¿Me Quieres? {Gonexo} Finalizada.

~11~

Y pasó otro día en el que no obtenía las agallas para poder hablar del problema en el que nos encontrábamos.

Por más que lo intentaba, por más que agarraba el móvil para al menos mandarle un corto mensaje, simplemente no podía, me arrepentía al instante.

¿Qué tan difícil era hablar con un amigo que llevo años conociendo?
Al parecer mucho, al menos para mí.

Revisaba el móvil, el twitter y el skype esperando alguna señal de Gona, pero éste no se hacía presente.

Era mi culpa, lo tenía claro. Él se había cansado de "molestarme", y yo me sentía muy mal al pensar en lo que debería estar sintiendo en ese momento.

Pero yo no me quedaba atrás, tenía mis propias dudas y confusiones, las cuales me daban hasta dolor de cabeza.

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En la tarde me dediqué a subir el video diario, y me dí cuenta de que Luh y Sara habían subido el video grabado del día anterior, y Gona subió un gameplay individual.

¿Qué significaba eso? Tal vez que él tampoco quería grabar con nosotros, o conmigo para ser más exactos.
Tal vez no se encontraba de humor para jugar o incluso sólo hablar con alguno de nosotros.
O tal vez no significaba nada, y yo estaba un poco paranoico.

No le dí más importancia a los hechos y me puse a ver su video, el cual duraba sólo veinte minutos, ni más ni menos.

Había algo extraño en él, su voz sonaba muy diferente e incluso su rostro se veía raro. ¿Era sólo yo, o en realidad sí estaba extraño?
Leía los comentarios y no notaba nada fuera de lo normal, efectivamente era sólo yo quien lo veía de una forma totalmente diferente.

¿Era por lo ocurrido que lo empezaba a ver de forma distinta?
No lo sabía, pero algo en él incluso me atraía.

Sí, exacto, me atraía... Esa vez su voz la escuchaba más potente, más atrayente.
Su rostro se veía con ojeras pero estaba tan perfecto como siempre.
Y una de las cosas que me sorprendieron más fue que pude notar tristeza en sus ojos, algo que de seguro era mi culpa.

¿Era mi imaginación? Podría ser, pero no quería pensar en eso, en ese momento yo sólo quería seguir viendolo hasta el final. Fue la primera vez que me gustó ver y escuchar tanto tiempo a Gona.

Incluso después de ese video, comencé a ver otro y otro más de su canal. Realmente sentía que me estaba volviendo loco, pero se sentía bien escucharlo y verlo, aunque sea trás una pantalla.

¿Qué me estaba pasando? Me gustaba verlo e incluso a veces se me dibujaba una estúpida sonrisa en el rostro.

Todo fue culpa de ese primer beso, estaba claro. Desde ahí, comenzaron los problemas en mi cabeza.

¿Acaso me estaba enamorando de Gona? Podría ser, no descartaba la idea pero si la negaba un poco. Después de todo los dos somos hombres, es bastante difícil aceptar algo como eso.

Pero es que su voz a través del micrófono y su rostro a través de la pantalla, me hacían acelerar el corazón a un ritmo bastante acelerado.

Y después de tal vez treinta videos, sino es que más, terminé por aceptar lo obvio... Sí me gustaba Gona.

No sabía como ocurrió ni porqué el cambio tan repentino, pero eso no me importaba, y pensé que a Gona tampoco le iba a importar.

Lo primero que hice al terminar de aceptar ese hecho en mi cabeza, fue marcar el número de Gona y mandarle algo por whatsapp.