Tengo ganas de ti... (Larry Stylinson)

CAPITULO 14 (A)

NARRA LOUIS;

“muy bien aquí estoy.. Seré pasivo por primera vez y no estoy nada tranquilo porque me dolerá, yo lo sé.. Es por eso que siempre he sido delicado cuando el pasivo no tiene tanta experiencia .. Joder, yo sé que Harry lo hará con cariño pero cuando se pone caliente olvida la delicadeza y se pone rudo... Me encanta eso de él, solo él ha logrado convencerme de ser pasivo, su pasivo. Pero aun así tengo un poco de miedo, maldición Louis!, relájate!” -con cariño por favor Harry- “dije saliendo de mis pensamientos y con un tono de súplica”. Es obvio que lo hará con cariño, él y yo tenemos un lazo, una química, un “algo” que nos une y que hace que el sexo sea no solo muy placentero si no, romántico, agradable, lindo.. -no te preocupes cariño, será con amor- me dijo Harry depositando un beso en mi boca... Los besos provenientes de esos labios suaves me hacían sentir confiado, desde la primera vez que los probé supe que tenían algo especial. Rayos, Harry Styles en si es especial, todo en él es único. “Dios, Harry es tan perfecto” Dije para mí. Harry comenzó a besarme con pasión, podía sentir sus labios devorando los míos, podía sentir su lengua abriéndose paso dentro de mi boca, retirando mi lengua con suavidad y fervor. Fue bajando por mi mandíbula, depositando pequeños besos por ella, subiendo y bajando llevándome hasta el punto más caliente que pude haber experimentado gracias a las caricias que hacia al mismo tiempo en todo mi cuerpo. Sus besos se volvieron lengüetazos que fueron desde mi cuello bajando hasta mi clavícula, pasando por mi pecho deteniéndose cerca de mi pezón para regresar en un gran lengüetazo hacia mi boca por el mismo camino que había pasado antes, besándome apasionadamente y bajando de nuevo hasta mi ombligo con pequeños besos depositados con delicadeza sobre mi piel, sentí su respiración que bajaba hasta mi miembro que se encontraba demasiado duro, reclamando ser atendido. Sentí como devoró mi pene en una sola chupada, metiendo todo a su boca como si necesitara de el para sobrevivir, movía su lengua en la cabeza haciendo movimientos circulares que me hacían gemir. Continúo chupando y de repente sentí una última chupada en mi pene para pasar a sentir su lengua moviéndose de arriba a abajo por mi pene, haciendo esfuerzo en donde comenzaban mis testículos. “Dios!! Este hombre es maravilloso”. Sentí como su boca succionaba cada uno de mis testículos para bajar aún más y dirigirse a la región del periné, besando y lamiendo esta zona con intensidad. -Es hora- dijo Harry sonriendo, haciendo que sus hoyuelos se marcaran y con un tono muy sensual y masculino, con una voz profunda y gruesa que me hizo prenderme aún más. Me frustro un poco el dejar de sentir su boca en esa zona que él sabía perfectamente cómo tratar centímetro por centímetro. Me límite a guardar silencio y me voltee. Me coloque con las rodillas flexionadas y las manos en la cama, Levante mi trasero o más bien él me fue acomodando en esta posición con delicadeza y frotando mi piel con sus manos suaves, encendiéndome aún más. Sumido en sus caricias, sentí algo húmedo en mi entrada, él estaba dando lengüetazos y para ser sinceros eso me estaba prendiendo al 100. Era algo nuevo, la sensación era algo extraña pero muy agradable. Detuvo los lengüetazos para dar paso a toda su boca, besaba mi entrada con fervor. El besa demasiado bien así que esto lo hacía excelente y me dilato por completo, era algo excitante para mí. Sentía como su lengua intentaba penetrarme entre beso y beso, reclamando ese acceso que le pertenecía. No dijimos palabras, todo fue muy “romántico”, solo se escuchaban mis gemidos y los sonidos de sus chupadas y besos en mi entrada. Se sentía no solo pasión si no Amor en el ambiente que nos rodeaba. Él decidió que ya era momento, tomo un lubricante del cajón del mueble al lado de la cama y se puso un poco en la punta del pene al igual que en mi entrada. Froto su miembro con el lubricante el cual ahora brillaba debido a este. Pude sentir como metía un dedo en mí y fácilmente introducía otro y después otro para distribuir el lubricante, estaba completamente dilatado y listo para recibir y sentir a Harry dentro de mí. Sentí como la punta de su pene exigía entrar y ya que yo estaba bastante abierto no entró con tanto problema. En eso comenzó el dolor, sentía como esas veces en que no has podido hacer del baño y haces con esfuerzo y dolor, “¿esto es lo que los pasivos aman? Es decir, siento como si tuviera heces atoradas.. No pienso que sea nada placentero! “. No podría comparar la sensación con otra cosa, era eso lo más familiar que yo conocía. Harry introdujo un poco más su miembro que parecía ser succionado por mí y ahí comenzó el placer. “retiro todo lo dicho! “. Definitivamente esto era mucho mejor que con lo que yo lo comparaba. Ahora se sentía bien, aun sentía algo de dolor pero ya no me concentré en él. Harry metió cada vez más su pene y la sensación de tener todo su miembro dentro de mí me parecía rara pero agradable. Comenzó a moverse lentamente y el dolor iba y volvía un poco aún, me molestaba algo pero había placer también, un placer nuevo que se ubicaba en mi ano y se recorría hasta donde comenzaba mi pene. “Esto era genial” Comenzó sus embestidas lentamente, moviendo su cadera a paso lento y haciendo que el dolor se fuera y potencializara el placer. El placer era increíble, podía sentir como cada fibra de mi cuerpo se estremecía al contacto con el miembro de Harry. Frotaba mi pene al mismo ritmo que Harry manejaba y eso me hacía gozar aún más el momento, llevándome casi al clímax. Sentí la sensación previa al orgasmo, pero esta no daba paso al punto máximo, se detenía ahí provocando aún más placer. Era curioso e increíble, como si el orgasmo durara más. Continuo a ritmo lento por un largo y agradable rato para incrementar después poco a poco la velocidad de sus embestidas, todo el placer se centraba en una pequeña zona que iba desde mi ya muy estimulada próstata hasta casi la mitad de mi pene, sentía dentro de mí un fuego que cada vez me punzaba más haciéndome gemir de una manera casi descontrolada. Nuestros gemidos creaban una extraña melodía casi coordinada en toda la habitación, nuestros cuerpos temblaban de tanto placer que sentíamos los dos. Estábamos conectados de tal forma que yo sabía que habíamos sido creados el uno para el otro, nuestros cuerpos parecían transmitir el placer a través de la piel, las sensaciones eran únicas. Harry comenzó a embestirme con más fuerza y más velocidad provocando que yo articulara palabras que no sonaban a nada, era imposible pronunciar una palabra correctamente ya que lo que sentía me lo imposibilitaba. Sentí como estaba a punto de llegar al tan esperado orgasmo, sentía como ese fuego se abría paso por todo el cuerpo de mi miembro, que se encontraba exageradamente duro, hasta llegar a la punta y explotaba manchando las sabanas de la cama. Al tiempo que eyacule pude escuchar a Harry dar un grito de placer debido a la contracción que provoco mi recto al yo tener mi orgasmo, poco después del gemido que dio Harry pude sentir algo caliente dentro de mi. Harry había terminado, eyaculando dentro de mí y dándome una última sensación bastante agradable. Los dos caímos en la cama, el sobre mí, derrotados por tan excelente momento. Suspiro en mi espala y deposito un tierno beso en ella saliendo de dentro de mí al mismo tiempo. Me voltee y me recosté sobre mi lado derecho, apreciando la imagen de Harry que tenía frente a mí. Sus ojos me veían con aprecio, se conectaron con los míos por un momento que parecía interminable. Se inclinó para besarme lentamente, al separar sus labios de los míos solo dijo “-Eres lo mejor que me ha pasado”. Sonreí en respuesta y nos recostamos, coloco su cabeza en mi pecho y el sueño nos fue consumiendo poco a poco. Lo que habíamos tenido no era nada menos que “Hacer el amor”.