El diario de I.M___Monsta X___[BL]

23va Página Especial

Minhyuk

Si tuviera que hablar sobre qué tipo de relaciones mantenemos los miembros de MonstaX, me vería en un gran aprieto.

Es verdad que hemos llegado a ser muy unidos desde que vivimos en el mismo dormitorio, nos hemos acostumbrado a esas cosas que uno no mostraría frente a otras personas.
Con el tiempo se ha hecho natural la semidesnudez de Wonho o Shownu al momento de dormir y durante los días calurosos, tampoco me han vuelto a despertar los ronquidos de Jooheon; I.M-shi me dijo una vez que hablaba dormido –y sigo sin creerle–. Incluso el malhumor de Kihyun se ha vuelto indispensable en nuestro día a día.
Pero cuando lo pienso un poco más, me doy cuenta que hay un sentimiento que se ha arraigado en los corazones de los muchachos y en el mío también.

  –¿Es que acaso no te gusto? ¿Es eso? – le decía Kihyun a Shownu hace ya algún tiempo dentro de los camerinos, habíamos terminado una presentación y ellos eran los únicos que faltaban por recoger sus pertenencias. Yo nunca quise espiarles, me había devuelto porque había olvidado mi tablet y su conversación parecía muy importante como para interrumpirla.

Shownu no respondió. Kihyun por su parte soltó una risa floja, estaba herido y temí que fuera a descargar su ira en él, cuando en realidad estaba triste y decepcionado de sí mismo.

  –¿No soy suficiente para ti? – continuó estando a punto de romperse.

  – Sí lo eres – dijo sin titubear. Me llevé una mano a los labios para evitar que saliera algún sonido que me delatara. No podía creer lo que veía –. Pero hay alguien más y mi corazón sólo le pertenece a esa persona.

Me sorprendió de sobremanera la seguridad con la que Shownu había dicho tales palabras e imagino que el mismo impacto debió tener en el más bajo pues desvió la mirada hacia el suelo, sus ojos irradiaban impotencia y frustración.

Mi corazón se acongojó al ver a Kihyun más pequeño, más dócil y más frágil. Ahí me di cuenta que él lo amaba, una palabra que quedaba demasiado grande en una relación de amigos, por más buenos y cercanos que fueran.

  –¿Quién es? – preguntó valientemente, sorprendiendo a Shownu y retando a su propia cordura. Shownu dudó por un instante, aún así, la comisura de sus labios se surcó formando una sincera sonrisa.

  –Creo que ya lo sabes.

Y, en efecto, la fuerte mirada de Kihyun se suavizó rápidamente, su rostro y orejas enrojecieron como si toda la vergüenza del mundo la sintiera en aquel momento, después no dijo nada más.

Desde esa vez comprendí lo privilegiados que eran al poder tener esos sentimientos porque, no sólo gozaban de lo que significaba el estar enamorado, sino también que –luego de haber sido rechazados–, aquella emoción prevalecía, pudiendo desgastarse o marchitarse en un futuro, pero allí seguiría.

Kihyun jamás podría odiar a Shownu, no después de que sus sentimientos fueran tan bien recibidos.

Yo también deseé sentirlo... ¿El amor era tan mágico como imaginaba?

Alejé la mirada de la tablet cuando oí un juego de llaves siendo colocadas sobre el mesón, me revolví sobre el mueble y fijé mi vista en Jooheon quien acaba de llegar.
Los hoyuelos de sus mejillas resaltaban como de costumbre y sus  pequeños ojos parecían una línea ligeramente curvada. Me intrigó su aparente buen humor a pesar del cansancio, y mientras ladeaba la cabeza le saludé simplón.

  –Hey, ¿de donde vienes?

  –Salí con Jackson por ahí, estaba muy emocionado de reunirse conmigo – habló sacándose la gorra para revolver sus cabellos rojizos y volvérsela a poner –. Es una persona llena de energía.