28. Anonimato.

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I see fire-Ed sheeran

No daba crédito a lo que Florencia decía y eso que era la segunda vez que lo oía. Estábamos jodidos, muy jodidos si resultaba ser cierto.

¿Quién pudo ser tan estúpido para dejarse atrapar, para delatarnos?

—Me preocupa que mi padre haya aceptado entrar a la investigación...—dice mi chiquilla alarmada.

—No te preocupes por eso, niña, nos encargaremos que no le suceda nada— aseguró papá—. La cuestión ahora es averiguar quién es ese hombre al que tienen detenido, Amador no me ha informado acerca de ninguno de los nuestros que haya tenido problemas. Me preocupa que sepa lo del cargamento, esa información es confidencial, solo nosotros sabemos con exactitud cuándo llegaría, ni siquiera el más fiel de mis hombres tiene detalles.

Exactamente, eso era lo más desconcertante. Amador sabía sobre el cargamento pero no tenía idea del ni el lugar, ni la fecha exacta del mismo, ni siquiera de la importancia de este. Aunque seguramente ya lo sospecha debido a la inversión que se realizó en una de las bodegas para hacerla aún más segura, de lo que ya era. Era imposible que alguien supiera al respecto.

—Lo mismo estaba pensando, es imposible que la información se haya filtrado por alguno de nosotros. Esto es demasiado extraño—Francis ya estaba indagando en la red, en los archivos policiacos a los que ya teníamos acceso.

—Ya mande a hablar a Amador, algo tiene que saber. Y le deje un mensaje a Gabino, es raro que no nos haya informado nada tampoco—agrega Gio. Era increíble lo eficientes que eran mis hermanos, de inmediato se pusieron a investigar e intentar arreglar lo sucedido.

—Chicos, está de más decirles que esto es muy peligroso... si la policía descubre la relación que hay entre ustedes pueden tomarte como cómplice Florencia, a tu padre, necesitan mantener un perfil bajo de aquí en más. Intentaremos evitar que suceda pero necesitamos estar preparados para cualquier cosa—nos informó mamá con seriedad.

—Por supuesto, señora Esther e intentaré averiguar más con papá—dice mi novia. Oh, no eso no iba a suceder.

—No, te mantendrás alejada de esto, Florencia—hablé por primera desde que entramos a la sala.

—Pero Gonzalo, si puedo ayudar, debo hacerlo—apremió ella.

Antes que nos adentremos en una discusión, mi madre nos interrumpió.

—Gracias, hija, pero con lo que has hecho es suficiente. No queremos arriesgarte más de la cuenta, créeme nos ayudaste mucho informándonos antes que sea demasiado tarde. Ya arreglaremos esto, no es la primera vez que nos enfrentamos a casos similares... no queremos que estés en el medio, lo evitaremos cuanto nos sea posible.

Y aunque las palabras de mamá tenían de tranquilizarme, hicieron lo contrario. Sabía que tarde o temprano nuestra relación saldrá a relucir y quien pagaría las consecuencias sería ella, mi chiquilla, mi Florencia. Tal vez no frente a las autoridades pero si frente a su padre. Si el señor Dante se enteraba que tenía una relación con el causante de su secuestro, con un delincuente... nunca se lo perdonaría y eso la destrozaría. Tendría que evitarlo a toda costa, ella no iba a tener que decidir entre su familia o yo, nunca me perdonaría ponerla en esa situación.

Nos despedimos de mis padres y la lleve de nuevo a casa. Me hubiera gustado quedarme a su lado pero necesitaba regresar junto a los chicos, buscar una solución al problema que teníamos encima. Dios... todo estaba saliendo tan bien, por qué tenía que suceder ahora.

Chica Incorrecta ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora