Una historia sobre seis estudiantes que se ven obligados a dejar sus vidas normales al ser elegidos en un proyecto del gobierno en donde se someteran a un entrenamiento arduo y continuo con el proposito de conformar un grupo elite. Pero antes de lo...
-¿No ha llegado Nagisa? - pregunto Tomoki, porque faltaban a pocos minutos para que las clases comenzaran- iré a checar que ya haya llegado, es extraño que no se haya reunido con nosotros- los demás asintieron.
Tomoki caminaba por los pasillos cuando escucho unos gritos y corrió para ver qué pasaba. Mientras se acercaba escuchaba lo que algunos decían "Nagisa se ha desmayado", "parece que algo le paso a Nagisa", llego a la escena y vio a Nagisa tirada en el suelo, varios alumnos estaban junto a ella, confundidos, rápido se acercó a levantarla pasado.
-¿Alguien vio que sucedió? -.
-Ella estaba caminando normal y de repente se desmayó-.
Tomoki la cargo, apresurándose a la enfermería, la recostó en una cama y espero a que la revisara la enfermera, mientras ella revisaba su condición, decidió llamar a los demás para avisarles los que había sucedido, no tardaron mucho en llegar, todos entraron para ver qué era lo que sucedía.
-Es extraño, no parece que sea falta de comida o sueño, ni que tenga anemia o que sea una insolación- comentaba confundida la enfermera- ¿Alguno tiene alguna idea de la razón? -
-La verdad es que no se me ocurre algo por lo que haya pasado, Nagisa siempre ha sido muy fuerte, a mí también me sorprende que esto le allá pasado, por si acaso es mejor que alguien la acompañe a casa-
-¿Tomoki la puedes llevar?, tengo que revisar algo-la expresión de Juzou confundió a todos- puede que tarde un poco-.
Juzou salió de la enfermería y se dirigió a buscar a Haru, en cuanto lo vio lo jalo a un lugar donde pudieran hablar tranquilos
-Haru, ¿Sabes dónde es la casa de Nagisa? - Haru asintió confundido- necesito que me lleves, Nagisa se desmayó, en estos momentos Tomoki debería estar llevándola a la base, la enfermera que no había ninguna explicación para que eso le pasara, pero tengo una idea de lo que podría ser la causa-.
-¿Está bien Nagisa? - Juzou asintió tranquilizándolo-iré por mi mochila y te guiaré-
Haru corrió a su salón por sus cosas, recordó que él, obviamente no tenía llaves de la casa de Nagisa, pero ella regresaría a su casa hoy, saco las llaves de la mochila de ella y regreso lo más rápido que pudo, se reunió con Juzou y ambos emprendieron el viaje.
Llegaron y en definitiva era una casa pequeña como antes había dicho ella, Haru saco las llaves de su bolsillo y abrió la puerta, Juzou tardó unos segundos en verlo confundido, ¿Por qué él tenía llaves?
Haru notó la mirada concentrada en las llaves, soltó una risa nerviosa- tranquilo, no son mías, son de Nagisa, yo no tengo llaves de su casa, las tome de su mochila antes de venir-.
La mirada de Juzou se tranquilizó y entro a la pequeña casa seguido de Haru, observaba a su alrededor, buscando lo que necesitaba.
-¿Sabes dónde está su habitación? - a pesar de ser una casa pequeña, había demasiadas puertas, Haru señaló una de ellas.
-¿Estás seguro de que no se enfadara porque te metas a su habitación? - en realidad no quería que se enfadara con él por dejar a Juzou entrar.
-De cualquier forma se enfadara, así que no tengo nada que perder- le reto importancia- lo que busco es más importante que el hecho de que se enoje-.
Ambos entraron al pequeño cuarto, y Juzou vio que solo había una cama y un mueble con varios cajones, justo cuando Juzou iba a abrir un cajón Haru lo detuvo.
-Ahí es donde ella pone toda su ropa y es una chica sabes-.
-Entonces ¿Sabes dónde puede esconder ella algo? - el chico negó con la cabeza.
Ambos siguieron caminando hasta que a Juzou le llamo la atención algo cuando regresaron a la habitación, había una extraña fisura en la pared, Juzou se acercó y se sorprendió al ver que era algo así como un escondite secreto, no media más que unos centímetros pero era perfecto para ocultar cosas pequeñas, empezó a abrir la pequeña puerta y encontró justo lo que buscaba, unas pequeñas botellitas de vidrio, tomo varias y las hecho en sus bolsillos, después volvió a cerrar la puertecilla. Había conseguido lo que quería y solo faltaba regresar a la base.
-No debes decir nada sobre ese escondite- a lo que Haru solo asintió- bien, entonces ya tengo lo que necesitaba, entonces me voy, recuerda cerrar bien-.
Mientras Juzou se apresuraba a la base recibió una llamada de Alice-Parece que Nagisa está empeorando, le está dando demasiada fiebre y su presión arterial sube demasiado y luego baja- sonaba exaltada.
-Llegare en cinco minutos, llama a Alfredic y dile lo que sucede, tiene que llamar al personal médico-
Juzou empezó a correr, llego lo más rápido que pudo y se reunió con los demás que estaban en algo parecido a una enfermería, pero solo era el almacén para algunas medicinas, vendas y cualquier cosa de primeros auxilios, empezó a sacar los pequeños frasquitos de sus bolsillos y buscar algunas jeringas, pero mientras buscaba empezó a marearse y con ello un fuerte dolor de cabeza -así que yo también estoy en mi limite- pensaba, mientras empezaba a pellizcarse el brazo mientras se sentaba para no perder la conciencia.
-Busquen unas jeringas y desinfectante- el dolor en su cabeza seguía creciendo, volteo con Alice-¿Ya hablaste con Alfredic? -.
-Si, dijo que enviaría a algunas personas, menciono que llegarían lo más pronto posible, pero tal vez tarden varias horas en llegar-
Yukio y Nukumi llegaron con las cosas que antes había pedido.
Juzou agarro las cosas y empezó a limpiar el brazo de Nagisa, para tomar el pequeño frasquito- Salgan un momento-obedecieron, en cuanto cerraron la puerta, empezó a abrir el frasquito, en seguida, un olor extraño se concentraba en el cuarto, rápido con la jeringa tomó el líquido, no dudó y lo inyecto en el brazo de Nagisa.
Empezaba a sentirse cada vez más débil, Tomoki hablo para saber si ya podían entrar, pero Juzou negó su entrada.
-Juzou, ¿estás bien? -.
Se apresuro a salir con las pocas energías que le quedaban, cerró la puerta rápidamente y se dejó caer al piso apoyado con la pared.
-No, yo también estoy empezando a colapsar, pero Nagisa estará mejor, definitivamente no deben entrar, pero más importante, no respiren el aire que salga de este cuarto. Esperen a que lleguen los médicos-.
-Está bien, deja de hablar o te sentirás peor- Nukumi sonaba preocupada.
Pasaron unas horas, Juzou apenas podía mantenerse consiente, no podía moverse.
A lo lejos se escucharon unos autos llegar, Tomoki fue a checar quienes eran, y por suerte era el equipo médico enviado por Alfredic. Las cuatro personas corrieron a la sala de enfermería.
La que suponían era la jefa, ordeno a sus acompañantes a preparar y usar los trajes especiales antes de entrar -Ustedes tienen que dejar de prolongarlo hasta que alcancen su límite, ahora dime, ¿tienes "eso"? - nuevamente ordeno a sus acompañantes a ayudar a Juzou.
-están dentro-Juzou le indico la ubicación de los frascos.
Con la mascarilla ajustada, fue la primera en entrar. Seguida de Juzou y los demás del equipo médico.
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