Capitulo 20.

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Bueno, creo que esta es primera vez que me presento en toda la historia... XD
Espero que les vaya gustando,  tengo toda la trama ya en mi cabeza, se vienen muchos momentos Ulquihime....y muchas otras sorpresas mas...espero que tambien guste...esta idea ha venido rondando mi cabeza desde hace uno dos años....y ya hace uno la inicie en esta cuenta.....aunque el manga haya terminado como termino, no ea impedimento para hacer realidad mi Ulquihime en un fic....y mas como este....les cuento ademas....este fin de semana ire a comprar mi nueva compu...porque la que tengo...uf...ya no da para mas....

Gracias por sus comentarios! En serio....me animan a seguir escribiendo....
Sin mas les dejo un nuevo capitulo de la historia...X3

*****
Mientras Orihime caminaba sin rumbo con un semblante pensativo marcado en su rostro, se topó con alguien, estuvo a punto de caer de no ser que fue sostenida por la cintura antes de que eso sucediera.

-Eh?!-sus mejillas se tiñeron de rosa pálido al sentir esas manos en su cintura.

-Deberías tener un poco más de cuidado, podrías lastimarte.-dijo quien la sostenía.

-Huh?!-"esa voz"pensó de inmediato.-d-disculpe mi imprudencia.-se soltó del agarre e hizo una reverencia.

Sonrió y rio silenciosamente, llevo una mano a su rostro para evitar que lo viera reír la chica.-vamos, no te pongas así, fue un accidente, ¿no es así? Orihime-chan.-

-Eh?! M-Mitsuki-san?!-dijo sorprendida Orihime, levanto inmediatamente la vista para ver al joven parado frente a ella, con ese rostro de amabilidad y sonriendo cálidamente.-Q-que hace aquí?!-pregunto asombrada la chica.

-Oh...te ves hermosa Orihime-chan.-dijo sin dejar de sonreír, Mitsuki iba vestido de forma casual, iba con una chaqueta de color verde musgo, una camisa lisa de color negra y unos pantalones de mezclilla de color azul. Se había hecho una media coleta en su cabello largo y solo caían unos cuantos mechones en su rostro, además de no estar usando sus habituales lentes.

"Se ve muy guapo"- pensó Orihime en ese momento, nunca le había visto vestido de esa forma, la verdad, como solo lo había visto en la oficina era imposible verlo vestido casualmente.-"Parece otra persona".-Hmmm...M-Mitsuki-san que hace por aquí?...-pregunto nerviosa la chica.

-Huh?! No te dijo Ulquiorra-san que vendríamos?.-le pregunto confundido.

-¿Vendríamos? ¿Quiénes?¿No vino usted solo? ¿Alguien más ha venido?.-pregunto confundida más de lo que ya estaba.

-Claro, la Sra. Cifer-sama vino también, ah! Ahí viene.-dijo señalando en la dirección que venía.

Johana se había vestido de igual forma, casual, llevaba un pantalón de pescadorque le llegaba un poco debajo de sus rodillas casi a la altura de sus tobillos este era de color turquesa, una blusa manga larga de color rosa palido con encajes en la línea de los botones, y un suéter de color crema por el clima, llevaba su cabello suelto, traía consigo un ramo de rosas azules.

-Hola Hime-san, pero que linda te ves!-dijo alegre la mujer Rubia.

-Ah...b-bueno...g-gracias...usted también se ve hermosa.-dijo ruborizada, en verdad la madre del pelinegro se veía muy bella, incluso dudaba mucho aparentar la edad que tal vez tendría.-Eh?! Para que son esas rosas?.-pregunto curiosa Orihime.

-Huh?! Ah! Son para mi hijo, no te dijo que vendríamos a verlo?.-

-N-no la verdad no, p-pero no es demasiado solo para el festival, es decir, el solo ayudo con los postres para nuestro puesto.-

-Cómo?! Ahh...te refieres a eso.-dijo sorprendida y luego volvió a sonreír.-no, no hablaba de ello, la verdad estoy emocionada porque después de tanto tiempo, podre verlo hacer lo que más ama.-le dijo mientras ponía una mirada nostálgica.

-¿Lo que más ama?!.-pregunto con sorpresa la chica. ¿Sería posible que él conociese ese sentimiento?¿era posible que en verdad él tuviese corazón?

-Sí, Ulquiorra-san, dará un concierto, tocara el violín, él es un popularmúsico en su país, y esta será la primera vez que toque desde hace mucho.-le contesto Kazehaya.

-V-Violín?! P-pero....-y fue entonces cuando se le vino a la mente las palabras del pelinegro –"tengo actividad en un hora...".-e-entonces, ¿Ulquiorra puede tocar el Violín?.-pregunto mucho más sorprendida.

-No lo sabias, ¿verdad?.-dijo nostálgica la madre del chico.-No te preocupes, hay muchas cosas que no sabes aún. Sabes, Ulquiorra hace mucho que no toca, y cuando venimos a este país, creí que podría ayudarle....me dije que si tal vez cambiaba de ambiente, era posible que podría recuperarse, pero aun así, tenía tanto que no tocaba, y fue hasta hace unas semanas que decidió volver a hacerlo, es por eso que estoy muy contenta.-termino diciendo casi con lágrimas en los ojos y con una sonrisa muy cálida.

-En verdad no sabía de eso...-dijo bajando la mirada la ojigris.-¿y que clase de música toca?.- pregunto aun cuando le dolía un poco por no saber ese detalle de él.

-Es música clásica, fue uno de los jóvenes más talentosos de Alemania, y participo en muchos eventos ganando el primer lugar en varios de ellos, en realidad Ulquiorra-san es un joven muy admirable.-dijo sonriendo Kazehaya

-Eh?! En serio?!...Hmmm...Mitsuki-san, porque ahora le llamas por su nombre.-

-Ah!.-rio nervioso.-bueno fue porque él me lo pidió, dijo que no le gustaban los honoríficos y que no le tratara como a los demás o algo parecido.-respondió el joven igual de nervioso mientras ponía su mano en su cabeza.

Orihime sonrió, al pensar que a pesar de todo,él no había cambiado nada, y que más daba si no conocía una o dos cosas acerca de él, ella había dicho que quería saber más de Ulquiorra, entonces porque no volverlo a intentar, una buena forma para estar más cerca de él, la mejor manera para...-protegerlo.-susurro para sí.

Kazehaya fugazmente miro de reojo a Orihime, de forma seria, curvo levemente sus labios, sin que ambas féminas se percataran.-Bueno, porque no vamos entonces, Cifer-sama, ¿a qué horas es el concierto?-

-Ah...es verdad, es casi la hora, porque no vamos juntos Hime-san, sé que él se alegrara de verte ahí.-le dijo sonriéndole tan cálidamente.

-S-seguro que puedo ir?.-pregunto muy nerviosa y sonrojada.

-Claro! Estoy segura, ven vamos, ¿o es que tienes algo que hacer?.-pregunto la mujer mayor.

-N-no no tengo nada que hacer, iré con ustedes.-levanto la mirada y sonrió de forma cálida, tras eso empezó a caminar con ellos rumbo al gimnasio.

Mientras caminaban, Orihime se apresuró y colocándose frente a ellos dio una reverencia. Sorprendiendo a ambos invitados.

-Hime-san? ¿Por qué haces eso?.-pregunto curiosa la rubia.

-Disculpen, es para demostrar mi agradecimiento por lo del otro día, no tenían que tomarse las molestias para celebrar mi cumpleaños.-dijo un tanto avergonzada.

-Ah! Es eso, no te preocupes, fue algo que nos dio mucho gusto hacer para ti, no es así Kazehaya-san.-

-Claro Orihime-chan, con solo que te haya gustado nuestros obsequios fue más que suficiente.-dijo sonriendo y mostrando sus blanquecinos dientes, el apuesto joven.

-Si! Me gustaron muchísimo gracias.-se apresuró a decir la pelinaranja.-aunque de verdad no debieron tomarse tantas molestias por eso.

-No te preocupes por eso, y nos alegra que te hayan gustado, ahora sigamos o se nos hará tarde, si Ulquiorra no ve que estamos a tiempo, estoy segura que se molestara.-dijo sonriéndole muy feliz y cortes Johanna a Orihime.

-Es cierto...-dijo en voz inaudible la chica.

Después todos siguieron con su andar hacia el gimnasio de la escuela.

Otra Oportunidad (La dulzura de un amor se paga con lagrimas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora