CAPITULO 57 Oferta.

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---Odín---

En este momento esto en la celda del barco, encadenado como si fuera el peor de los criminales, cuatro marinos protegen mi celda como si me pudiera escapar.

De solo mirar la celda sonrió divertido de recordar cómo era yo cuando capturaba a los piratas y los encerraba en celdas como estas.

Mis compañeros acostumbraban a insultarlos y hacerles la vida imposible.

Aunque yo nunca estuve de acuerdo.

Jamás pensé en mis días como "pirata" o mejor dicho, ayudante en la tripulación de barba negra, nunca imagine que nos fueran a capturar.

Pero...

Ahora que soy un Almirante...

Soy acusado por traición.

En parte los he traicionado y lo siento mucho.

Pero Nowaki es inocente de todo lo que se le acusa y Kensuke no ha hecho nada malo.

Maldición...

Espero poder enfrentar esto.

-Quien lo diría, -dijo un marino- el gran ALMIRANTE ODÍN tras las rejas.
-Difícil de creer. –se carcajeo otro.
-Tal vez deberíamos de divertirnos con él.
-Se rumora que se acostó con barba negra.
-Entonces ya está acostumbrado a que le den por atrás.
-¿O me equivoco Almirante Odín?

Los cuatro me miraron y solo mire el suelo.

-Se ve tan frágil, mierda quiero follarlo aunque sea una sola vez.
-Opino lo mismo.
-¿No creen que se den cuenta?
-No, -se rio otro- además míralo, esta todo sumiso y estoy seguro que se dejará hacer lo que quieran.

Abrieron mi celda y entraron.

-Sinceramente, -comento el más alto- siempre le tuve tantas ganas, quiero ser el primero.

Se acercaron hasta mí y levantaron mi mentón.

-Demonios es tan hermoso, ¿Cómo no nos dimos cuenta?
-Porque este idiota solo nos daba órdenes, pero ahora nosotros seremos quien le dé órdenes a él.
-Sí me ponen un dedo encima se van a arrepentir. –los mire.
-Oh~ que hermoso, la gatita sacando sus garras.

Uno de esos tipos comenzó a acariciar mi pierna.

-Mierda, quiero penetrarlo ya mismo.

Estaba a punto de besarme y le di un cabezazo.

-Auch, -cayó al piso- maldito idiota como te atreves.

Uno de los tipos estaba a punto de pegarme y de un movimiento lo patee en su entrepierna, agradeciendo que las cadenas me ayudaran.

-YA ME CANSASTE.

Entre los cuatro me sujetaron y trate de empujarlos.

Sentí como el barco se detenía y empecé a patalear.

-ALTO AHÍ. –grito Lyo.

Los marinos se separaron de mí y se apartaron.

-¿Qué están haciendo?
-Nada Almirante.

Él me miro y me quito las cadenas pero me dejo las esposas.

-Andando.

Caminamos por las celdas mientras los marinos comenzaban a murmurar.

"Al menos Lyo me salvo inconscientemente."

Al llegar a cubierta me sorprendí demasiado.

Se supone que deberíamos de estar en el lugar donde está la santa inquisición pero...

¿Qué hacemos en el reino de Agni?

Lyo me sujeto del brazo y me llevo al puerto.

-Almirante Lyo, -comento Agni- gracias por traerlo.
-No hay de qué.
-¿Nos podría dejar solos?
-Claro.

El Almirante hizo una reverencia y volvió al barco.

-Nos vemos de nuevo Yoshima Odín. –me miro.

  -A-Agni, -sonreí- o debería decirte Colmillo.
-Así que sabes quién soy yo. –cruzo los brazos.
-Sí.
-Es una lástima, nadie te creerá.
-Se los diré a todos.
-Como he dicho mi amor, nadie te hará caso, has traicionado a la marina, irás a tu ejecución, y después de ti mandaré a mi hijo y a la estúpida nana.
-¿Q-qué?
-Soy el único que puede salvarte, -sonrió- cásate ahora conmigo o mure con tu estúpido amante.
-...
-¿Acaso creíste que no supe de tu traición con mi hijo?
-Maldito. –gruñí.
-¿Y bien? ¿Aceptas mi oferta?

Maldición...

No deben de atraparlos, no ahora...

Necesitan tiempo, tal vez debería encontrar más papeles en su contra.

-¿Y si me niego?
-Morirás a manos de la Santa Inquisición y mi hijo también, luego me encargaré de todos, y más de Nowaki, mi hijastro.

"Maldición, debo de salvarlos."

-Me casaré contigo.
-Muy bien dicho, -sonrió y me sujeto del brazo- ahora vamos al palacio nos esperan.



---Kaoru---

Me quede dormido con mis lindos angelitos ya que me sentía un poco cansado, hasta que abrí los ojos y me di cuenta que era de noche.

Mis amores estaban en su cuna y mi amado Ryu estaba sentado en la ventana mirando a través de ella con una hermosa sonrisa.

Solo llevaba ropa ligera y se veía tan hermoso.

Me levante de la cama y camine a su lado tomándolo de la cintura.

-¿Te desperté?
-Para nada. –bese su frente.
-Ya veo.
-¿En qué piensas?
-En nuestra familia.
-¿Huh?
-Me siento tan feliz Kaoru.
-Me alegro que te sientas así.
-Me has hecho el hombre más feliz en la vida Ryo.
-Eso debería decirlo yo.

Lo abrace más a mi pecho y lo bese.

-Te amo Kaoru.
-¿Por qué lloras mi amor?
-E-Es que últimamente he pensado en mí pasado y me es difícil creer que sea feliz a tu lado y que tengo dos hermosos hijos.
-Es nuestra realidad amor mío.
-Me siento completo pero a la vez extraño.
-Entonces déjame que sea yo quien te proteja y te demuestre día a día que te amo y que podemos ser felices.
-Kaoru...
-Voy a eliminar todos tus miedos con mi amor y mi cariño.
-No sé qué haría sin ti.
-Tal vez estarías con otro hombre y yo buscándote.
-Baka.
-Ryu eres tan sexy, siempre tenías a muchas personas siguiéndote.
-N-No es verdad. –se sonrojo.
-Así es mi amor, yo muchas veces tenía que callarlos, y decirles que tú eres mío.
-¿Enserio?
-Sí, -sonreí- eres muy popular, solo hay que recordar a ese Zess.
-¿Sigues molesto con él?
-Pues es más que obvio.
-Deberías de olvidarlo.
-EN ese caso deberías de olvidar tú también el pasado.
-Kaoru.
-¿Te parece?
-Siempre me convences. –me beso.
-Digamos que soy muy bueno para eso.

Lo cargue y lo lleve a la cama, me coloque encima de él.

-Eres tan hermoso.
-B-Baka.
-Tú sonroje y ternura me hacen enloquecer.

Coloco sus brazos alrededor de mi cuello.

-Kaoru, hazme tuyo.
-Ryu sabes cómo encenderme.

Empezó a morder mi cuello y yo metí mi mano debajo de su camisa.

-Ahhh K-Kaoru.
-¿Me extrañaste? –susurre en su oído.
-Mucho.
-Lamento haberte descuidado en este aspecto.
-B-Baka.

Nos besamos apasionadamente y Keitaro comenzó a llorar mientras Kichiro solo reía.

-Creo que también quieren de nuestra atención.
-Supongo. –jadeo un poco.
-Maldición estoy un poco excitado.
-Después. –beso mi cuello.
-Eres tan malo Ryu, solo me enciendes.
-Baka.



---Hiroki---

Ya es media noche y Nowaki no ha llegado, nuestros hijos están dormidos y yo me recosté en la cama.

No entiendo porque me siguen cortejando si ya tengo a mi familia.

Aunque no puedo decir que mi pareja es Nowaki porque lo pondría en peligro, la marina está en el reino y no quiero que los encuentren por mi culpa.

-Hiroki-sama, ¿puedo pasar?
-Adelante Shinobu.

Mi amigo entró.

-Debería de estar dormido, -se sentó a mi lado- ya es tarde.
-Estoy esperando a Nowaki.
-No ha de tardar.
-Lo sé, -suspire- ¿y por qué estás despierto?

Él se sonrojo y desvió su mirada.

-¿Shinobu?
-B-Bueno yo y... y Miyagi pues....
-¿Lo hicieron?
-H-Hiroki-sama no lo diga así como si nada.
-Por eso caminaste extraña.
-...
-Solo bromeo.
-Hiroki-sama es usted malo conmigo.

Revolví su cabello y lo abrace.

-¿Y Miyagi?
-Está dormido, es que desde la tarde hasta ahorita pues...
-Ya entendí.
-Bueno me iré a dormir, solo quería saber cómo estaba.
-Descansa Shinobu.

Después de unos minutos mi puerta se volvió a abrir.

-Hiro-san.
-¡Nowaki!

Corrí a sus brazos y lo abrace.

-Qué lindo recibimiento.
-Te extrañe baka.
-Y yo a ti, -me beso la frente- tanto.
Me acurruque en su pecho.
-Debo de castigarte Hiro-san.
-¿Eh? –lo mire.
-Alguien me dijo que te vinieron a cortejar.
-N-Nowaki.
-Sí te castigo es porque eres muy lindo.
-N-No es mi culpa.
-Lo es porque eres perfecto, pero sabes qué, -sonrió- eres solo mío.



---Akihiko---

Camine por la cubierta del barco y vi los cadáveres de esos mocosos.

-¿Qué hacemos con ellos?
-Mándelos al reino de Castilla.
-Sí Capitán.

"Quiero ver la cara de sorpresa de ese rey y de mi amado Hiroki cuando vean a sus hermanos llenos de agujeros"

Alma de Piratas (Nowaki x Hiroki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora