El engaño de Christian Grey. (Editando)

Capitulo 2

C A P I T U L O  II

'Ese tenemos que hablar sonó mal y así fue'

Christian y yo vamos a hablar tranquilamente, como dos personas muy enamoradas.

—¿qué es lo que te pasa Anastasia?—uh, sin vergüenza.

—¿qué es lo que te pasa a ti Christian? ten los pantalones para admitirlo—este me mira incrédulo

—no se de que hablas... ilumíname—

—¿quién era la mujer que te llamó?—le solté bruscamente.

—Ana, no es lo que tú crees sólo es una amiga—su voz no sonó muy convencida que digamos.

—¿qué clase de amigas Christian? ¿de esas que te follas? o ¿qué amigas? me prometiste cambiar—le espetó furiosa...

—¡pero nunca cambiaste Christian Grey!— Le grite al ver que ya no respondió nada.

—te lo advertí Anastasia, te dije cual monstruo soy— dice muy tranquilo.

—pero ¿qué pasó con el 'cambiare por ti'?—dije al borde de las lágrimas.

—es que no lo entiendes, así es como soy Ana. No amo a nadie, ¿cómo voy amar a alguien si ni siquiera me amo a mi mismo? Soy frío y sin sentimientos pero eres tan ingenua que hasta das pena...Por favor ten dignidad y no me busques, ya estoy cansado de ti— dice tomando su saco y las llaves.

—es como solucionas todo, alejándote de tus problemas,  eres un bastardo mentiroso.

—quédate si quieres, me da igual. Espera el divorcio y por favor olvídate de mí— dice por último girándose para salir...dando un portazo.

Ese no es mi Christian, ¿cómo no va tener sentimientos? Sin embargo, fue tan cruel al tratarme as, me abandonó y no pude decirle que estoy embarazada y de un mes, me duele pensar que mi hijo crecerá sin su padre.

Sequé las últimas lágrimas con todo el odio de mi corazón, Grey pagará caro cada lágrima y humillación, no más, ya no me dejaré pisotear como si fuera un pedazo de mierda.

Fui hacia arriba y guardé un poco de mis pertenencias ya que, casi todo me lo compro Grey y salgo de la habitación.

Gail está fuera viéndome con lágrimas en los ojos, su nariz está roja y casi tiembla por los sollozos.

—mi niña, no tienes porque irte—dice mientras me da un abrazo.

—estaré bien, puedes venir conmigo...no me iré muy lejos. De hecho comprare una casa y necesitaré de una abuela que cuide de mi pequeñín ¿qué dices?—le pregunté un poco más animada.

—¡claro que me encantaría! ¡tendrá a la mejor abuela! ya llegué yo de trabajar y después lo cuidaría.

—nada de trabajo para ti Gail, ya has hecho mucho por mi, la que trabajaría sería yo. Pienso poner una editorial, y pues tengo el dinero de mis ahorros.

—quisiera quejarme, pero con lo terca que eres dará lo mismo...

[...]

Ya estamos alojadas en una casa muy bonita y comoda, ser la hija de Raymond Steele da muchas ventajas. Ya estaba amueblada, y más tarde iríamos a comprar cosas que falten.

Terminé de alistarme y salí de nuestra nueva casa para ir a firmar el contrato compra-venta de una pequeña editorial que me recomendaron, su nombre es S.I.P ya después le cambiaré el nombre.

Entré a la cochera y me subí a mi flamante Audi r8, es una belleza al completo. Todo este lío me lo he tomado muy bien y muy rápido a decir verdad, Sin embargo por dentro estoy mal pero mi pequeñín me da fuerzas para salir adelante.

Llegué y en recepción está una rubia, me recuerda a cuando fui a entrevistar a Grey...

—Ana no pienses en el—me regaño internamente.

—Buenas tardes, Anastasia... Steel— estreche mi mano hacia ella tratando de verme lo más formal posible— Estoy aquí para firmar los papeles, Así que si me es muy amable, quiero pasar directamente con Jack Hyde— le suelto con voz autoritaria.

—claro, pase Sra. Grey—muerdo mi labio— el señor Hyde la espera en su oficina.

Pasé directo a la oficina, el camino ya me lo sabía ya que, siempre venía a visitar a mi gran amiga Hanna.

Toque la puerta y después de un  'adelante' entré firme y fuerte. Hyde me mira como siempre ¡no soy un pedazo de carne andante!

[...]

Todo salió como yo quería, las acciones pasaron a mi nombre y la editorial a partir de mañana sería mía. Todo esta bien, solo que por dentro estoy echa una mierda, pero pronto seré la editora más famosa de todo Seattle, ya verán.

Baje del auto y fui a una tienda para bebés muy prestigiosa.

Una vez dentro me arrepiento de haberme bajado, ahí estaba Christian y no estaba solo ¡estaba con Susana! Una de mis más grandes amigas y ella tenía un pequeño vientre que él acariciaba como si fuera oro.

Lágrimas caían y caían por mi rostro, esto estaba muy mal. Todo este tiempo fui una estúpida, no sabía que hacer así que hice lo primero que se me vino a la mente

Llamando a Ian...

—hola pequeña que pases...

no lo deje terminar por que hable muy rápido y entre pausas.

—Ian necesito que vengas... Christian... Engaños....embarazo... Yo muy mal—vomite todas las palabras, sí que estaba mal.

—pequeña tranquilízate estoy cerca de Seattle, dime dónde estás, voy en camino—me colgó y le mande la dirección de mi casa así que a como pude salí para allá..

Esto duele, ¿cómo pudo hacerme esto? yo lo amo con locura y el me cambia por una cualquiera...

Llegué y lo primero que me recibió fue la soledad ya que Gail está con Taylor. Me derrumbo en el suelo a llorar, ¡me odio por amarlo tanto! Por sufrir por alguien que no lo merece.

A partir de ahora nadie me verá caer, sino triunfar, todos verán a la decidida, fuerte, fría, segura Y nueva Anastasia Steel... solo espero no rendirme, pero junto a mi bebe, no me daré por vencida nunca más ....

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