Born to Die (Terminada)

CAPITULO 44

Miriel caminaba atreves del sendero del bosque emocionada porque era la primera vez que tenía la oportunidad de conocer algo más del bosque que los alrededores. Esa mañana mientras volvía de la biblioteca en donde había estado estudiando con Lindir se encontró con Elrohir y Glorfindel quienes por casualidad iban de salida a una pequeña expedición de reconocimiento en el bosque, ellos la saludaron alegremente y se detuvieron a hablar con ella un rato, ya cuando se despedían a Glorfindel se le ocurrió preguntarle a Miriel si le gustaría acompañarlos, claro está ella acepto encantada.

Elrohir: no creí que quisieras venir Miriel- le dijo desde adelante en donde caminaba asegurándose que el camino fuera seguro

Miriel: ¿Bromeas? Estaba impaciente por ver algo más del bosque

Glorfindel: creímos que estarías con Legolas o algo así

Miriel: oh en realidad no lo he visto mucho últimamente ha estado muy ocupado-ella se encogió de hombros- hace tres semanas que su padre se entero y desde entonces Legolas ha estado muy atareado- ella suspiro pesadamente cuando termino de explicarles porque se había encontrado tan sola los últimos días

Elrohir: no te preocupes Miriel estoy segura que muy pronto tendrán tiempo para estar juntos- la consoló y ella sonrío

Miriel: eso espero... bueno, alguien sería tan amable de decirme a donde vamos

Glorfindel: nos dirigimos a Dol Guldur

Miriel: suena horrible

Glorfindel: lo es, de hecho por un tiempo estuvo habitado por Sauron- Miriel palideció al escuchar el nombre y miro a Glorfindel sorprendida

Elrohir: fue en ese tiempo que el bosque enfermo y comenzaron a llamarlo Mirkwood

Miriel: fue en el tiempo en el que se suscito la batalla de los cinco ejércitos ¿no es así?

Glorfindel: así es- le contesto sorprendido de que lo supiera y ella sonrío

Miriel: pero el bosque esta mejor ahora ¿verdad?- se acerco a un árbol y acaricio la corteza fijándose en el curioso color que tenia con matices oscuros

Glorfindel: si... más no completamente sano- admitió apenado

Elrohir: es comprensible, por largo tiempo se oculto aquí un terrible mal- hablaba con recelo mirando a los alrededores- esa clase de maldad deja secuelas- le dijo a Miriel y la miro apesadumbrado, entonces Miriel se pregunto cómo habría lucido ese lugar mucho mucho tiempo atrás cuando aun no era azotado por el mal, pero su mente no pudo crear dicha imagen

Miriel: este es el bosque más hermoso en el que he estado, aun enfermo no se compara con los que hay alrededor del reino de las montañas grises

Elrohir: Te hubiera encanta el valle de Imladris

Miriel: ¿Rivendell? Oh hubiera dado cualquier cosa por conocerlo

Glorfindel: nosotros solíamos vivir ahí- ambos Glorfindel y Elrohir parecían nostálgicos al hablar de ello

Miriel: Extrañan su hogar ¿no es así?

Elrohir: en ocasiones- contesto con la mirada baja

Continuaron caminando por el sendero mientras Elrohir y Glorfindel le contaban fantásticas historias sobre Rivendell a Miriel, el camino se hizo corto y antes de que se dieran cuenta de la distancia que habían caminado se encontraban justo a la entrada de Dol Guldur, entonces Miriel pudo comprobar que el nombre se había quedado corto, el lugar era mucho más horrible de lo que se escuchaba; se trataba de una lúgubre y decadente fortaleza en ruinas. Miriel no se dio cuenta de cuánto tiempo se había perdido observando los alrededores hasta que se dio la vuelta y vio que Glorfindel ahora llevaba una antorcha encendida.