—La verdad, Chan, es que no hay ningún director ni tampoco una escuela de Artes Marciales y Defensivas —confesó Seungcheol.
El chico en el asiento trasero frunció el ceño con confusión. Si nada de lo que le había hablado existía, ¿quién era ese chico y como sabía tantas cosas sobre él?
—P-pero, ¿quién eres entonces? —inquirió el azabache— ¿Cómo sabes tanto sobre mí? Mi nombre, que sé Artes Marciales y tiro con arco... eso nadie lo sabe —comentó, empezaba a desconfiar de aquel extraño.
—Te seré sincero, Chan —suspiró el mayor—. Obedezco órdenes, y estas órdenes me impiden darte a conocer la razón por la que fui por ti. No puedo hacerlo ahora, pero en cuanto lleguemos a mi casa lo sabrás.
—¿Entonces no habrá ninguna beca? —el adolescente sonaba decepcionado.
Seungcheol pudo ver, a través del espejo, como una mueca de tristeza cruzaba el rostro del chico; el niño le recordaba a Samuel... no podía ser duro con él, no podía permitir que él también saliera herido.
—Chan, no hay beca... pero tus habilidades nos serán muy útiles en un futuro cercano —alentó—. Sólo espera a que lleguemos a mi casa y lo sabrás —reiteró.
[...]
—Yo creo que deberíamos decirle la verdad —MingHao miró de reojo al atemorizado Joshua y luego miró al rubio.
—¿Por qué? Es divertido —alzó las cejas, por su puesto lo decía en broma. Sería mejor decirle la verdad ahora—. Bueno Joshua, quiero disculparme contigo por esto... no es un secuestro de verdad.
—¿Q-Que? —tartamudeó— ¿Entonces qué es esto? ¿Una cámara escondida para un programa de televisión?
—No.
—¿Me dejarán libre?
—No aún.
—¿Qué? ¿Por qué? —protestó, con algo más de confianza— ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué rayos quieren de mí?
—No puedo decírtelo ahora, lo lamento —lo miró por el espejo y doblo en la calle de su casa—. Pero en cinco minutos lo sabrás —sonrió.
[...]
Al igual que sus compañeros, Jihoon y Seok Min también estaban cerca de la casa. Junhui se mantenía callado y ajeno a lo que le deparaba de futuro. Creyendo que de verdad había conseguido un profesor de coreano.
—¿Esta es tu casa? —preguntó, sorprendido al ver la enorme casa de Jihoon.
La casa ocupaba la mitad de la cuadra, era realmente moderna y preciosa; la entrada estaba cercada con un enrejado negro y un portón automático que se abría cada vez que alguno de los dueños de casa presionaba el botón de su control, el patio delantero tenía el césped prolijamente podado con arbustos igual de cuidados. Y la enorme casa era sin duda, una casa de ensueño.
—¿Te ganaste esta casa sólo siendo profesor de coreano en Corea? —consultó, impresionado.
—En realidad, Junhui, no soy profesor de coreano —admitió—. Soy mucho mejor que eso.
—Debí imaginarlo, ¿qué clase de profesor particular tiene un asistente? —comentó con lentitud, pensando con cuidado cada palabra— Además, ¿cómo un profesor puede tener semejante casa?
—No subestimes a los profesores, Junhui, te sorprendería el dinero que pueden obtener con su trabajo —Seok Min habló con firmeza, mirando a su nuevo compañero.
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Los Reclutas (Seventeen) [1ra Temporada]
Fanfiction[Historia ganadora de la 2da edición de los KPOP AWARDS. En la categoría: Historia original] Una serie de asesinatos invade el país y ni la misma policía logra entender cual es el motivo de estos. Es hora de que ellos entren en acción, pero est...