15. ¿Algo que tengas que decir? [Editado]

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¿Ya has visto lo que han publicado sobre ti? —Eleine

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¿Ya has visto lo que han publicado sobre ti?
Eleine

Eh, ¿qué cosa?
Heaven

Eleine ha enviado una imagen.

Puta madre. ¿Es en serio?
Heaven

Mi parte favorita es "...el equipo de "El escándalo" creemos que la desaparición de Otto se debe a que, según una de nuestras fuentes, él y su nueva amiga, Heaven (una nueva Senior) tuvieron una fogosa pelea antes de su huída". ¿Algo que quieras contarme, amiga?
Eleine

¡Nada de nada!
Heaven

Esa noticia no hizo más que abrir mi apetito de información. ¿Cuál era la verdadera razón de la huida de Otto? Ahora tendría que cerrar mi cuenta de Twitter antes de que los comentarios de sus fanáticas locas comenzarán a aparecer y acosarme por ese estúpido e ignorante artículo. La revista escolar había ganado popularidad, no sólo en el colegio, sino también en línea.

Las chicas, sedientas de información sobre la nueva banda de rock que se ha convertido en Tendencia, han requerido las noticias de "El escándalo", acicalando el ego de Chris y llevándola a los límites, publicando cualquier sandez que tenga por lo menos una premisa que se escuche razonable, siendo yo el blanco de todos sus posts.

Sin embargo, no debía preocuparme. Todas esas chicas decidían mantenerse en el anonimato y conformarse con insultarme por internet pero no dar una mierda en mi dirección cuando de vida real se trataba; funciona el mundo en las redes sociales.

A lo largo de la semana mandé aproximadamente diez mensajes a Otto, que se dedicó a ignorarlos olímpicamente. Me sorprendía su indiferencia, antes de marcharse se dedicaba a ponerse intenso por cada cosa que me sucedía. Pero nada, ni una respuesta, llamada o emoticón. Y estaba preocupada ¿de acuerdo? Había logrado tener una especie de cariño hacia él y no obtenía respuestas.

Ni siquiera me digne a aparecer en el comedor durante el almuerzo. Merodee por los pasillos alrededor de quince minutos, esperando que mi impaciencia fuera calmada, deseando tener un poco más de inteligencia emocional para dejar de estar tan intranquila.

Joy pasó a mi lado, avivando mis dudas. Noté que llevaba unos lentes de sol y la mejilla morada cuando le toqué el hombro.

—¿Eh?— Joy se alejó de mi toque, quedando de espaldas a la pila de casilleros a mi lado.

—¿Estás bien?— se encogió de hombros y carraspee— ¿sabes qué ha pasado con Otto? Le he mandado mensajes pero él no...

Never said to Heaven Donde viven las historias. Descúbrelo ahora