Miriel terminaba de ajustar las correas de las hombreras que portaba Legolas, nunca se lo había dicho pero le fascinaba como lucía con cualquier clase de armadura o protección de esa clase, esta ocasión sin embargo una sensación de desencanto no la dejaba en paz. La noche anterior había sido perfecta casi como un sueño demasiado bueno y demasiado efímero, y al despertar esa mañana se encontraba con la realidad de que ahora ella Legolas y todos sus amigos debían partir a la guerra.
-Te ves muy bien- dijo Miriel cuando termino de ayudarle a alistarse, intento sonreír cuando sus miradas se encontraron pero su ceño fruncido delataba lo que sentía.
-¿Estás segura que no quieres ir al frente conmigo y los demás?
-Sí, estaré bien junto con los otros sanadores... pero Gracias.
-Sé que odiaras que pregunte pero ¿hay alguna posibilidad de que reconsideres quedarte?- Legolas pregunto casi como una súplica.
-Estoy segura de mi decisión Legolas, sé que no soy un soldado pero hare cualquier cosa que pueda para ayudar a detener a Beren.
-...No quiero que nada malo te ocurra.
-Ninguno de los dos puede estar a salvo mientras Beren sea rey... Y ya estamos muy cerca de enfrentarlo.
-Lo sé- le contesto él con un mirada triste- Eres todo lo que alguna vez quise Miriel, me has mostrado una vida que nunca creí podría tener pero ahora que sé que es posible, ya no puedo imaginarme sin ti.... Voy a pelear hasta el final.
-Yo tampoco puedo verme sin ti a mi lado... Tendrás mucho cuidado ¿verdad?- pregunto Miriel angustiada mirándolo a los ojos-... cuando estés en el campo de batalla.
A Legolas le aterraba lo mucho que su bienestar significaba para ella, él conocía los horrores de la guerra y la facilidad con que algo podía salir mal, pero al mírala no pudo decir nada más que...
-Lo tendré.
Miriel dio un paso al frente envolviendo sus brazos alrededor de él quien imito sus movimientos uniéndose en un abrazo, con la cabeza recargada sobre su pecho ella inspiro profundamente el aroma de él quien acariciaba gentilmente su cabeza.
-Te amo Legolas- dijo en un susurro apenas audible.
Se sostenían con fuerza temiendo el momento en que tuvieran que soltarse, temiendo el camino que ahora debían recorrer, pero sabiendo que afrontarlo era la única manera de poder al fin, ser libres.
"Cuando sales por la puerta pienso que no vuelves nunca...
Y si no te agarro fuerte siento que será mi culpa"*
La mañana era gris, y a pesar de que el rey había hecho todo lo posible por ofrecer algo de esperanza, tristeza era lo que se respiraba en el ambiente. La gente, en su mayoría mujeres niños y ancianos se habían aglomerado a todo lo largo de la calle principal de Minas Tirith esperando ver pasar al rey Aragorn y las largas filas de soldados que partían con él hacía la guerra, flores cubrían la calle a su paso como un último gesto de despedida de todos aquellos que se quedaban, con la esperanza que no fuera lejano el día que volvieran a verse.
Se sentía como si el mundo tal como lo conocía se desmoronara, como si una oscura sombra lo cubriera y envenenara. De esta manera comenzaba, Gondor y Rohan ahora se encontraban en camino a la primera guerra entre los hombres. ¿Cómo es esta la realidad que vivimos? Se preguntó Miriel cuando dejaba la ciudad.
"El hogar está detrás, el mundo por delante
Y hay muchos caminos por andar
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Born to Die (Terminada)
FanfictionEl anillo único había sido destruido, el heredero perdido de Gondor, Aragorn hijo de Arathror, había vuelto, la era del hombre había comenzado y así lentamente los pueblos de la tierra media se levantaron de las cenizas después de las terribles guer...