Íbamos en el auto, había dejado al fortachón en mi oficina y mi celular no dejaba de sonar. Era una locura.
-¿No contestarás? -dice Mónica mirando mi celular.
-No creo que sea importante -dije sin importancia.Ella alzo los hombros y tomo el celular para contestar.
-¿Quién? -dijo ella imitando mi voz.
De pronto abrió grandes sus ojos y me dio el teléfono sin mirarme.
-¿Quién habla? -dije confundida.
-¿Por qué no veniste a la cena? -dijo la voz femenina de Jasmine.En ese momento volteé a mirar a Mónica y ella tenia su mirada perdida viendo los autos.
-Porque tengo cosas más importantes que hacer -dije, apagué el celular y lo metí en mi bolso.
Mónica volteó a verme sorprendida, ella sonrió y yo le devolví la sonrisa.
-¿Cosas más importantes? -dijo ella-. ¿Cómo qué?
-Como estar contigo -dije....
Ya habíamos llegado al aeropuerto y estábamos sentadas esperando a que llegara mi hermana y su esposo.
-Entonces ese sujeto es hermano de Jasmine, ¿no? -dice Mónica recargada en mi hombro.
-Exacto -dije-. Y es un patán ególatra.Ella río ante lo que dije y tomo mi mano para jugar con mis dedos. Yo solo me limitaba a reír y mirarla. Era muy tierna cuando se lo proponía.
Ya habían pasado unos veinte minutos y apenas comenzaban a salir las personas del vuelo que debió llegar hace treinta minutos.
-¿Aquí deben de salir? -preguntó Mónica. Yo asentí.
Y a lo lejos se pudo ver que venía Clarissa, Víctor y la enorme panza de Clarissa. Bueno, no era tan grande pero gracia si daba.
-¡Mira, que ahí vienen! -dije sonriendo.
Fuimos a ayudarlos con el equipaje, no traían mucho, nos saludamos y presente a Mónica con Víctor, ya que ellos no se conocían. Ya habíamos subido al auto, íbamos a ir a cenar a algún lado.
-¿Cómo has estado? -preguntó Clarissa.
-Bien, he estado bien, trabajando y haciendo otras cosas -dije sonriendo.
-Supe que Yael anda en la ciudad -dijo ella-. Y creí que vendría contigo -dijo mirando mal a Mónica.Clarissa siempre ha creído que Mónica no es buena compañía para mi, que tiene comportamientos raros y es muy atrevida.
-Pues desde un principio te dije que no me gustaba -dije de mala gana-. Además Mónica y yo ya teníamos planes pero teníamos que venir por ti.
Mire a Mónica y le sonreí con complicidad, ella entendió rápidamente y me devolvió la sonrisa, pude notar que Clarissa se dio cuenta.
Llegamos al restaurante al que ya teníamos planeado ir y pedimos una mesa para los cuatro, esperamos unos minutos y después nos condujeron hacia ella.
Nos sentamos y en seguida nos trajeron las cartas donde venían todos los platillos disponibles.
-Oh, quiero esto -dijo Mónica señalándome el platillo, tapó nuestros rostros con la carta y me beso.
Al bajar la carta Clarissa nos fulminaba a ambas con la mirada, Víctor ni en cuenta. Él es muy reservado.
-Pu... pues ese será -sonreí satisfecha por el beso sorpresa.
Llevábamos ya ahí un buen rato, ya habíamos pedido la comida. Charlabamos sobre todo, recordábamos momentos graciosos haciendo que Víctor y Mónica lloraran de la risa.
Todo era muy bueno para ser verdad, de pronto mire hacia la entrada y ahí estaba el fortachón, Jasmine y su prometido.
Jasmine para ser sinceros, llevaba un vestido que la hacia ver perfecta.
-Joder... -susurré haciendo que Mónica me viera, vio hacia donde veía y tomo mi mano por debajo de la mesa.
-Tranquila, ignoralos -dijo ella en un susurro.Pero Clarissa alcanzo a escuchar y volteo para ver al fortachón y lo que menos quería, lo hizo.
-¡Hey, Yael! -dijo Clarissa haciendo que ellos nos miraran.
Mi mirada se encontró con la de Jasmine, ella me miro y después a Mónica.
¡Joder! No puede ser peor esta noche.
N/A
Este capítulo estuvo más largo de lo normal, creo yo :v¡Ya llegamos a los 2K de leídos! Muchas gracias, el especial quizá sea en estos días. Hasta mañana. ❤
ESTÁS LEYENDO
Me Enamoré de la Novia
RomanceMadeline Blake. Una famosa organizadora de bodas. Una mujer que aunque se la vive de boda en boda, aún no conoce al príncipe que la lleve al altar. Quizá no lo ha encontrado porque simplemente no es un hombre a quien necesita en su vida. Jasmine...