Punto de vista de la autora
El sol brillaba, el jardín resplandecía gracias al reflejo de este, había caído rocío la noche previa y las gotas iluminaban a luz.
También había un chica, con un hermoso vestido de novia. Al fin, al fin.
El mapache bien arreglado caminaba ansioso esperando aquel momento; Mordecai le acompañaba con un pequeño bebé en brazos, ese era Ben Quintel Monroe, su hijo de apenas cuatro meses.
- ¿Nervioso? - le preguntó el arrendajo.
- No como yo creía - sonrió Rigby.
- No puedo creer que te vayas a casar antes que yo, Hermano.
- No puedo tan siquiera creer que me voy a casar.
El mapache dejó a Mordecai y subió las escaleras de su antiguo hogar. Entró a su vieja habitación y desde ahí contemplo el jardín por la ventana.
Sintió como alguien estaba tras de él observándole.
- Rigby - le llamó Gabriella con un vestido verde menta, era vestido de primera dama.
Este sonrió y de volteó a ella.
- Este es el día más importante de tu vida - le dijo ella agachándose a él con una pequeña rosa blanca - y yo no puedo estar más orgullosa de ti mapache.
Él abrazó con fuerzas a su mejor amiga y ella comenzó a llorar de felicidad hacia él.
- Ya deja de llorar - le pidió el mapache al borde de lágrimas también - mira, se te va a correr el maquillaje.
- Al diablo con el maquillaje, Mamá me obligó a ponérmelo por Eileen.
Le hizo esto sonreír al mapache.
- Gabriella, sigues tú; tu serás la próxima al casarse.
- Supongo, tengo un bebé de cuatro meses - rió.
- ¡Y luces bien!, digo, mirate, para que hayas tenido un bebé hace cuatro meses esa figura no la tiene cualquiera - bromeó Rigby.
- ¡Vamos!, tenía miedo de que no me entrara el vestido.
- Gabriella...
- Rigby...
Ambos se abrazaron una vez más.
- Siento como si fuera ayer cuando saboteé el traje de Gabin para que no fuese al baile contigo Monroe.
- ¡Sabía que tu lo hiciste! - empujó despacio a Rigby ella - ¡Vaya que tiempos!
- ¿Sabes qué es lo mejor de todo?
- No.
- Que vienen tiempos mejores.
- ¿Por qué lo dices? - sonrió ella.
- ¿Adivina qué?
- ¿Qué?...
- Eileen esta embarazada de nuevo.
- ¿Qué? - rió amablemente - Amy solo tiene un año y dos meses.
- Precisamente.
- ¡Wow!
Ambos rieron y volvieron a abrazarse.
- Vamos Salyers, es hora de que te cases con Eileen - guiñó un ojo ella.
Rigby también le guiñó el ojo.
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Eileen & Yo
FanfictionJusto creí que entre ella y yo no pasaría nada, pero un día la ví mas linda que nunca, y paso el tiempo y ella se volvía cada vez mas parte de mi...