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Una palabra 'Asombrosa'. Si. Esa era la definición de la casa. Mi casa. Bueno. La casa de mi "padre" Jared y mía.
Nunca había vivido en un lugar así. Era tan asombrosa que daba miedo. Mi habitación al igual que la casa era enorme. Con una gran cama, un gran baño y un gran balcón. Lo único que pude hacer fue probar esa gran cama, lanzarme a ella y descubrir cuan cansada estaba ya que me quede dormida a los pocos segundos.
Así pasaron esos 3 días antes de que entrara en mi nuevo instituto. Viajando de aquí para allá. Conociendo playas, restaurantes, cines, centros comerciales y lo que más me daba miedo. Tiendas. Tiendas llenas de chicas entusiastas observando, probado y comprándose ropa. Lo peor. Toda rosa. De colores alegres. Desde sandalias hasta zapatos de tacones de más de 10 cm. Desde musculosas hasta blusas. Desde pantalones (todos femeninos por supuesto) hasta faldas. Diminutas faldas. Lo peor. Es que yo vestía igual que esa tienda, ¡QUIEN NO ODIARÍA ESO! y lo peor. Me tenía que vestir así contra mi voluntad. Pero ya que era 405 Agente Especial de la A.S.I. y jure lealtad. No me quedaba de otra.
...
Al llegar la mañana donde tenía que ir a la dichosa escuela, encontré sobre mi cómoda mi traje asignado para el primer día junto a una nota que tenia garabateado el nombre Alexa en el frente.
'Alexa: Para el primer día de escuela te hemos elegido un atuendo que creemos que aceptaras sin desear tener un revolver cerca para dispararnos. Los primeros días no se te confiaran armas, hasta nuevo aviso, cuando aprendas a controlarte y a realizar esta misión como corresponde a un Agente Especial. Así que solo una orden. Compórtate. Y recuerda no te sobre pases con tus habilidades. Solo hasta el punto que Tyler, nuestro pasadizo para llegar al objetivo, te note. Pero no queremos escuchar que esa familia ha levantado sus sospechas. Porque si llegamos a escuchar que reforzaron sus guaridas y sistemas de alarmas, despídete de esta misión. Después de la primera semana pide unirte a las porristas. Claro, que te acepten. Y recuerda. Siempre sonríe que esta es la misión más importante para la A.S.I. Anne Jones, directora del comando de Washington. A.S.I.'
...
— ¿Lista? —se coloco el casco. —Iremos en una ¿moto? —dije con entusiasmo, apuntando la deslumbrante motocicleta negra de Jared. —Si, Anne dijo que el primer día necesitabas la atención de todo el instituto. Y que mejor forma que hacerlo que llegar en una despampanante y ruidosa motocicleta negra —dijo con voz de anunciador de comercial que me hizo reír. —Claro con un chico apuesto. — ¿Chico? ¿Apuesto? —Oye, oye, oye no me digas eso que primero, si soy apuesto y segundo, por lo menos dime que parezco de 27. —Si —bufe. Tenía razón. En sus tiempos había sido un chico muy apuesto, y por la reacción de muchas veinteañeras que había conocido atraves de los años, supongo que si era apuesto y si parecía de 27. —Además... ¿Quién no se interesaría en una chica: nueva y que llega en una moto con un chico mayor? —enumeró con los dedos. Lo pensé un poco. Si, tenía razón me daba más posibilidades. Espera, el no creerá que...Oh no. Si lo cree. —Tú crees que mi forma de acercarme a... —dude. —Tyler —completo la frase. —Si eso, tú crees que me acercare a él con el objetivo de ser su novia —lo acuse con el dedo. —Claro, para eso hacemos todo esto —Sueña con eso Jared —subí a la moto. —Ya veremos...ya veremos Alexa —y arranco. ¿Jared sabía algo que yo no?
