Alma de Piratas (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 69 Último esfuerzo.

---Miyagi---

Intente quitarme las sogas pero estaban muy apretado.

Maldita sea...

Tengo que salvar a los chicos.

Ese maldito de Akihiko.

Juro que si les pone un dedo encima yo lo mataré.

No dejaré que se salga con la suya.

Tengo que escapar.

No puedo quedarme aquí sin hacer nada.

Pude ver a muchos piratas tomando y jugando.

-Así que tú eres la pareja de mi lindo rubio.
-¿QUÉ HAS DICHO INFELIZ?
-Yo me acosté varias veces con ese chico, que por cierto tiene un delicioso cuerpo.
-INFELIZ, BASTARDO. –grite.

Ese hombre tenía un parche en el ojo y su cabello es negro.

-ES TAN DELICIOSO.
-IDIOTA, JURO QUE CUANDO ME SUELTE TÚ...

Él se incoo y me sujeto con fuerza del cabello.

-Tú solo eres un vejestorio.
-Juro que te mataré, no quiero que le pongas un dedo encima a mi Shinobu.
-Jajajaja, -soltó una carcajada- a mí nadie me impide nada.
-Infeliz. –masculle.

Las sogas lentamente comienzan a ceder.

-Simplemente ese rubio será mío.
-...
-No te lo imaginas jadeando deba de mí.

Cuando sentí mis manos liberadas de un movimiento coloque la soga en el cuello de ese estúpido.

Me alegre internamente de que toda la tripulación se marcharan cuando este tipo llego.

-Maldito. –susurro.
-¿Qué se sienten cambiar los papeles?
-Eres un...
-No te preocupes que yo no soy un asesino como tú.
-...
-¿Dónde se llevaron a Shinobu?
-...
-¿DÓNDE ESTA? –apreté más la soga.
-N-No lo sé.
-¿CUÁL ES EL CAMAROTE DEL IDIOTA?
-Te r-refieres a mi capitán. –tosió.
-Sí.
-Al fondo a-a la izquierda.
-Gracias.

De un movimiento le di un golpe en el estómago dejándolo inconsciente.

Tome su espada y corrí hasta la habitación.

Escuche unos sollozos y los gritos del príncipe Hiroki.

No espere más y entre a la habitación.

Vi como ese idiota estaba encima de Hiroki en el piso, lo besaba y comenzaba a desnudarlo.

-NO ME TOQUES, NO QUIERO.
-Cállate. –le dio una bofetada.

Corrí hasta ese lugar y lo aparte de Hiroki, lo patee fuertemente y tome al príncipe.

Lo cargue y me lo lleve hasta la otra habitación.

-G-gracias, -sollozo- gracias.
-Tranquilo príncipe no dejaré que le hagan daño.

Lo baje y él abrió la puerta.

Al entrar vi a Shinobu tirado en el piso.

-¡¡Shinobu!!

Hiroki cerró la puerta con seguro y ambos nos acercamos a mi amado.

-Mi amor, háblame, Shinobu-chin.

Él lentamente abrió sus ojos y me miro.

Las lágrimas comenzaban a descender por sus mejillas.

-Miyagi, -sollozo- mi amo él...
-Aquí estoy amigo.

Shinobu abrazo a Hiroki y yo suspire.

-Ahora debemos irnos, pero estoy seguro que el Antillano está en camino.
-Lo siento tanto Hiroki-sama por mi culpa.
-No pasa nada, estoy a salvo, además prefiero que me lastimen a mí en vez de a ti.
-Pero...
-Ahora como dice Miyagi debemos irnos, lo importante es escapar y...

Se escuchó como empezaban a golpear la puerta con fuerza.

-Mierda. –masculle.

Empecé a mover algunos muebles para atorar la puerta.

Empezaban a forcejear y me quede frente a los chicos.

-MALDITA SEA ABRAN ESA ESTUPIDA PUERTA CABRONES. –grito Akihiko.
-Sí capitán.
-No se preocupen, -comente- los protegeré.

---Nowaki---

Maldita sea...

Juro que esta vez no me voy a detener.

Esta vez lo voy a eliminar.

No dejaré rastro de ese tipo.

Maldito seas Akuma.

Te mataré, lo juro.

No dejaré que lastime a mi Hiroki.

No puedo permitirlo.

Ya ha sufrido mucho por mi causa.

No puedo permitir que siga sufriendo.

Él debe ser feliz.

A lado de nosotros, su familia.

No permitiré que le pongan un dedo encima.

Mi familia es lo más sagrado que tengo.

Lo voy a destruir.

Ese idiota, no sabe con quién se está metiendo.

No dejaré rastro de él.

No permitiré que vuelva a hacer daño.

Ha matado a tanta gente.

Ha lastimado a muchos.

No puedo permitirlo.

Tengo que terminar su reinado.

Él solo será un horrible recuerdo.

No dejaré que haga de nuevo de las suyas.

-¡¡CAPITÁN!!!
-¿Qué ocurre? –pregunte.
-El barco está a la vista.
-¡¡QUÉ!!
-El barco de sangre negra no está tan lejos de nosotros.

Por fin lo encontramos.

-ALCEN LAS VELAS, AUMENTEN LA VELOCIDAD.
-A la orden capitán.

Me dirigí al centro de mi barco donde todos mis compañeros comenzaron a hacer lo que les pedí, tome el telescopio y mire el barco.

Puedo observar que hay mucho movimiento.

Maldición.

-MÁS RÁPIDO.
-¡¡Sí!!
-Relájate un poco Antillano. –comento Seki.
-No puedo, mi amado está en peligro.
-Pero no ganas nada con alterarte.
-Lo sé pero... MALDICIÓN.
-Los vamos a rescatar. –comento Kaoru.

Lo mire y respire profundamente.

-Lo siento mucho.
-¿Cómo?
-Su majestad lo he traído en aguas peligrosas, usted debería estar en su reino, esto tal vez sea...
-Se me defender. –comento.
-Eso...
-Tuve un entrenamiento riguroso para cuidar a mis tres hermanos, domine el arte de la espada y el enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
-Vaya, -me sorprendí- no pensé que usted...
-Hay muchas cosas que no sabes de mi cuñado.
-Por favor solo quédese con mi tripulación, no quiero que su vida corra riesgo alguno.
-Está bien, tampoco quisiera ser una distracción.
-Gracias.

Camine hasta el timón y a cada minuto nos acercábamos más al barco.

-Solo un poco más.
-¿Cuál es su indicación? –pregunto Kraken pasándome mi sombrero.

Me coloque el sombrero y desenvaine mi espada.

-ACABEN CON TODA LA TRIPULACION DE AKUMA, RECUPEREN A LOS REHENES Y DEJEN QUE YO ME ENCARGUE DE ESE INFELIZ ¿ENTENDIDO?
-¡¡¡Siiiiii!!!!
-LA PRIORIDAD ES MANTENER A SALVO A SHINOBU, MIYAGI Y A MI PROMETIDO HIROKI.
-Así será capitán.
-SEKI ACERCATE MÁS AL BARCO.
-Sí capitán.

Me coloque mi sombrero y desenvaine mi otra espada.

Me acerque a Kraken.

-Protege al rey, no dejes que nada le pase.
-Así será.
-Te lo encargo.
-No se preocupe, lo protegeré con mi vida si es necesario. –coloco su puño en su corazón.
-Gracias.
-Capitán...
-¿Sí?
-Tenga cuidado.
-Sí.

Llegamos al lado del barco y mis tripulantes colocaron una tabla para poder pasar.

-AVANCEN SIN TEMOR, ESTE DÍA GANAREMOS...

---Odín---

Nos vamos acercando al reino de castilla.

Por fin volveremos después de algunos días.

Espero que con estas pruebas pueden dictaminar la inocencia de Nowaki.

Se lo merece.

Él ha sufrido bastante.

Bueno aunque también Kensuke.

Estas pruebas son contundentes, incluso para barba negra.

Todos saldrán bien librados.

Y eso me enorgullece.

Por fin serán felices.

Son una gran familia.

Nunca me hubiera imaginado que Havi y Nowaki fueran hermanos, o medios hermanos.

Sí que barba negra tiene sus secretos.

Aunque yo...

También tengo uno.

Es una carga muy grande.

¿Cómo puedo decírselos?

-Ah, -suspire- ¿Por qué no hable antes?
-¿De qué? –pregunto Kensuke que fumaba un puro.
-Kensuke.
-¿Huh?
-Tengo una confesión que hacerte.
-¿De qué trata?
-Nosotros... -respire profundamente- tenemos algo que nos une.
-¿Huh?