—¡Enséñamelo!— le dije a Dev —¿Te duele?
—Para nada, es como parte de mi.
—Bueno— respondí— no es tan grande.
—¿Tú crees?— Dev sonrió y miró de nuevo a la parte interior de su antebrazo, la letra Tau griega rodeada de un rombo se asomaba por su piel pálida.
—¿Cómo es que estás en una hermandad si te falta un año para ir a la universidad?— pregunté y el chico miró hacia la ventana, donde suaves gotas de lluvia golpeaban el concreto fuera de la heladería.
Se encogió de hombros.
— Ventajas de que tu hermano mayor dirija la hermandad; entonces cuando vaya a la universidad de Bristol no tendré problemas para buscar una.—Pero entonces es seguro que te quedaras en Bristol— dije con satisfacción, me ponía contenta saberlo, fuera de ser el chico por el que me derrito, era mi amigo y sería una pena no tenerlo a una distancia razonable.
—Si, licenciatura en finanzas— volvió a sonreír de esa manera gentil y tierna que me encantaba, su padre tenía una pequeña empresa de seguros que iba a quedar en manos de Dev ya que su hermano, Rocky, había comprometido su futuro a administrar eventos —¿Y tú sigues con la misma idea de tu futuro?
No pasé por alto la mirada de extrañeza que me lanzó, pero ni siquiera eso me hacía flaquear. Podría tatuarlo en mi frente y seguir sintiéndome orgullosa de eso.
—Estudiar astronomía, si—sonreí triunfante y di una larga lamida a mi helado, el lugar estaba vacío, bueno, a nadie parecía agradarle la idea de tomar un helado en un día lluvioso y frío, pero con una buena compañía, ¿quién era yo para quejarme?
—No quiero sonar grosero, pero ¿que hay de fascinante allá arriba? ¿No suena lógico descubrir lo cercano antes que irse a grandes escalas? Priorizar a las personas— Dev frunció el ceño, y yo miré hacia arriba por una décima de segundo casi por instinto.
— Es desconocido y eso es lo interesante. Pero, tranquilo— replique cuando vi su mirada perpleja— no te sientas culpable. Mucha gente no lo entiende, a veces ni siquiera yo misma lo comprendo del todo.
—¿Por qué no estudiar letras? Eres buena en eso— declaró.
—No creo poder hacer algo más que seguir mi sueño, Dev.
Él jamás parecía estar conforme con mi forma de pensar respecto al tema, según Don Recto, era mejor racionalizar y analizar antes de tomar una decisión como, ya sabes, tu futuro. Mas yo no podría jamás irme por el camino donde el dinero importara más que la pasión.
Siempre que tocábamos el tema, el ambiente se ponía incomodo así que procuraba con frecuencia cambiar el tema. A veces la situación se ponía tan intensa y absurda, que podría pararme a bailar una canción de los Black Eye Pace y la situación no podría aumentar en pateticidad.
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Never said to Heaven
Teen FictionAdvertencia: No te enamores de él. Una tarde en detención, un mujeriego, una chica borracha y una fiesta que ella olvidó. ¿Qué podría salir mal? Detrás de cada hombre hay un pasado. Detrás de cada chica hay un hombre que está siendo amado equivocad...