CAPITULO 19

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Aquí están los dos capítulos:

El salón principal del castillo es bastante amplio, tiene una estructura redonda, perfecta para los bailes y en el fondo se encontraban unas escaleras enormes que daba a un pasillo circular sostenido por unas pesadas columnas, dicho pasillo conducía a los demás lugares del castillo.

-¡NADIE SE MUEVA!- fue lo primero que grito Beren en el momento que me vio parada sobre el barandal. Sus expresiones no tenían precio, mi padre parecía estar a punto de desmayarse, mi hermano me miraba con angustia, y Beren estaba comenzando a entrar en pánico.

-Miriel, no hagas esto- hablo mi hermano intentando calmarme, yo di un paso adelante con ambas manos por detrás y mire hacia abajo, era una altura considerable. Podía sentir los nervios de todos hervir por el suspenso de lo que ocurriría. Parecía que me preparaba para saltar, y apreté los puños, pero entonces en un rápido movimiento puse al frente el arco que había robado, lo sostuve con fuerza apuntando a Beren, nuevamente la multitud reacciono con horror. Pero Beren soltó una carcajada

Beren: Baja de ahí antes de que te hagas daño

Miriel: Voy a disparar- amenace

Haleth: ¡No lo hagas!

Beren: Déjala que lo haga ¡Adelante!- se burlo- dudo mucho que dé en el blanco de todos modos

Estire el arco con fuerza lista para disparar, me temblaban las piernas mi respiración se aceleraba y parecía que mi corazón iba a desbocarse, pero cerré los ojos tranquilizándome y fijando el blanco antes de soltar la flecha, que cruzo volando el salón y paso justo por arriba de la cabeza de Beren.

La conmoción pareció calmarse, al creer que todo el drama se había terminado, hasta Haleth suspiro aliviado, y Beren me miraba burlándose, y ordenándole a uno de sus guardias que fuera por mí. Yo solo me quede ahí, esperando.

Entonces un fuerte rechinido se escucho del techo y yo suspire aliviada, ¡había funcionado! En cuestión de segundos el gigantesco candelabro de cristal que colgaba del techo se desplomo contra el piso, el verdadero caos había comenzado, las personas trataban de esquivar los pedazos de metal, los cristales rotos, la cera caliente y las velas encendidas que acabaron por prenderle fuego al salón. Beren, Haleth y Mi padre aun se encontraban en las escaleras, con trabajos reaccionaron a lo que sucedía cuando otro ruido los hizo mirar al techo, y de la nada un grueso tronco de madera que sostenía una bandera que adornaba el salón se columpio frente a ellos arrojándolos contra la pared a sus espaldas y dejándolos noqueados. Todo esto sucedió en tan poco tiempo que ni yo misma podía terminar de creerlo.

Estaba lista para salir corriendo de ahí, pero perdí el equilibrio y sentí que me caía, alguien me tomo del brazo e hizo que callera de espaldas, se trataba del guardia que me había sacado de la celda...

-Dormirás en la celda el resto del mes después de esto- me advirtió, luego levanto la mano, y yo cerré los ojos esperando el golpe, pero solo pude escuchar al hombre gritar, abrí los ojos y vi a una figura encapuchada sosteniéndolo para luego arrojarlo por el barandal, y finalmente se dio la vuelta

-¡Legolas!- Grite con emoción, jamás en mi vida me había dado tanto gusto ver a alguien. Él me miro y tenía una expresión sombría, parecía estar verdaderamente furioso, a decir verdad me asusto un poco, pero entonces al verme su mirada se suavizo...

Legolas: Levántate- me ayudo a ponerme de pie- ¿estás bien?

Miriel: sí, no te preocupes- él estaba por decir algo pero una flecha paso entre nosotros y el hizo una expresión de dolor, la flecha no había alcanzado a ninguno de nosotros pero había pasado lo suficientemente cerca de Legolas como para hacerle un corte en la mejilla.

Legolas: vámonos

Corrí detrás de él, hasta llegar a la puerta más cercana, la que daba a las escaleras que conducían a las habitaciones. En la puerta se encontraban dos hombres desarmados pero al vernos venir se prepararon para atacar, mire de reojo a Legolas preocupada

Legolas: quédate detrás de mi- yo asentí, y él se adelanto; y sin más noquea a los dos hombres, fue tan ágil y sin poner el menor esfuerzo, que ninguno de los dos lo vio venir, de hecho creo que ni siquiera yo lo vi venir. Abrió ambas puertas y me tomo de la mano para continuar subiendo las escaleras a toda velocidad.

Legolas: ¿en que estabas pensando Miriel? Eso fue muy peligroso

Miriel: no lo sé- sabia que lo que había hecho era estúpido, y ahora me sentía avergonzada- ...intente escapar desde el día que te fuiste, yo, no podía volver a esa celda

Legolas: ¿Te tenían en una celda?- me pregunto molesto

Miriel: si, pero no importa, vamos...

Continuamos corriendo, hasta que llegamos a la ventana por la que Legolas y yo habíamos salido una vez. Él salió primero y yo lo seguí, luego salto a la muralla que rodeaba el castillo y me ayudo a saltar a mí.

Legolas: vamos, por aquí- señalo a la izquierda

-¡Ahí están¡- uno de los hombres de la guardia de Beren logro vernos y entonces un numeroso grupo de soldados nos seguían desde abajo, apuntándonos con sus arcos, y sumando los que nos perseguían por la muralla que venían pisándonos los talones.

Legolas: sigue corriendo, solo hay que llegar un poco más adelante.

Hice lo que Legolas me dijo, pero mis fuerzas se estaban agotando, y e estas alturas me costaba trabajo incluso jadear. Logre ver más adelante que había una escalera de soga, y me sentí aliviada, solo para darme cuenta de que por este lado también se acercaban soldados, nos habían rodeado.

Legolas y yo estábamos espalda contra espalda, Legolas desenfundo su espada y comenzó a combatir con los hombres que llegaban por su lado, pelaba con tantos podía derribándolos, pero simplemente no dejaban de llegar. Los hombres que corrían hacia mi estaban por alcanzarme pero una flecha salió de la nada enterrándose en la pierna del que venía adelante, el hombre aulló de dolor y se detuvo haciendo que los que venían detrás de él se tropezaran y cayeran junto con él.

Busque con la mirada de donde había salido la flecha, y me di cuenta de que cerca del bosque se encontraba otra figura encapuchada que sostenía el arco.

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Born to Die (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora