No soy de Nadie / Terminada

Capitulo 43

Cuando con Treisy volvimos con el pastel y unos pastelitos más chiquitos, vimos como las chicas y los chicos estaban colgando unas guirnaldas e inflando globos con helio.

-Genial ya llegaron! Dejen eso en la heladera y ayúdenos a correr esta mesa, dentro de media hora llega el Dj con su equipo y necesita una hora para acomodar todo su equipo y probar que todo funcione- Dijo Alay a lo que nosotras asentimos.

Empezamos a ayudar a colgar guirlandas y acomodar unas cosas hasta que el Dj vino y empezó a acomodar todo para hoy, Sira agarro una gran mesa y le puso un mantel poniendo arriba de este todas las bebidas, el alcohol y los vasos. Todos miramos el resultado de cómo había quedado la sala en donde se haría la fiesta, contentos con el resultado.

~*~

La noche había llegado, y con ella las personas. La música retumbaba por toda la casa a oscuras, iluminada solo por luces de colores. Cada vez más gente venía a la fiesta, yo me encontraba bailando con mis amigas al ritmo de la música, Sira apareció con vasos con bebida adentro para todas dándonos un vaso a cada una.

-Por Celes, Feliz cumpleaños Amiga- Dijo con el vaso en alto, todas alzamos los vasos y bebimos un sorbo, Sentí mi garganta arder, dándome cuenta que no era gaseosa lo que estaba tomando, empecé a toser mirando a Sira.

- ¿Qué es esto? - Pregunte a lo que ella río.

-Vodka o Tequila, no estoy muy segura- Dijo riendo, yo mirándola asombrada. Jamás había bebido alcohol y mis amigas sabían eso. - Un poco de alcohol no te va a hacer daño Celes- Respondió mirándome.

Mire mi vaso revolviendo el contenido de ahí adentro, oliéndolo reconociendo el olor al vodka, ¿Qué persona en su sano juicio toma vodka solo? Fui a la mesa y derrame en otro vaso la mitad de la bebida que tenía, agarrando una botella de jugo de multifruta y agregándolo a mi vaso. Volví con mis amigas y seguimos bailando, de vez en cuando dándole un sorbo a mi bebida, la cual ya no le sentía el sabor al alcohol.

La música resonaba en mis oídos, me encontraba con Sira bailando en el centro de la sala, ambas descontroladas por la adrenalina que sentíamos en ese momento, nos movíamos al compás de la música sujetando nuestras cabezas con una mano o marcando nuestra figura paseando la mano por nuestro cuerpo. Por momentos cerraba los ojos, dejándome llevar por la música y riendo. Sentí como una mano se posicionaba en mi hombro abriendo los ojos viendo a Sira sonriéndome posando ambas manos en mis hombros haciendo un poco de fuerza, entendiendo enseguida. Ambas empezamos a bajar sensualmente, subiendo de a poco juntando nuestras espaldas y levantando nuestras manos gritando. Vinieron Alay y Kati con nosotras, las cuatro bailando, moviendo nuestras caderas mientras reíamos entre nosotras e intentábamos charlar, la música tan fuerte no permitiendo que pudiéramos escuchar algo de lo que decíamos, teniendo que hablar por el link.

- ¿Dónde están Sofi, Treisy y Esme? -Pregunte mirando a mi alrededor, sin verlas.

-Vi a Treisy en la cocina besándose con un chico, las demás no se- dijo Kati.

-Tranquila deben estar pasándola bien, ya van a venir- Dijo Sira a lo que yo asentí.

-Tenes razón.

De tanto bailar necesitaba algo para tomar, me dirigí a la mesa donde se encontraban todas las bebidas, buscando alguna gaseosa, viendo que ya no quedaba. Fui hacia un cuarto en donde teníamos un frezzer grande, sacando de ahí gaseosas para llevarlas a la mesa. Deposité las gaseosas sobre la mesa y me serví un vaso de coca cola, tomando de este, viendo como la ventana que daba al parque estaba abierta. Me dirigí ahí viendo a Sofi con Esteban ambos abrazados mirando el cielo mientras hablaban, sonreí y me alejé de ese lugar, volviendo con mis amigas, ofreciéndoles coca, viendo a Kati y Charles bailar ambos muy pegados el uno del otro. Sentí como alguien me agarraba de la cintura pasando, hasta ponerse a mi lado, miré a mi costado para ver quien había sido, Esme soltó mi cintura sonriéndome, le devolví el gesto ofreciéndole mi vaso a lo que ella acepto gustosa.

-Como la estas pasando? - Grito cerca de mi oído, para que la escuchara, tomando del contenido que tenía el vaso. Levante mis dos pulgares riendo. Ella le dio mi vaso a alguien que pasaba por ahí, iba a quejarme hasta que agarro mis manos saltando, dándome cuenta que el alcohol ya estaba haciendo efecto en su cuerpo. Reí y la imité ambas moviendo las caderas y el cuerpo, me hizo una seña para que me acercara a ella, le hice caso- Alguien te está mirando- Dijo en mi oído, disimuladamente me di vuelta y vi a Fran con Sebas y otros chicos charlando, excepto que Fran y Sebas nos miraban fijamente. Volví a mirar a Esme y le guiñé un ojo.

Mire a Alay y agarre su mano atrayéndola con nosotras, tome las cinturas de ambas con mis manos y empezamos a mover las caderas sensualmente de un lado al otro, vi como Sebas rodeaba con sus manos la cintura de Alay y le decía algo en el oído. Aparte mi mirada y seguí bailando con Esme, Sira y Kati uniéndose. Seguí moviendo mis caderas al ritmo de la música, haciendo sutiles movimientos con mi mano. Sentí los brazos de Fran posarse en los costados de mi cadera.

-No hagas eso- Dijo en mi oído, Sonreí y me di vuelta rodeando con mis brazos su cuello.

- ¿Por qué? ¿Celoso? - Pregunte a lo que él negó con una sonrisa.

-No, no por eso- Dijo juntando nuestros cuerpos, a lo que yo reí entendiendo. Junte nuestros labios, abriendo mi boca dejando que nuestras lenguas se juntaran comenzando una guerra entre ellas, sintiendo como Fran me pegaba aun más a su cuerpo. Enrede mis dedos en los pelos de su nuca tirando un poco de estos, mordiendo su labio inferior, él junto nuestras frentes con la respiración agitada.

-Si seguimos así no voy a querer parar- Dijo riendo.

- Entonces no lo hagas- dije volviendo a juntar nuestros labios, él volviéndose a separar, haciéndome gruñir.

-No Celes, no entendes a lo que me refiero- Dijo negando con la cabeza, acariciando mi mejilla.

-Se a lo que te referís Fran- Dije sonriendo, juntando nuestras frentes- Yo quiero, y es muy obvio que vos también.

-Segura? - Pregunto a lo que yo asentí, depositando un beso en sus labios, para después agarrar su mano y dirigirme a su habitación. Al llegar a su habitación, él cerró la puerta y me acorralo en esta, juntando nuestros labios. Posiciono ambas manos en mis piernas levantándome, enrede mis piernas en su cintura sin despegar nuestros labios, sintiendo como se movía por la habitación hasta apoyarme en la cama quedando debajo de él, separándose de mí, mirándome- Sabes que podemos frenar cuando quieras ¿no? - Pregunto a lo que yo asentí, atrayéndolo hacia mí volviendo a juntar nuestros Labios, dejándome llevar.

~*~

Abrí mis ojos dándome vuelta, viendo a Fran dormir plácidamente abrazándome por la cintura. Sonreí viendo esa imagen, depositando un delicado beso en sus labios. Con cuidado me levante de la cama yendo al baño, mirándome en el espejo, viendo como todavía estaba roja la marca que Fran me había hecho, al todavía estar cicatrizando, pero sorprendiéndome al ver como esa marca estaba acompañada. Un fino dibujo de un lobo blanco aullando se encontraba sobre la marca, siendo rodeado por unas enredaderas, del mismo color, que se perdían bajo la camisa de Fran que llevaba puesta. Desabroche los tres primeros botones, bajando la parte derecha de esta, viendo como las enredaderas seguían por mi hombro y parte de mi pecho. Delinee con mis dedos las enredaderas, sin despegar mi mirada del espejo, sonriendo al ver algo tan bello como eso. Sentí a Fran abrazar mi panza, depositando un Beso en la marca, mirándome a través del espejo sonriendo, apoyé mis manos, sobre sus brazos sonriendo.

-Es muy linda- Dijo en un susurro.

- ¿Qué es? -Pregunte a lo que él levanto una ceja.

- ¿Tu papá no te lo dijo? - Pregunto a lo que yo negué.

-Cuando los mates se marcan, no solo se forma la mordida, sino también esta cicatriz- Dijo en un susurro, tocando con delicadeza el lobo y parte de las enredaderas- Siempre son diferentes las marcas, y los colores varían. Cuando la pareja muere o se terminan rechazando, la cicatriz con el tiempo va desapareciendo. - Dijo separándose de mí, yo voltee viéndolo con el pecho descubierto, dejando a la vista como en su cuello había una mordida más pequeña y casi la misma cicatriz que yo. Él tenía un lobo plateado, al igual que sus enredaderas. Sonreí abrazándolo, sintiendo como besaba mi cabeza.

-Te amo- Susurre, separándome y mirándolo.

-Yo también Te Amo, Celeste- Dijo besando mis labios.