Amor sin alas [Editando]

Capitulo 23

Pasaron días y Candy permaneció en el hogar al lado de Terry. Los dos hablaron muy seriamente sobre sus sentimientos y llegaron a la conclusión que estarían juntos, en una relación más sólida.

Hablaron también del tema con la srita Pony y la hermana María. Las dos mujeres les brindaron su apoyo incondicional para la que tomasen.

Albert y los muchachos también estuvieron de acuerdo, ya que ellos igualmente pronto celebrarían su boda con las mujeres que amaban, Annie y Patty respectivamente.

Neil Legan también apoyo a la joven que seguía amando, aun cuando estaba casado con otra y a punto de ser padre de un hermoso niño.

Terry fue a Nueva York semanas después de la llegada de la chica.

Candy fue a la mansión de Chicago, estaba trabajando en un hospital, pero Annie le pidió que le ayudará con los preparativos de la boda. Así que decidió cumplir los deseos de su mejor amiga.

Durante horas planeaban todo lo que hacía falta para la ocasión. Llego un famoso diseñador para comenzar con la realización del vestido de novia. Patty y Candy se probaron también unos vestidos espléndidos que utilizarían ese día ya que ellas serían las damas de honor de la novia.

Archie pidió a Terry que, durante los últimos dos años se había vuelto como un miembro de la familia Andley, fuera el padrino de anillos.

Él a su vez ofreció a Candy que lo acompañará para que fuera la madrina. Gustosa de dar un elemento esencial en el matrimonio, acepto.

El día estaba cada vez más cerca y Candy era feliz, ya que su mejor amiga se casaba. Patty comenzaba a organizar con Stear su boda, e igualmente pidió que Candy y Terry fueran los padrinos de anillos.

El joven actor estaba en Nueva York arreglado varios asuntos. Como el teatro, ya que no podía participar más en el protagonico que se le ofrecía, prefirió sería lo mejor si quería permanecer al lado de Candy durante más tiempo.

También comenzaba a averiguar sobre las sospechas que tenía con respecto a que Susana robara las cartas de Candy. Así que contrato un detective profesional, presentando una queja anónima de negligencia hacia la compañía del correo nacional de los Estados Unidos.

Pronto obtuvo lo que se empeño en encontrar, el detective descubrió unos sobres que contenían el remitente de una joven llamada Candice White Andley con destinatario a Chicago. Después puso una demanda sobre la srita. Marlown por negligencia y falta de ética.

Ella tuvo que pagar una severa cantidad de dinero para que no la metieran a prisión. Después de una amenaza por parte de un abogado de los Andley, Susana se marchó de la ciudad y se fue a vivir a Florida. Así prometiendo con mano derecha en el corazón, y firmando un contrato, Susana acepto que jamás volvería a molestar a la familia Grandchester o Andley.

La mansión Andley fue ambientada para una ocasión muy especial, la boda de Archibald Cornwall con la srita Annie Britter.

Había flores por todos lados, la capilla había sido arreglada ya que en ese lugar se llevaría el ritual adecuado para que los novios se convirtieran en esposos.

Annie estaba siendo alistada por Candy y Patty. Al terminar lucia muy hermosa, sus ojos azules mostraban una felicidad infinita, la sonrisa era la más bonita que pudo haber en el mundo. Su corazón estaba lleno de amor y alegría porque dentro de pocos minutos se convertiría en la sra. Cornwall.

Candy y Patty acompañaron a la novia hasta la capilla donde ya la esperaba el sr. Britter con su esposa que lloraba de felicidad al ver a la niñita que adoptó como su hija, vestida de novia y con un animo bastante bueno. ¿Pero como no iba a estar de buen ánimo si era su boda?