Capítulo 2

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Ayer le dije a Nathan que si quería ser su novia, eso me hace muy feliz y no me imagino como se pondrán Katty y Erika cuando se los diga. Desde ayer no puedo dejar de pensar en lo que llegaremos a vivir juntos. También tengo que decírselo a mis papás pues lo que más quisiera es una relación formal.

Son las 5 de la mañana y como ya no puedo dormir otro rato o se me hará tarde decido meterme a bañar, hoy tengo examen de cálculo y necesito repasar mi guía, Nathan me ayudo a estudiar ayer y sacare 10, al menos eso espero. Salgo de bañarme y comienzo a cepillar mi cabello, es mi rutina de todos los días, si no lo cepillo saliendo de bañar se esponja y es un desastre, después me visto, me decido por una camisa de mezclilla y unos leggins. Cuando estoy a punto de terminar suena mi celular, verifico la hora, apenas son las 5:35am, nunca nadie me llama tan temprano, reviso quien es y mi corazón da un vuelco, Hay dios, es Nathan, contesto.

-Hola

-Hola princesa, buenos días, ¿cómo estás?- suspiro de felicidad.

-Buenos días, bien, aún tengo sueño pero estoy bien gracias y ¿tú?

-Extrañándote, no sabes cuantas ganas tenia de hacer esto.

-Ay.- me da mucha ternura, escuchar su voz es lo más increíble del mundo- nos veremos pronto, en la escuela.

- Si, qué más quisiera verte antes, ¿no quieres que pase por ti?

-Gracias pero me lleva mi papá y no sé cómo le diría que no quiero que me lleve, será en otra ocasión.

-Está bien Mika, te dejo para que no se te haga tarde, te quiero mucho.

-Yo también te quiero.- cuelgo, esto es nuevo para mí,  jamás nadie me había dado los buenos días así, es tan perfecto, un te quiero no es suficiente, quisiera decirle mil cosas más pero es demasiado pronto, mi mente esta confundida, solo necesito pasar más tiempo con él para saber qué es lo que siento realmente.
Termino de arreglarme y repaso mi guía, después bajo a desayunar y en la barra de la cocina esta mi hermano comiendo cereal.

-Hola Aarón.

-Hola Mika, ¿qué tal tu día ayer?-mientras me siento y me sirvo cereal pienso si contarle todo o no, decido que sí, quizá el me de algunos consejos.

-Pues estudie mucho y espero pasar el examen porque si no sé qué voy a hacer y ¿ves el chico del que te hable, o más bien tú me interrogaste?

-Aja.

-Realmente me gusta y ayer me pidió que fuera su novia y le dije que sí.- mi hermano me mira de una forma rara, no sé qué le pasa, después de un rato reacciona.

-Mira Mika, yo no soy nadie para decirte que hacer y qué no hacer, para eso están mis papás, ya tienes 17 años y lo único que quiero es que mi hermanita sea feliz, te deseo mucha suerte en tu relación, pero recuerda que si te hace algo se las verá conmigo.-Eso último que me dice me hace reír, a veces es tan protector.

-Si lo sé, gracias, te quiero.-verifica la hora en su celular y por su cara sé que tiene que irse, se levanta rápido de la mesa y me da un beso en la mejilla, después sale apresurado a la calle. Decido preparar café para llevarme a la escuela y cuando estoy poniéndolo en la cafetera baja papá y me asusta cuando me da un beso en la frente.

-Hola mi niña, ¿me darías una tasa de tu café?

-No es mi café, tomo como una vez a la semana, es tu café y obvio que te doy del que estoy haciendo, siempre hago mucho y si tú no te lo tomas se queda ahí y mamá lo tira.

-Jajá, está bien hija, solo dame café.- estoy un poco nerviosa, de que se entere y no sea por mi y eso hace que hable mucho.

Llego a la escuela a tiempo, esta vez no se me hizo tarde y no agradezco porque odio estar corriendo. Mientras voy por los pasillos me encuentro a Erika y le cuento todo lo que paso el día anterior, se emociona y se va corriendo a decirle a Katty y las dos me gritan señora Lee, a veces son tan exageradas, pero las quiero.

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