Menstruación Masculina [Duzzy - Slaxl] (M-PREG)

Capítulo 4

–Al fin se acabo –dice aliviado luego del ensayo el pelirrojo ya cansado, caminando junto a los demás hacia la camioneta.

Izzy se subió en la parte del conductor, se tapa la boca bostezando, Duff le queda mirando estando en la parte de copiloto a su lado. Stradlin nota que había quedado embobado, chasquea sus dedos en frente del bajista, logrando que volviera a la realidad.

–¿Volviste a tomar Vodka? –pregunta Izzy mirando la mano de Duff viendo que tenía el alcohol en mano.

–Uhh... si –miente.

Izzy se acerca haciendo que él se sonrojara levemente, el chico de boina olfatea la boca notando el leve olor de Vodka en el bajista, quien a penas tomó tan solo un poco recientemente.

–Te apesta la boca. No puedo creer que otra vez andes ebrio –reclama colocando de mala maneras las llaves, arrancando el auto de una vez en dirección al hogar.

En el transcurso todo era silencio, todos saben se que si alguien rompía el silencio Izzy iba a estallar de rabia, todos saben de que extrañamente pasa, o sea, de vez en cuando, y como no saben como está realmente prefieren andar callados a soportar los gritos, sabiendo que lo que más le molesta es saber que Duff ande ebrio y más encima estando al lado suyo.
Las calles iban casi vacías, muy pocos autos transitaban por la calles a esas horas.

Steven comía sus popcorn con tranquilidad, Axl muriendo de hambre empieza a ver al rubio, éste le devuelve la mirada.

–Dame un poco –modula con sus labios señalando la bolsa, Steven esconde tan solo más sus palomitas. Axl une sus manos implorando que le de popcorn por el hambre que tenía pero Steven seguía negándose y enfureciéndose ya que todo el día le jodieron con compartiera.
El pelirrojo extiende sus manos hacia la bolsa pero ganando un fuerte golpe en la mano.

–¡Mis popcorn! –proclama a la defensiva Steven.

–¡Steven! –exclaman los tres, mientras Izzy para el auto bruscamente, haciendo que le mirara con odio.

–¿Podrías... quedarte callado en vez de reclamar por tus malditas popcorn?

Todos quedaron callados, el rubio baterista siendo amenazado con la mirada y el tono de voz, él tan solo asiente repetidas veces con la cabeza.

–Bien –vuelve a ver al frene volviendo a conducir hacia el hogar, terminando el resto con un silencio incómodo, un silencio que para él es agradable haciéndole suspirar apretando levemente el manubrio.

Ya en el hogar, estaciona el auto, los demás bajan y al ser el último al entrar siguiendo estar irritado de la nada Slash se le acerca.

–Sé que estás molesto, y no tengo la culpa, ¿qué tal si vamos los dos a un bar ahora mismo para que te relajes?

–No –niega completamente enfurecido pero Saul no muestra temor ni señal de rendirse.

–Vamos, será divertido, te despejas un poco volvemos a casa y fin de la historia.

Duff escucha la conversación y se encontraba molesto pero esta vez si estaba borracho, su botella de Vodka estaba a la mitad y la afirmaba lo más fuerte que podía mientras tambaleaba hiendo hacía ambos.

–Déjeme ir con ustedes –dice entre tanto hipo y con una vista borrosa.

–Duff, sigo molesto contigo.

–¿En qué momento pregunte? -aclara el mas alto aún estando ebrio.

–No –responde a lo que dirige la vista a Slash –y punto –se larga.

Duff le toma del brazo, una mala idea ya que Izzy le da un golpe en el rostro mientras le grita que ni le toque, él se soba el lado izquierdo se su rostro, quedando más aturdido.

–¡Pareces mujer con la regla! –exclama aturdido viendo cómo Izzy subía las escaleras.

–¿Y por qué será? ¡¿Eh?! –responde dando pregunta muy molesto.

Duff y Slash se quedan mirando un rato estando confusos hasta que de la nada se ve a Izzy bajar con una chaqueta esta vez puesta, una chaqueta de cuero.

–¿Sabes, Slash? Creo que tienes razón, acá solo tendré más estrés.

–Ok, adelántate, ya sabes a cuál. Iré por mi chaqueta –responde.

Izzy se larga sin nada más que llaves del hogar yendo al bar.

Las horas pasaban, Izzy tomaba con tranquilidad una cerveza esperando a su amigo y compañero de banda, pasaban las horas siendo más largas.

–Señor –avisa une mesero –, le pedimos de que termine eso y salga, vamos a cerrar. Lleva mas de dos horas acá ¿a quién esperaba?

–A un buen amigo... si es que es podría decir...