Mi dueña me tendió una tira de chaqueta. Memoricé el olor y, después de liberarme de la correa, salí corriendo guiada por el olor a pólvora, sudor, coraje y amor.
Sí, una extraña combinación para un asesino en serie.
Recorrí los pasillos seguida de algunos agentes armados hasta los dientes.
El rastro se hizo más fuerte. Se mezcló con olor a cerrado, humanidad y sangre. Pero como buena rastreadora que soy, no me dejé confundir y continué en pos del asesino.
Ladré una vez avistado el objetivo.
La bala de su pistola fue el punto final de mi historia como perro.
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A través de los ojos de las víctimas
Action¿Y qué si una historia es narrada por las víctimas de un asesino o asesina que busca algo durante años? ¿Y por qué no darle las gracias a @claraguiob por la portada? ¿Y qué si no la copias, ni un poquito, siquiera, y comentas qué te pareció? ¿Deberí...