De repente siento unas manos sobre mis hombros, doy un sobresalto y me giro para ver de quien se trata.
-Te envié cinco mensajes – reprocha Lorian con los ojos aburridos – no sabía dónde estaban.
Suspiro aliviada, ya tengo una excusa para dejar a este charlatán tirado.
-Estuvimos aquí todo el tiempo – respondo.
Raiko está algo molesto, evidentemente no le agrada la presencia de Lorian como si lo hubiera interrumpido en su intento absurdo por seducirme. Esta más que claro que no estoy interesada en este chico, es él el que sobra aquí.
-¡Oh! – Exclama Lorian – perdón no quise interrumpirlos – da unos pasos hacia atrás como si quisiese irse.
-No, está bien – me apuro a decirle, lo miro fijo con los ojos bien abiertos.
Al instante Lorian capta mi señal de "auxilio" pero no puede con su genio y se ríe ligeramente burlándose de la situación.
Mi amigo el charlatán ha dejado de hablar inhibido por la presencia de Lorian. La situación es algo extraña, no sé muy bien si decir algo o no. Lorian se ha pedido un Martini y lo espera apoyando con los dos brazos en la barra llenando el peso de su cuerpo hacia ella.
Vuelvo a girar para ver a Agnes que está bailando e histeriqueando a su compañero en la pista; el chico la toma de la cintura con una sola mano y le conversa en el oído, ambos ríen y bailan muy cerca el uno del otro. A Agnes parece gustarle, siendo honesta el chico es atractivo pero es tan cliché.
-Pobrecito – comenta Lorian – Háblale – Me señala con la barbilla a Raiko con un gesto irónico. Arrugo la nariz y niego con la cabeza lo que causa en él una risita divertida.
-Al menos se amable con él y dile que no estas interesada – añade ladeando su cabeza hacia el costado.
Lo miro de reojo y suelto un suspiro de protesta, giro mi cuerpo hacia Raiko dando completamente la espalda a Lorian.
-Escucha – Digo –Lo siento pero... - Antes de que pudiera decir otra cosa, el muchacho dibuja una sonrisa y toma su botella.
-Lo sé, no te preocupes. Me he dado cuenta – lleva la botella a la boca.
Quedo algo confundida, entorno mis ojos y giro otra vez pero de manera dudosa ¿Por qué sigue aquí si sabe que no tiene posibilidad conmigo? Es bastante tensa la situación que genera. Escucho la risa de Lorian a mi lado, resoplo y ruedo los ojos.
Al cabo de unos minutos Raiko se aleja al fin, quizás me comporte algo aburrida o algo así pero es que no me ha sentado bien su constante parloteo, ni siquiera era gracioso.
-Así no conseguirás pareja Emma – se burla Lorian ahora más distendido y dispuesto a atosigarme – Debes ser más simpática.
- Cállate – contesto con ojos aburridos – a demás tú no puedes hablar de simpatía.
-Disculpa, pero mi personalidad funciona.
-Entonces corre a darle clases al pobre chico que lo necesita.
-¿A quién? – Pregunta - ¿A tu enamorado? – Sonríe mostrando sus dientes – Ni loco, y menos su es para seducirte a ti.
Volteo hacia él rápidamente y entorno mis ojos, él bebe su trago lentamente y me observa por encima de la pared de la copa.
-¿A qué te refieres? –pregunto con un tomo misterioso llevando la barbilla un poco hacia arriba y con los ojos aún entornados.
- Me refiero a que no gastaría mi tiempo en algo que no funcionará – aprieta sus labios y arquea sus cejas.

ESTÁS LEYENDO
Athmen
FantasiVisitar la casa de un viejo conocido de su familia es solo el primer paso que Emma debe tomar para poder entrenar un don increíblemente peligroso que le fue otorgado. Llena de odio ella y su hermano están tramando su venganza sobre aquellos que no...