-SAM-

Capítulo XX

Matías:

Los días, así como las semanas y algunos meses han pasado. El tiempo ha pasado tan rápido que apenas podemos recordar entre risas la última vez que Samantha tuvo un problema. Después que esa chica la golpeo y el revuelo se armo en aquella fiesta ni Anthonella ni sus amigas se han vuelto si quiera a mirar a Sam. Las únicas peleas que ha tenido durante estos meses han sido con Daniel, su entrenador y amigo. Samantha y Cassie no pueden entrenar juntas, o al menos, así lo declaro él. Mi novia y mi hermana toman el gimnasio de boxeo como un lugar para bromas cuando están juntas, y lo peor, es que todos los chicos allí les prestan atención y se ríen de las tonterías que hacen.

Ocho meses han pasado desde que Cassie llego, desde aquella pelea. Exactamente la semana pasada Samantha participo en las nacionales...si, el amor de mi vida ha cumplido uno de sus más grandes sueños. Para mí fue una completa tortura ver como recibía aquellos golpes, la sangre salir de su boca, su mejilla rota, incluso en el último combate fue lanzada al piso del cuadrilátero. Todos pensaron que allí terminaría todo, todos menos lo que la conocemos, Samantha Collen no se rinde a la primera. Se levanto tambaleándose, sangrando con moretones por casi todo su rostro, no sabíamos cual de las dos peleadoras estaba en peor estado.

En un momento de la pelea cuando esta casi terminaba, Carlos, su viejo entrenador llego y tomo el lugar de Daniel para guiarla. Yo temblaba, juro que mis ojos estaban llenos de lágrimas al verla en tal estado, se tambaleaba; su mirada estaba perdida, pero no quería parar, no se daba por vencida. Cuando el último minuto de descanso se otorgo a ambas peleadoras, Sam camino hasta la esquina que le asignaron y no pudo evitar emocionarse y abrazar a Carlos cuando lo vio allí, acompañándola. A cada boxeador se le asigna una antes del combate, en ella se reúnen el boxeador, el entrenador y demás preparadores durante el tiempo de descanso entre los asaltos.

No puedo decir que fue lo que le dijo, lo que le aconsejo porque yo solo lo observaba todo desde las gradas, pero limpio el rostro de mi novia, su guarda bucal, la removió colocando ambas manos en sus hombros y grito algo que no logre escuchar. El y Daniel que para ese momento paso a ser su ayudante estaban más nerviosos que todos en las gradas.

Cassie no paraba de gritar, brincar. Sam y su novia Isabel estaban más nerviosos que yo, la ultima mordió todas sus uñas. Ludmilla no podía ni siquiera observar como su amiga era golpeada de vez en cuando y Marcos parecía estar acostumbrado a todo esto ya que mostro calma en todo momento, solo algún gestos de vez en cuando.

El ochenta por ciento de los universitarios estaban allí, dentro y fuera del lugar donde se realizo la pelea apoyando a su compañera de Universidad. El decano de la facultad, de la Universidad y varias figuras importantes de la casa de estudio estaban presentes para ver a su alumna. Los padres de Samantha, mis padres... estábamos todos. No falto nadie.

Después de ser aconsejada por Carlos volvió al cuadrilátero con las energías renovadas, al menos así parecía. Su contrincante, que era de otra universidad sabía defenderse bastante bien, ella había ganado unas olimpiadas hace dos años, todas las apuestas estaban a su favor, todos decían que una novata no podía ganarle a una luchadora olímpica. Pero no fue así, al último minuto Samantha impacto un golpe tan potente sobre su abdomen que hizo que esta se doblegase y termino con ella con un Uppercut que la envió al piso inconsciente. El hombre dentro del cuadrilátero empezó el conteo junto con todo el público que apoyaba a mi novia y unos minutos después alzo su mano indicándole a medio mundo que Samantha Collen era la absoluta y total ganadora.

Todos lloraban emocionados, Isabel, Ludmilla, sus padres, los míos. Cassie brincaba y gritaba en su lugar emocionada y también con lagrimas en los ojos.