Comenzar de cero

Capítulo 13

-Vamos Giselle, dime de que hablaron.- es la quinta vez en el día que se lo digo a Giselle, necesito saber de qué hablaron o por qué su extraña conversación anoche. Ella niega con la cabeza y yo le hago pucheros.- Por favor.

-Vale, vale, pero no vuelvas a hacer pucheros.- se ríe.- son muy tiernos.

-Pues dime entonces.- le insisto.

-Es qué cuando me pidió tu número me pregunto si me habías contado lo que sucedió, le dije que algo y ya el me explico que no quería que reaccionaras así, que realmente quería llegar a algo contigo, que no eras como las demás y dijo que eras muy bonita, demasiado que cada vez que te veía quería hacerte muchas cosas.- comienza a reírse.- pero que no lo iba a hacer porque no quería quedar mal contigo, que él quiere conocerte realmente y todo. De ahí lo de las cosas indebidas.- Se ríe y no puedo evitar reírme también.

-Señoritas.- La voz de la maestra me recuerda que estamos en clase.- Cállense si no quieren que las saque de mi clase.

-Lo sentimos profesora.- dice Giselle y le sonríe, pero la maestra continua con su cara seria y se retira.- Lo vez, no me preguntes esas cosas en clase.

-Lo siento.- me encojo de hombros y me rio un poquito.

-¿Y cómo fue todo ayer?- me pregunta Giselle en un susurro.

-Bien.

-Bien.- dice imitando mi voz.- ¿Solo bien?

-Pues sí, quedamos como amigos y pues todo está bien.- me mira como si tuviera algo en la cara.

-¿No te beso?

-No.- me rio.- ¿Tenía que hacerlo?

-No lo sé, supongo que no porque quedaron como amigos.- asiento con mi cabeza.- Eso es lindo.

-¿Qué?- de que habla, ¿de Math?

-Que no haya intentado nada, aunque se muera de ganas de hacerlo.- dice sonriendo.- Realmente le importas.

-Si bueno.- le digo para cambiar de tema.- ¿y qué hay de Dann?

-¡Oh! Ese hombre es perfecto.

-Sí, es guapo, ¿intento algo?

-No que yo me diera cuenta.- dice con una risita.- Hoy volvimos a quedar.

-Me alegra, se ven lindos juntos.

-¿Enserio?- asiento.- Me alegra, porque realmente me gusta.

-Se ve que es buen tipo, conócelo mejor y deja que las cosas pasen como tengan que pasar.- ambas sonreímos. En eso suena el timbre lo que indica que la clase ha terminado, nos apresuramos a guardar nuestras cosas y salimos del salón, nos toca matemáticas, por lo que hay que correr al salón o nos quedamos afuera. Justo cuando entramos el timbre vuelve a sonar y el maestro ve su reloj, Giselle y yo vamos a sentarnos, un minuto después Math entra al salón y saluda al maestro.

-Esa puntualidad.- le dice a Math y él sonríe.

-Tengo que atravesar toda la escuela para llegar.- el maestro se ríe.

-Pues corra señor Spark.- la mayoría de los presentes en el salón se ríen. Math comienza a caminar buscando un lugar en dónde sentarse, al pasar junto a mí me sonríe.

-Hola Mika.- no puedo evitar sonreír.

-Hola.- escucho como se sienta en la banca detrás de mí, Giselle también lo saluda y no puedo evitar ver las miradas de odio de las mismas chicas de ayer, ¿qué con ellas? Volteo a ver a Math y él me sonríe.- ¿Qué con tus admiradoras?- le digo divertida y el me mira confundido.