Un Verano Desastroso [#CG2]

35.

Hola!!! Volví, perdón por la tardar en actualizar pero la verdad es que mis ganas en editar los capítulos que faltan están en cero, si que por eso, a partir de acá subiré los demás como estén, osea si, con algunas faltas de ortografía o pequeños detalles, cuando mis ganas regresen editare como corresponde.

Espero que estén todos bien, y respetando la cuarentena. Cuídense mucho.

Ahora, disfruten de los últimos capítulos.

LAVINA

Cuando llegamos a casa, por suerte mi tío no estaba en ella.

Estábamos todos reunidos en el living hablando sobre lo que sucedió, algo que jamas olvidaremos. Espero que mi madre nunca llegue  enterarse.

- En fin, ¿podemos hablar de sus vacaciones?

- ¿Qué tal si mañana? Estoy cansada- dio una mira a su alrededor- creo que todos necesitamos dormir.

Tenía razón, eran las 4pm en punto. La mayoría de nosotros estaban como zombis y otros dormían profundamente.

- ¿En dónde dormiremos? -pregunto Brent estirándose en el sofá.

- En las habitaciones donde están los demás, pueden elegir - me encogí de hombros.

Dax, Bethany y Jesse se despidieron de todos. Antes de que cada uno fueran subiendo a sus respectivas habitaciones.

Me quede un rato abajo juntando todos los vasos y botella vacías.

Max apareció en la puerta de la cocina, me había olvidado de que estaba aquí.

-Perdón por asustarte. Subí a Marleen a su habitación- señalo.

Rápidamente curve una sonrisa- Fuiste muy lindo con ella.

-Solo hice lo que tenía que hacer, estaba cansada y al parecer duerme profundamente, no quería despertarla.

-Claro. Igual no me refería solo a eso- deje los vasos en el fregadero- esta noche fuiste muy atento con ella. ¿Me perdí de algo?

Las mejillas de Max tomaron un color rojizo y evito mi mirada- Debo irme a mi casa. Nos vemos mañana.

-Es tarde para que camines a estas horas tu solo, duerme aquí.

Negó con su cabeza.

-Duermes aquí-insistí- No quiero sentirme culpable si algo te pasa- nos dirigimos al cuarto de estar- puedes dormir en los sillones, son grandes.

Asintió.

-O puedes ir y dormir con Marleen- dije en broma.

Ma agarro un cojín y me lo tiro, por suerte tiene mala puntería.

-Cállate.

Me reí- Buenas noches.

*

Me desperté por los intensos rayos de sol que traspasan por mi ventana, luego de moverme en la cama por media hora, resignada abrí los ojos.

Mi mirada se centró en el reloj de mi mesa que indican las tres de la tarde.

A regañadientes me levanté y vi que Brea no está en su cama, parece que alguien se cayó temprano de ella.