucifer? ¿Estan bromeando no?Tina se cruza de brazos y alza una ceja. La expresión de Richard cambia drásticamente, nos mira uno a uno como si estuviéramos locos.
-Nadie sabe donde esta ese cáliz- dice.
-Pero tienes teorías, lugares donde puede estar- digo.
-Pero ninguna es un hecho. Sólo son eso, teorías. No sabemos si eso nos lleve al cáliz.
-Increíble- murmura Tina.Paso las manos por mi cara. ¿Ahora que? Sabía que sólo habían ideas, suposiciones de donde estaría el cáliz, pero ahora que lo veo, será mucho más difícil de lo que pensé.
-Damelas todas- digo.- Dame un croquis, un mapa, lo que sea. Pero dame toda la información que tengas.
-Dos cosas antes guapo- dice Richard acercándose un paso a mi.- ¿Por que quieren saber dónde está el cáliz? ¿Planean hacer un ejército de demonios o que?Frunzo las cejas. Su sonrisa es burlona, pero sus ojos muestran seriedad.
-Es algo que no te importa.
-Oh, si puedo ganar algo de esto, claro que me importa- dice sonriendo.
-¿Que quieres que no puedas conseguir manipulando?- inquiere Tina.Richard la mira y le guiña un ojo.
-Tal vez a alguien como tú en mi cama.
Aprieto los puños a los lados. Maldito idiota. Tina le enseña el dedo medio.
-¿Otra cosa?- pregunta.
-Bien. ¿Que es lo que les están ofreciendo a cambio por el cáliz? Quiero la mitad.Miro a Tina instintivamente. Ella me regresa la mirada mordiéndose el labio, pero segundos después asiente.
-Quinientos euros- dice Tina antes de que yo pueda hablar.
¿Quinientos euros? ¡¿Pero está loca?! Richard la mira por un momento, examinando en que su expresión se note la mentira, pero la expresión de Tina es neutra, lo mira a los ojos sin mostrar inseguridad alguna.
-Quinientos euros- dice Richard.- ¿estas tomandome el pelo?
-¿Parece que estoy bromeando?- inquiere.
-Esa es una gran suma, y un gran riesgo por si lo sabían- me mira.- ¿y desde cuando tú te alias con alguien? Y peor, con una chica.Tina se cruza de brazos, claramente ofendida. Sonrió un poco por su reacción.
-Desde que me la tope en un antro- contesto.- larga historia.
-¿Y por que no nos la cuentas?- pregunta Christian hablando por primera vez.
-Yo creo que no.
-Oh vamos bastardo, dinos que tal folla.Aprieto la mandíbula con fuerza, pero antes de soltar el primer golpe, Tina lo hace. Le suelta un puñetazo en la cara, haciendo que Christian caiga de centon. Richard suelta una gran carcajada mientras que Christian gruñe tomándose la mandíbula.
-La próxima vez será en la entrepierna- advierte Tina.
-Tienes mano pesada reina- murmura Christian.
-Te lo dije, no te metas conmigo.Christian se pone de pie y de un solo jalón se acomoda la mandíbula chueca, provocando un feo sonido.
-Está chica me agrada- dice riendo Richard mientras la señala.- es guapa, sexy, arrogante y fuerte. ¿Que más se puede pedir?
Pongo los ojos en blanco. Tina también, pero puedo notar su vergüenza a kilómetros de distancia, que suerte que no tiene sangre en su sistema para ponerse roja.
-Dejemonos de juegos, ¿sabes o no donde está el cáliz?- pregunta irritada Tina.
-No lo sé- contesta Richard.- pero se de alguien que nos puede ayudar.
-Genial, más viajes- murmura molesta.
-¿Donde?- pregunto.Richard me mira por un momento, luego frunce los labios.
-Ella está a unos cuantos kilómetros de aquí. Es la hija de un gran brujo.
-¿Y que mierda esperamos? ¡Vamos!- exclama Tina.Me giro con ella y entramos en la parte trasera del auto. A los pocos segundos entran Richard y Christian.
Nos ponemos en marcha casi al instante, todo en silencio de nuevo. Miro a Tina, su mirada está fija en la ventana, parece nerviosa. Toco su hombro suavemente y ella gira su cabeza a mi al instante.-¿Que?
-¿Estas bien?
-Si, ¿por que preguntas?
-Por que te ves preocupada.Me mira fijamente, como queriendo examinar si me estoy burlando de ella. Luego de un momento gira su cabeza regresando su atención al cristal.
-¿Y desde cuando te preocupas por mi?
-No lo hago- contesto cortante.- sólo no quiero que te arrepientas de este viaje y arruines todo.Sin girarse me enseña el dedo medio.
-Ya te dije que no lo haré. Deja de joder Tristán.
Al menos contestó. Me acomodo en el asiento y cierro mis ojos relajandome. Los vampiros no duermen, y aunque llegamos a sentirnos agotados, podemos cerrar los ojos y relajarnos recuperando las fuerzas sin necesidad de dormir.
Dejo que todo mi cuerpo se relaje, sintiendo las fuerzas regresar poco a poco. A mis oídos llega el sonido lejano de una auto siendo reparado. Abro los ojos y nos encontramos en una casa junto al mar. Toda es de madera y está decorada con objetos raros y alegres. A lo lejos puedo ver un auto con el capote abierto. Que raro.-La casa de Kesha- dice Richard.- la más sensual y sexy bruja de todo Miami.
-¿No podrías ser menos asqueroso?- pregunto frunciendo las cejas.
-¿Celoso primor?- inquiere burlándose de mi.Pongo los ojos en blanco mientras el auto se detiene, sera imbécil. Los dos se bajan de auto con una sonrisa pícara.
Miro a Tina que tiene los ojos cerrados mientras su cabeza está recargada en la ventana. ¿Como no ha oído que ya llegamos?-Tina...
La muevo un poco, pero no responde. Frunzo las cejas. La vuelvo a mover un poco y está vez se remueve.
-¿Que?- se queja.
-Ya llegamos, ¿como no lo notaste?
-¿Será porque estaba dormida? Que idiota eres...
-¿Que?Abro los ojos de par en par. ¿Dormida? Ella frunce las cejas y me mira.
-¿Que tiene?
-Me estas tomando el pelo verdad- digo ahora molesto.
-¿Tengo motivo para hacerlo?
-Siempre estas jodiendome.
-Pero ahora no. En serio, ¿es tan malo que duerma unos minutos? En serio que eres un maldito exagerado.Niego con la cabeza sorprendido. Debe ser una maldita broma. La miro fijamente, esperando a que se ría en mi cara, pero su mirada molesta me demuestra que no miente.
-Pero... Tina, los vampiros no duermen.
Sus cejas se fruncen más.
-Ahora eres tú el que me está tomando el pelo ¿verdad?
-Tina hablo en serio, los vampiros no duermen.
-Es una estupidez. Desde que soy así he podido dormir. No es una necesidad claro, pero puedo dormir.
-Es... Simplemente no puedo creerte.
-¿Y por que no?
-Entiende, los vampiros no duermen por que no tienen alma, ya están muertos. No tienen la necesidad.Ella me mira extraño. Debe de pensar que lo digo para fastidiar, pero simplemente no puedo creerlo.
-¿En serio?- pregunta, parece asustada.
Asiento. Ella suspira y pasa una mano por su cabello negro. Esto es realmente raro. Primero sus ojos y ahora esto, que sigue ¿que vuele?.
-Yo... Lo siento.
-¿Sientes el poder dormir?- pregunto confuso.
-Si yo... Eso creo.Niego con la cabeza y abro la puerta.
-Averiguaremos que es lo que te pasa, lo prometo- digo. Ella me mira, parece preocupada.- Pero ahora debemos de encontrar ese cáliz y vivir.
Ella asiente con un suspiro y sale del auto.
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Noche de Sangre.
Vampire¿Que tal si nos alejamos un poco del típico cliché entre humana tonta que se enamora de un vampiro el cual es indiferente al principio y luego por arte de magia se enamora de ella? Que tal si cambiamos las cosas. Una donde no sólo el hombre tenga qu...