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Habíamos pasado toda la mañana juntas en el departamento, mi celular estaba apagado y nadie había venido a molestar.

-¿Ya pediste la pizza? -pregunté volviendo a sentarme a su lado.
-Obvio, ya muero de hambre -dijo y rió.

Ya había pasado unos veinte minutos cuando llego la pizza, para ese entonces ya teníamos todo preparado, las sodas, la película y a Ruben en el sofá con nosotras, aunque decidió irse a dormir a mi cuarto.

-Bueno, provecho -dije abriendo la caja de la pizza dejando un aroma delicioso en todo el departamento.
-¡Provecho! -gritó alegre Jasmine.

...

Ya habíamos terminado de ver la película y las pocas rebanadas que sobraron, las guarde.

-Ven -dijo Jasmine abriendo sus brazos-. Quiero que estemos aquí.

Fui a abrazarla haciendo que cayera ella sobre mi en el sofá, ambas reímos y después nos besamos.

-¿Crees que podamos estar así hasta ancianas? -susurró ella.
-No lo sé, pueden pasar muchas cosas o puede que alguna muera antes -dije sin importancia y ella me miro mal-. ¿Qué?
-Pues que eres muy realista, ¿no crees? -preguntó ella y yo negué. Subió una de sus cejas y yo reí.
-Bueno, quizá un poco -dije riendo-. Pero siempre es bueno ser realista, imagínate si todos viviéramos en la fantasía.
-Pues es muy tonto que nunca tengas sueños -dijo seria-. Todos tenemos sueños y no es malo fantasear con nuestro futuro.
-Bueno, bueno, si tu lo dices -sonreí y ella correspondió con un beso.

Pasamos unos minutos en esa posición cuando comenzó a sonar un celular.

-¿Es el tuyo? -pregunté y Jasmine asintió poniéndose de pie. Al ver el número, ella se puso un poco nerviosa y fue a mi habitación.

Claramente no la seguí aunque si me quede un poco intrigada, pero tendré que esperar.

Jasmine salió minutos después muy nerviosa, tomo su bolso y me miro.

-Tengo que irme -dijo, beso mi frente y se fue.
-¡Oye, espera! -grité pero fue inútil ya que ella ya había entrado al elevador.

Los siguientes minutos me quede muy preocupada y confundida, ¿que habrá sido para que ella se fuera así?

Intente llamarla pero no respondió, pensé en ir a buscarla a su departamento pero cuando estaba por salir, Mónica había llegado.

-Hola -dice ella-. ¿Por qué no me llevaste a Ruben? ¿fuiste a trabajar?
-No, por qué... -mordí mi labio, dudaba en contarle pero recordé que quedamos como amigas, así que no habría problema-. Jasmine me vino a buscar, para... para decirme que cancelo su boda con, con él.

Mónica abrió grandes sus ojos y sabía que se había molestado, mordió su labio y bajo la mirada.

-Ah... -dijo ella casi forzada-. Que, que bueno...
-Si... -dije-. Y, se podría decir que, que comenzamos una relación.

Mónica suspiro y asintió.

-Lo que querías, ¿no es así? -dijo ella y yo asentí nerviosa-. Bueno, estaba preocupada por ti, pero parece que todo esta bien... tengo que irme.

Mónica se acerco un poco y después se detuvo, se limito solo a sonreír y salió del departamento.

Me deje caer en el sillón, estaba confundida ya que no sabia si estar feliz o triste, Mónica se veía mal pero lo oculto.

Espero que a partir de ahora todo sea mejor.

Me Enamoré de la NoviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora