Capítulo 53

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Capítulo 53

Una hora después, Harry seguía dentro de la casa y los chicos seguían jugando a Quidditch.

-Tal vez sea mejor que vaya a buscar a Harry -dijo Hermione-. Se suponía que hoy iba a descansar.

-Déjale un poco más -dijo Euphemia-. Si en quince minutos no sale, iré yo misma a buscarlo.

-¡Harry! ¡Dobby! -se oyeron los gritos de Didi, provenientes de dentro de la casa.

Severus se puso de pie preocupado, pero se quedó impresionado al oír reír a Euphemia a Godric y a Salazar y los miró con curiosidad.

-¿Qué creéis que ha sido esta vez? -les preguntó Salazar a su primo y su nieta.

-Tendrá algo que ver con la merienda -aseguró Euphemia-. Ya casi es hora. Parece que Didi los volverá a castigar.

En eso aparecieron Harry y Dobby, escondiéndose los dos en cuclillas, detrás de los muebles de jardín.

-¿Harry, qué...?

-Sshhs -mandó a callar a su marido-. Nos estamos escondiendo.

-No podréis evitar vuestro castigo para siempre -dijo Euphemia con una sonrisa.

Repentinamente, Harry y Dobby cayeron sentados al suelo y empezaron a ser arrastrados hacia atrás.

-Suéltanos -protestó Harry luchando contra las ataduras.

-Habéis tirado los esfuerzos de Didi -dijo esta arrastrándolos hacia ellas con cuerdas mágicas.

-No es nuestra culpa -dijo Dobby.

-Eso. Si no nos hubieras asustado, el pastel seguiría entero y ni te habrías dado cuenta de que lo habíamos tocado -los defendió Harry.

-Suéltanos.

-Dobby, ve a limpiar la cocina -ordenó Didi haciendo desaparecer las ataduras mágicas.

-Pero...

-Ahora.

Protestando, Dobby se fue.

-¿Qué vas a hacerme? -preguntó Harry desconfiado, aún sentado en el suelo.

-Tú vas a remplazar el pastel que habéis destruido.

-Odio las cocinas en verano -se quejó.

-Haberlo pensado antes.

-Pero hace mucho calor. A la niña y a mi nos dará un golpe de calor -argumentó intentando librarse del castigo.

-No vas a escaparte de tu castigo.

-Hermione, ¿verdad que nos puede dar un golpe de calor? -intentó buscar apoyo en su hermana.

-Si tu cocina se parece a la de Hogwarts, podría pasar.

-¿Lo ves? -le dijo a Didi-. No puedes encerrarme en la cocina.

-Didi, tráele la cocina a fuera -pidió Euphemia.

-Abuela -Harry se quejó de que Euphemia fuera dando ideas.

-Tu solo te has metido en problemas. Y sabes que Didi es capaz de esperar a que des a luz para encerrarte en la cocina.

-Vaaale, lo haré. Pero Hermione no me deja cocinar -dijo con una sonrisa-. Si lo intento va a pegarme.

-¿No lo dejas cocinar? -preguntó sorprendida a Hermione.

-Poco después de que nos mudáramos a nuestra casa, Harry intentó cocinar y provocó una pequeña explosión.

-¿Qué? -preguntó Severus asustado-. ¿Por qué no me lo habéis dicho?

La venganza puede ser buenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora