Capitulo 4

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Terry dormía tranquilo cobijado por las sábanas blancas del hospital pero de pronto un sueño se apoderó de él: Candy, su Candy estaba junto a él; lo besaba, le decía que lo amaba y él también decía lo mismo, pero de pronto unas luces cayeron sobre Candy y él corrió a su auxilio por lo que logró interponerse entre las luces y el delicado cuerpo de su pequeña Tarzan pecosa.

Después estaba en una habitación de hospital y le dijeron que él había perdido una pierna así como que Candy no sobrevivió. Al escuchar eso Terry se levanto de un solo golpe; «no Candy, esta bien y viva, es feliz, tiene que ser feliz»

Con la frente sudorosa y el corazón agitado latiendo demasiado rápido, Terry percibió la presencia de Susana, aquella joven actriz que él nunca quiso pero sabía que ella lo amaba y estaría siempre a su lado.

—Terry tuviste una pesadilla—Dijo la rubia dirigiéndose a él con paso calmado y voz chillona.

—Si—respondió irritado.

—Debió ser... Para gritar el nombre de Candy, ya sé que no la quieres y por eso fue tu pesadilla— contestó Susana sarcasticamente con una sonrisa malévola en el rostro.

Terry sabía bien que a Susana no le agradaba Candy, y se enfado cuando afirmó que al soñar con Candy había sido una pesadilla. Pero fue una pesadilla porque ella moría y no podía ver más su hermosa sonrisa y bellos ojos.

—¿Sabes que es lo bueno de las pesadilla?— pregunto socarron captando la duda de Susana— que cuando despiertas se van, pero la mía al despertar sigue ahí.—Dijo burlonamente observando como el rostro de Susana se transfiguraba.

—Bien, ayer ella estaba a punto de molestarte pero le ordene que se marchará , sé bien que no quieres su presencia aquí y si no te agrada pues hay que ordenar a los guardias que no la dejen pasar—Dijo maliciosamente.

—¿Qué hiciste qué?— pregunto él furioso.

—Sí, quería verte pero le ordene que se fuera y lo hizo, le dije que tu no la quieres y que soy yo quien esta a tu lado— contestó tranquila.

—Susana que te quede claro que yo no te amo y nunca lo haré, no debiste decirlo jamás, ella... No tienes derecho a meterte en vida oíste, mis asuntos son míos y no de tu incumbencia así que mantente alejada de ellos— respondió gritando demasiado molesto por lo que había hecho su antigua compañera.

Susana sintió mucho coraje por las palabras que Terry le dirigía, pero nada ni nadie iba a interponerse en su camino de llegar a ser algún día el amor de Terrence. Así que como lo hizo el día anterior, tendría que mentir para obtener lo que deseaba, haría cualquier cosa, daría cualquier cosa por estar a su lado. Incluso deshacerse de la propia Candice White Andley.

Amor sin alas [Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora