One Shots»Harry Styles ✔

Opportunity

—Tomen asiento chicos— dijo el maestro Royer cuando entro al salón.

Yo estaba sentada en una silla en la parte de atrás del salón, no tan atrás pero tampoco tan adelante. Traía puesta una falda color rosa pastel, llegaba un poco más arriba de la rodillas pero cuando me sentaba se levantaba hasta medio muslo. Mi vista estaba en todo el salón mirando de un lado a otro esperando al maestro que estaba acomodando unos papeles.

—Bueno chicos esta clase ver- — lo interrumpió el sonido de la puerta, era Harry Styles el chico malo, pero con buenas notas, de la universidad. Estaba fumando un cigarrillo, caminando despreocupadamente al asiento que estaba al lado mío.

De todos los vacíos se sentó al lado mío.

Harry no me caía bien y odiaba su manera arrogante de ser no lo soportaba, entro apenas saludando al profesor sin soltar el cigarrillo, en cuanto se sentó soltó su mochila y saco el humo de su boca haciendo toser a algunos alumnos que al momento se quejaron.

—No se puede fumar en clase Señor Styles— dijo el maestro Royer dándole poca importancia, pero una mirada matadora a Harry, este rodo los ojos y tiro al piso la colilla. —Bueno como iba diciendo el tema de hoy...— deje de prestarle atención, de hecho no deje de prestarle atención, no podía darle mi atención, Harry irradiaba sensualidad y tanto magnetismo que no podía escuchar ni una sola palabra del maestro Royer, tenía ganas de acercarme y acariciarle el cabello, recién lo había cortado antes lo tenía bastante largo y rizado, hasta hace unos meses que se lo corto, ahora le volvían a crecer los rizos, no se peinaba solo pasaba la manos por su cabello acomodándolo de vez en cuando, se veía muy bien así, traía puesta una camisa blanca de líneas negras desabrochados un poco más arriba del ombligo dejando ver su tatuajes y su torso, se veía tan fuerte y duro que también quería tocarlo, sus torneadas piernas estaban cubiertas por sus típicos vaqueros apretados negros, en otro hombre se vería ridículo pero a él le quedaba sexy y muy llamativo.

Lo estaba mirando de reojo y el pareció darse cuanta porque regreso a verme y me guiño un ojo, rodé los ojos he inevitablemente me sonroje intente ponerle toda la atención al maestro Royer.

Había pasado poco tiempo y seguía sin poder centrarme así que empecé a garabatear en mi cuaderno cruzando mis piernas, al perecer el maestro Royer estaba hablando sobre las células y esas cosas que para nuestras carreras era innecesario.

—Lindas piernas— susurro Harry en mi oído, me estremecí y volteé a verlo con los ojos bien abiertos.

—Imbécil— susurre intentando verme enfadada pero no funciono, se sintió tan extraño su aliento que sentía mi piel china, intente olvidarme de su ronca y sensual voz susurrando en mi oído, y empecé a garabatear otra vez.

Un pequeño chillido se me escapó cuando Harry puso su mano en mi muslo descubierto acariciándolo, ahora mi piel estaba más erizada y palpitante, pero eso no quería decir que no estaba enfadada por su atrevimiento, en un movimiento golpe su mano y la quite de mi pierna matándolo con mi mirada.

—¡Oye estaba calientito!— Se quejó.

—Eres un idiota— le dije venenosamente.

Empezó a reírse y yo quería golpear su maldita sonrisa, era hermosa con sus hoyuelos pero ahora mismo me estaba molestando.

Ahora menos podía prestarle atención al maestro Royer, la piel me quemaba y mis mejillas debían arder.

La clase estaba a punto de terminar hasta que el maestro dijo —Chicos, como ya saben están prontos a graduarse, entonces como nota final y muy importante harán una presentación de este tema podrá ser como ustedes quieran, pero me la presentarán en hojas primero yo pondré las parejas y el día de la presentación será el próximo lunes— explicó y yo bufé a lo que Harry soltó una risita.