ENTRE DOS MUNDOS [TT]

18. Un escudo y una espada para combatir el miedo

NARRA JENNIFER

Oh dios mio, por favor que alguien me diga que esto no es real.

Sigo acurrucada en algún lugar de la gran habitación; oscura y en la penumbra. Escuchando los terribles gruñidos de Ryan, su respiración agitada.

Mis lágrimas ya han cesado, pero el miedo y temor sigue en mi cuerpo.

-Joder Jennifer, ¿en qué mierda estabas pensando?- grita enfadado-¡Ha estado a punto de matarte!- se acerca a mi y yo bajo la mirada al suelo-Joder, definitivamente quieres que me vuelva loco.

No soy capaz de sacar mi voz del fondo de mi interior y me quedo callada al ver que se pone de cuclillas frente a mí.
Coge mis manos y acaricia las heridas que hay en mis muñecas. Su tacto es tranquilizador y reconformtante en algún sentido de la palabra.

-Si te llega a pasar algo yo...- corta la frase y me aparto de él desviando la mirada al chico que yace muerto a mis pies. Ryan coje mi barbilla para que le mire y sus ojos brillan de una forma que no había visto nunca.- No me importa él.

-Esta muerto...por mí culpa.- digo tapando mis ojos.

-¿Qué? No, claro que no. Simplemente él quería algo que no podía tener.

-¿Qué es lo qué quería?

-Poder-dice con desprecio- él mismo te lo ha dicho, además, ¿éres consciente de lo que íba a hacerte antes de quitarte eso?

-No iba a hacerme nada-me levanto del suelo apoyando mis manos en la pared que hay a mi espalda para poder sujetarme y encaro a Ryan. Sea lo que sea, no me da miedo, no porque no vaya a hacerme daño, ya que eso lo dudo. Sino porque no me queda otra, que elimnar cualquier sentimiento o emoción de eso a lo que llaman temor.

Se acerca a mi acorralándome con sus brazos a cada lado de mi cabeza.
Pongo los ojos en blanco intentando percatar lo que intenta hacerme.
Lo empujo poniéndolo donde yo estaba hace unos segundos y le agarro de su camiseta rompiéndola.

Nada ni nadie, me va a fastidiar esta noche. He venido para disfrutar y aunque no quiera aceptarlo, también para beber, pero con conciencia claro.

Oigo los pasos de Jules subiendo hacia aqui, hacia su cuarto. Mas vale que salga de aquí si no quiero verme jodida por tener que inventarme una buena excusa;

-Yo que tú-digo con una sonrisa indiferente a Ryan- recogería todo esto antes de que Jules entre a su cuarto ¿no crées?

Abro la puerta y veo al fondo en el pasillo subiendo los últimos escalones de la puñetera escalera a Jules.
Sin desperdiciar un segundo corro hacia él y cojo su mano como hizo unos dias atras cuando tuvimos la exposición.
Me acerco a su oido y poso mi mano restante en su cuello atrayendolo a mí.

-Quiero divertirme, ¿tienes algo que pueda servirme?

Una sonrisa pícara aparece en sus labios y doy un pequeño salto cuando noto sus manos en mi cintura presionándola suevemente.

"Si Ryan nos vé, alguien más va a morir aquí esta noche."

-¿Qué te parece una ronda de chupitos?

-He dicho divertirme, no emborracharme.

-Pues yo no le veo la diferencia- dice pegándome más a su cuerpo.

"Mierda, mierda, mierda."

-Jules yo- digo estirando el cuello de mi camiseta. Juro por mi madre que a saber dónde esta, que estoy hiperventilando.

-¿Tienes calor?

-Sí,¿tanto se me nota? Porque tu presencia tan cercana a mí no me está ayudando para nada.