Destinos cruzados

Culpa

Lo siento por la tardanza, no merezco perdón :(
En serio, estoy muy apenada les agradezco por la paciencia que le tienen a esta escritora no profecional </3

Okya, sin más preambulos aqui les dejo el cap

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El gran bisonte volador descendio del cielo hasta quedar frente a una mancion medio destruida y cubierta de cenizas.

-¿Q-que fue lo que paso aqui?.- pregunto el ojiazul.

- ¡Sokka!

- ¡Padre!.- exclamo aliviado y feliz de que se encontrara bien.-¿Donde esta mi madre?

- Esta del otro lado de la casa, al parecer no todo el lugar se incendio.

-¿Qué fue lo que paso aqui?

- Ven, te lo explico en el camino.

Suki y Toph bajaron de Appa y vieron como el moreno se iba, la maestra tierra hizo un ademan de querer seguirlo pero al notar que su amiga no se movia la extraño y decidio acompañarla.

- ¿Que sucede?

- Nada.- musito.

- Ah, bueno, entonces nos vemos.- se volteo.

- ¡Espera!.- la maestra tierra se detuvo.- Es sobre Sokka.-

Toph sonrio traviesamente al ver que su plan funciono. Se dio la vuela y se sento en la cola de Appa junto con ella.

- Ahora si dime ¿Que te pasa?

- Yo... ¿Hize algo malo?

- ¿Eh? ¿A que viene eso?

- Es que, no entiendo por qué Sokka se comporta tan distante conmigo, desde hace horas que intento hablarle pero siempre me responde de manera cortante. Ya nisiquiera come lo que preparo, es... es... tan frustrante y me duele.- parecia que en cualquier momento se largaria a llorar.

- ¿Estas bromeando?.- Toph se paro y puso sus manos como jarra.- ¿Él, cortante? Ese chico habla hasta con la boca llena. ¿No come lo que cocinas? ¡Casi muere por querer comerse un bebe Alce!

Suki miraba asombrada a la niña por sus palabras.

- Tu no hiciste nada malo, Suki. Ese cabeza hueca nos esta ocultando algo solo es eso ¡Asi que no te rindas! Yo te ayudare a desenmascarar a ese principito.

Suki sonrio noltalgicamente y abrazo a su amiga por el apoyo que le daba.

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Sus manos morenas reposaban en su mejilla vendada desde su oreja a su ojo izquierdo. Su labio inferior temblo al verlo en ese estado, su pecho y brazos tambien estaban heridos pero eso podria curarse con el tiempo. Katara empezo a acariciar la cara del Principe para después derramar una lagrima que se deslizo por su menton perdiendose junto con otras más.
Desde que empezo a curar al ambarino tuvo que ser fuerte y no flaquear para asi poder sanarlo más rapido, estuvo horas ahi adentro, ahora que Zuko se encontraba fuera de peligro Katara pudo darse un respiro. No queria separse de él pero sabia muy bien que afuera estaba su familia que también estarian igual de preocupados que ella.

Suspiro cansadamente y se levanto de su lugar. Limpio todo rastro de lagrimar y después de darle una ultima mirada al pelinegro, salió de la habitación.

- ¿Como se encuentra mi hijo?.- se apresuro a preguntar Urza.

- Él esta bien.- intento tranquilizarla con una sonrisa lo cual funciono.- Cerre la mayoria de sus heridas, solo tiene algo de fiebre.