CAPITULO 37 Tierra.

362 33 4
                                    


---Havi---

A pesar de que este almirante es muy joven, Odín sabe lo que hace, puede tener una apariencia tierna pero en realidad es tan serio con su trabajo, tan competente y realmente uno de los mejores almirantes.

Tiene un puesto debajo de mí, pero en verdad puede ser muy disciplinado y es atento, ayuda a los demás, es tierno y bueno solo con los que debe serlo.

  Aquí la experiencia es lo que cuenta, saber utilizar la espada y defender a los más necesitados.

Yo soy el único que sabe que Odín tuvo algo que ver con Barba Negra, pero no sé a ciencia cierta qué fue lo que ocurrió entre ellos.

Espero que todo esto salga bien, necesito encontrar a Hiroki, necesito salvarlo de ese maldito pirata desvergonzado.

Debo recuperarlo, seguramente mi amado debe estar asustado, no puedo perder más tiempo, está embarazado, en verdad espero que no le estén haciendo nada porque soy capaz de todo.

-Almirante Odín.
-¿Qué ocurre Havi?
-¿Cree que él sepa algo de mi prometido?
-No lo sé, lo importante es que no haya un enfrentamiento.
-¿Aun lo extrañas?
-Havi no preguntes cosas innecesarias.
-Lo siento mucho.
-Ah, -suspiro- lo mejor es hablar civilizadamente.
-Pero aun así no dejes de lado tu espada, nos enfrentamos con piratas.
-Lo tengo claro.

El barco comenzó a acercarse hasta colocarse a nuestra par.

-No disparen, -hablo Odín- sigan mis órdenes.
-Así será.

Los piratas colocaron un tablón para unir los barcos, Barba negra empezó a caminar acercándose a nosotros, pero lucía muy diferente a como lo recordaba.

Los piratas colocaron un tablón para unir los barcos, Barba negra empezó a caminar acercándose a nosotros, pero lucía muy diferente a como lo recordaba

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

  -Vaya Almirante Odín, se ve más lindo desde la última vez que lo vi.

El Almirante cruzo los brazos y lo miro.

-Aunque tú te has hecho un gran cambio, ya no puedo llamarte barba negra, ¿ahora cómo te llamo?
-¿Vas muy deprisa no? –sonrió- Solo dime Kensuke.
-Mmmmm.
-Y pues quise hacerme un look radical, ¿te gusta?
-En fin, -suspiro- necesito pasar por tus tierras.
-¿Qué me ofreces a cambio?
-No te ofreceré nada, solo quiero pasar por tus tierras, estamos buscando a un pirata.
-Mmmm, ¿Quién es?

Odín me miro y camine a su lado.

-Estamos buscando al Antillano.

Ese hombre me miro y sonrió.

-¿Es tu amante? –le pregunto a Odín.
-Eso es algo que no te interesa.
-¿Enserio? –gruñó- Así que utilizaste tus encantos para engatusar a otro hombre.
-...

Odín apretó fuertemente los puños y trato de tranquilizarse.

-Entonces es verdad lo que digo, -rio- vaya sí que eres fácil, Almirante.

No aguante más y me dirigí hacía él con mi espada y de un movimiento me detuvo.

-Te hace falta muchos años de entrenamiento para superarme, eres un vil principiante, cuando sepas manejar la espada me dices.

Me aventó fuertemente al piso.

-¡Havi!

Odín estaba a punto de ayudarme pero él lo detuvo.

-Suéltame. –gruñó.
-Nunca te vi tan caritativo, ¿Por qué planeas ayudarlo? –comento ese pirata.
-Eso es algo que no te importa.

Ese pirata gruñó y los tripulantes empezaron a preparar sus almas.

-NI SE LES OCURRA DISPARAR. –comento.

Me levante y me coloque de nuevo a lado de Odín.

-Solo queremos pasar por sus tierras, el Antillano secuestro a mi prometido, está esperando a mi hija.

Ese pirata me miro y suspiro.

-Los dejaré pasar por mis tierras con una sola condición.
-Esto no saldrá bien. –susurro Odín.
-¿Qué condición? –pregunte.
-Que Odín venga a mi barco unos días.
-¿Ah? –me sorprendí- No lo dejare.
-¿Acaso te importa? –gruñó el pirata.
-Es...
-Está bien, -comento Odín- acepto, así que déjalos pasar.
-Almirante, -lo mire- no es...
-Oh, -sonrió el pirata- lindo sacrificio, parece que se aman.
-Idiota. –gruñó Odín y camino hacía su barco- Havi busca a tu prometido, los alcanzare luego.
-Pero...
-Es una orden.
-Con permiso. –hizo una reverencia el pirata y se fueron.

Espero que ese pirata no le haga nada, ahora debo encontrar a Hiroki antes de que algo malo pase.

Les ordene a los demás que empezaran a mover el barco para apurarnos.

Afortunadamente no todos escucharon la plática que tuvimos, algo que me tranquilizo.



---Nowaki---

Disfruto cada momento estando al lado de mi amado, me siento completo por fin, no tengo queja alguna, tengo a mi hijo y a mi amado que espera a nuestra niña.

Estaba jugando con mi niño cuando vi que mi amado tenía lágrimas en sus mejillas.

Le pedí a Miyagi que jugará con mi niño.

-¿Hiro-san?
-Nani.
-¿Qué ocurre mi amor? –lo tome del mentón.
-Nada, solo...
-Por favor Hiro-san confía en mí.
-S-Solo pensaba en el padre de James.
-¿Cómo?
-Necesito hablar con James, ahora que recuerdo me menciono que vivió con su tía, ¿de qué hablaba?
-Debemos hablar los tres.
-Sí.
-Ve a nuestro camarote en un momento llevaré a nuestro hijo. –bese su frente.
-Hai.
-Te amo Hiroki.
-Y yo a ti Nowaki.

Lo bese tiernamente. Mi amado se dirigió a nuestro lugar de descanso y me dirigí hacia Miyagi cargando a mi hijo.

-Vamos hijo tenemos que ir con tu mamá.
-¿Pasa algo papá?
-Hiroki quiere que le cuentes lo que ha ocurrido en este tiempo.
-Oh.
-Así que ¿vamos?
-Sí.

Lo lleve hasta el camarote y mi amado miraba por la ventana. Nos sentamos en la cama.

-Mami, -lo abrazo mi amado- te diré todo.
-Gracias James.

Mi hijo le habló sobre Akuma, el pirata que se lo había llevado, diciéndole que era su verdadero papá, sobre cómo se lo llevo hasta esa isla y como su "tía" Aikawa y su padrino Haruhiko lo cuidaban y siempre estaban con él.

-Nowaki, ¿conoces la cara de Akuma? –pregunto mi amado.
-Lo siento, no la conozco.
-Yo tampoco mami, perdón.
-Tranquilo mi niño. –le beso la frente.

Los abrace a mi pecho y deje que se recargaran.

-Son lo que más amo en la vida, no los dejaré jamás, así que no lo duden.

Hiroki me beso y mi niño nos abrazó fuertemente.

-¿Dónde vamos papá?
-Ahora vamos a la isla margarita.
-¿Eh?
-Ahí estaremos hasta que yo pueda recuperar mi apellido, y demostrar mi inocencia.
-Ya verás que lo recuperaras. –sonrió mi amado.
-CÁPITAN, -grito uno de mis tripulantes- TIERRA A LA VISTA.
-Parece que ya llegamos. –comente.
-Wiii.
-Vamos a cubierta.

Los lleve hacia la cubierta y la vista es tan impresionante, una de las mejores isla que he conocido y realmente un buen lugar donde vivir.  

  -Es hermosa.
-Será nuestro hogar, donde seremos felices los cuatro.
-Yo soy feliz donde tú estés Nowaki.
-Te amo.



---Shinobu---

Seki había ido al camarote de su capitán y yo camine hasta la cubierta, esperando a que me dejarán ir de este barco.

-¿Shinobu?
-Akio, -lo mire- hola.
-¿Estás bien?
-N-No. –susurre.
-¿Qué ocurre?
-Debo irme de aquí.
-¿Por qué?
-No puedo decirlo, -solloce- yo...
-ERES UN INFELIZ.

Pude ver como Akihiko aventaba a Seki al piso y corrí a su lado.

-Después de que te he dado tanto, ¿planeas dejarme?
-Yo... -comencé a decir pero Seki negó con la cabeza.
-Lo siento Capitán pero mi prioridad es Shinobu.

Ese hombre se acercó a nosotros.

Sentí como mi corazón se aceleraba y el miedo comenzaba a dominarme, cuando un aroma empezaba a recordarme lo que ocurrió.

Akihiko solo me miro y suspiro.

-Váyanse, si te llego a necesitar te buscaré.
-Gracias capitán.

Ayude a levantar a Seki y él me dirigió hacia una barca que le dieron. Akio me abrazo fuertemente y me dijo que esperaba verme.

-¿A dónde nos dirigimos? –pregunte.

Él me abrazo fuertemente.

-A la isla margarita, juro que te cuidare. –beso mi frente.

Alma de Piratas (Nowaki x Hiroki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora