Mordecai regresó del aeropuerto, Eileen y yo lo esperábamos en la casa del parque.
Lo ví entrar por la puerta, se le veía mal, horriblemente mal, deprimido; se había convertido en un Mordecai “deprimido”, un Mordecai al que no conocía muy bien.
- Hola Mordo - me acerque a él junto a Eileen; pero parecía no tener ganas de charlar sobre el tema.
- Mapache, dejáme solo, me tomaré un día de salud mental - decía al subir las escaleras directo a la habitación, justo a encerrarse en la misma.
Ese “día de salud mental”, se volvieron 2 semanas, luego 3, intentaba sacarlo de la habitación, pero no podía, estaba demasiado mal.
Llegue a la casa de Eileen.
- Hola Eileen - saludé con pocos ánimos.
- Hola, ¿Estas bien? - me decía preocupada, ella siempre se preocupa por mi.
- Es Mordecai, desde que Margarita se fue el, el no ha salido de la habitación.
- Pero tú puedes ayudarlo junto a los chicos y claro como con mi ayuda.
- ¿Cúal es tu plan? - interrogué ya con mas ánimo.
- Podrían ayudarlo para que lo supere más rápido...
- ¿Ayudar a que lo supere?
- Sí, ¿no lo has intentado? - me miraba fijamente - Pues con razón no sale de su habitación.
- Bien, ¡gracias por el consejo Eileen! - la abracé fuertemente, se me había hecho la costumbre, pero esa costumbre era la que más me agradaba.
•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°
- ¡Viejo, tienes que salir! - exclamé.
- ... - no contestaba.
- ¿¡Mordecai!?
Él abrió la puerta - Dejáme solo - dijo tan deprimido.
- Viejo, ya te dejé solo por 3 semanas, ahora vas a estar conmigo, ¿acaso no extrañas el tiempo entre “hermanos”?
Mordecai se sorprendió; yo enserio extrañaba jugar videojuegos con mi mejor amigo.
- Escucha Rigby, sí, extraño pasar contigo, pero es que extraño más a Margarita.
- Sí, sé que la extrañas, pero ella te rompió el corazón, no sé, una, dos, cuatro veces...
Ya tienes que olvidar el pasado, y el pasado es ella.- No lo ví de esa forma antes, - alegremente comentaba el chico antes deprimido - amigo, salgamos de aquí.
- Primero date un baño Mordo.
•°•°•°••°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•
Fuimos a la cafetería, para mi suerte Eileen estaba ahí.
Justamente cuando iba bajando las escaleras Eileen me tomó de la mano y luego del brazo y me acerco a ella.
- ¿¡Qué haces!? - dijo Eileen viendo a Mordecai - yo pensé que haría otra cosa - un “poco molesta” - si lo traes aquí se acordará de Margarina.
- Y-yo...
- Mi turno acabó, ya sal de aquí, ahora que Mordecai aun no ha entrado, yo estaré afuera muy pronto - me soltó; ¡Vamos yo quería un abrazo!, uno de Eileen... ¿¡Cómo dices Rigbone!?
Afuera de la cafetería.
- ¿Qué hacemos acá? - preguntó Mordecai.
- Esperando a Eileen...
- ¿Eileen?, Mapache, ¿ya son novios?
- ¡Que no!, solo es mi amiga.
- Claro, amiga con beneficios...
- ¡Deja de hablar! - aunque Mordecai tenía algo de razón...
Eileen salió de la cafetería.
- Hola Mordecai - saludaba Eileen a Mordecai.
- Hola Eileen.
- Vamos a casa, tengo pastel, y es de chocolate.
- ¡Pastel gratis! - exclamba Mordecai.
Fuimos a la casa de Eileen, Mordecai, para suerte de todos ya no estaba deprimido, así que decidió salir con Benson, Skips y los demás.
- Bueno Mapache, creo que debería salir con los chicos, ¿vienes?
Miré a Eileen - Ehhh... no viejo, me quedaré. - Eileen me vio extrañada.
- Deberías ir con él - dijo al fin.
- Creo que estará bien sin mi - contesté.
- Sí, Eileen, estaré bien, además Rigby quiere un tiempo a solas, ¿huh?
- ¡Ya callate de una buena vez!
- Jaja, hasta luego Mapache.
Se fue, *Gracias al cielo*.
- Ahora si - dijo Eileen; tomando mi mano, luego mi brazo y acercándome a ella y sonriendo - Ven...
Me llevó a la cocina y ví un gran banquete de Ravioles.
- E- Eileen...
- Todos tuyos Rigbone...
La abracé, la costumbre había regresado.
- G-gracias - agradecí.
- No hay de que...
...
...
Estuvimos mucho tiempo abrazados, mi costumbre se haría mas frecuente ahora.
- Bien - Eileen interrumpió lo mejor que me había pasado hasta ese momento - ahora come, que hay más.
- ¿Más?, ¿de qué?
- Ya lo verás...
ESTÁS LEYENDO
Eileen & Yo
FanfictionJusto creí que entre ella y yo no pasaría nada, pero un día la ví mas linda que nunca, y paso el tiempo y ella se volvía cada vez mas parte de mi...