Encuentro Inesperado (TERMINADA).

25

White llegó a las 9:18 de la mañana. Es un hombre muy ocupado, no pensé que una agencia publicitaria tuviera tanta demanda.

Su agenda es muy grande. Muchas juntas, muchas entregas, muchos números a los cuales hay que llamar para confirmar.

Wow.

Todo eso lo descubrí esta mañana cuando repasé la agenda con él. Por lo menos no es un jefe amargado, al contrario, es muy agradable. No deja que tanto trabajo lo sofoque.

Como a Beckett.
Aunque creo que él es así por naturaleza.

–¿Y bien? ¿Entiendes todo lo que tienes que hacer?

–Llamadas de confirmación para fichas publicitaria, llamadas para confirmar el día de entrega, llamadas para reuniones y algo de papeleo

–Muy bien, aprendes rápido. Me gusta porque esto no es tan fácil como parece

–Lo noté, pero no hay problema– No podía decir lo estresante que sería esto, es mi primer día.

–Muy entusiasta el primer día, pero tranquila, no tienes que hacerlo todo hoy

Ay que alivio.

–Gracias ¿Algo más? –pregunté mientras me paraba de la silla amueblada frente a su escritorio.

–Un poco de café estaría bien, gracias

–Enseguida lo traigo– dije mientras salía de la oficina.

La pequeña área de refrigerios estaba desierta ¿Como le gustara el café a White? ¿Dulce o amargo? ¿Con o sin crema?

Decidí tomar una pequeña bandeja y en ella puse la taza con café, una tacita de cerámica con azúcar, una mini tetera con crema y una cucharita. Creo que eso estará bien.

–Hola– Saludó una voz a mis espaldas.

–Hola– me gire para ver a la chica detrás de mí. Una rubia con un traje similar al mío, pero negro y camisa y labios rojos.

–Así que tú eres la nueva ¿Ya te arrepentiste?

–¿Disculpa?

–Su antigua secretaria no duró el año. Se cansó de ella y la despidió. No te hagas muchas ilusiones.

–Por algo debió ser ¿Quién eres tú? – esta chica ya me estaba desagradando.

En mi primer día.

–Ya me conocerás después. Nos tocara trabajar juntas en algún momento.

Espero que no.

–Tengo que irme. Adiós.

Loca

A White le gusta el café negro, bien cargado y con poca azúcar, pero fue tan amable que se lo tomó con crema porque ya la había traído.

Su otra asistente debió ser una incompetente que lo saco de quicio para que llegue al punto de despedirla.

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ADELANTO DEL SIGUIENTE CAPÍTULO:

–Carla, mañana vas a acompañarme a la nueva empresa. Tengo que reunirme con mi socio allá para planificar algunas cosas. A las 9:00am.