2. El secreto de Matteo Balsano (#Lutteo)

CAPÍTULO XXIII

MATTEO

Una semana completa que se me pasó volando, todo mi tiempo y energías estuvieron puestas en el nuevo bar para su inauguración en el día de hoy. Estoy bastante nervioso a decir verdad, hicimos un evento donde todas las personas que iban al Jam & Roller estaban invitadas y bueno después de eso Nina, Jim, Yam, Jazmín, Delfina y hasta Ámbar se ofrecieron a dar volantes en la calle para hacer más publicidad, abrimos redes sociales, todo lo que sea necesario para que este gran proyecto sea un éxito, así que espero con ansias que llegue el horario de apertura.

- Es hoy. – dice Addy en cuanto se suma a la mesa del desayuno. – Se va a llenar el lugar, lo sé

- Gracias. – le sonrío en cuanto termino mi café. – La verdad es que espero que tanta publicidad funcione, me jugué demasiado en este proyecto

- Matteo. – Me corta y se acerca a mí, no me alejo. – Vos sabes hacer esto, no es el primer bar que abrís y si el de Londres es un éxito esté será aún mejor, acá tenés algo que allá no

- ¿Qué? – pregunto

- Muchísimas personas apoyándote. – Intenta darme un beso pero me corro de manera disimulada

- De verdad Addy, muchas gracias. – Le doy un sencillo beso en la mejilla y me levanto

Tengo tantas cosas que hacer aún que siento que las horas del día no me alcanzan, todos estuvimos de acuerdo en abrir a la noche para coronar esta apertura con una especie de fiesta, ya mañana el bar comenzaría a funcionar en un horario normal. Estoy muy nervioso, me estoy jugando hasta el culo con esto y arrastré a todos mis amigos a poner sus ahorros también.

Tomo el auto del garaje pero antes de emprender el camino hago una pequeña parada en la estación de servicio para cargar combustible.

El clima se encuentra agradable aunque una leve brisa matinal se hace presente, espero que a la noche esté agradable porque todo esto está diseñado para que pueda haber gente afuera, sino excederemos la capacidad de personas y eso no es bueno para el primer día.

- Señor. – El chico con mi cambio me saca de mis pensamientos

- Perdón. – digo tomando el dinero. – Traigo muchas cosas en la cabeza.

- Sí, no me diga. – Me sonríe

- ¿Hoy trabajas hasta tarde? – pregunto con una pequeña idea

- No, estoy hasta las seis por suerte.

- Perfecto, hoy inauguro mi bar y bueno podes pasarte. – lo invito mientras saco una de las tarjetas recién impresas. – La primera cerveza es gratis. – Le guiño el ojo y la toma de mi mano

- Pues ahí nos vemos. – Me hace una seña de afirmación. – Muchas gracias

- A vos. – Le sonrío y vuelvo a subir a mi auto

Si sigo así realmente voy a superar la capacidad de gente, pero estoy tan emocionado y preocupado por todo que siento la necesidad de saber que tendremos personas. Mierda, nunca estuve tan nervioso.

Enciendo el motor y le envío en bocinazo en señal de saludo, el chico extiende su mano y yo me uno al tráfico. Mi celular vibra sin parar pero decido no prestarle atención, es más importante llegar y no pienso hablar mientras conduzco, aunque mi vida sea una mierda prefiero mantenerme así, vivo.

Enciendo el intermitente y giro a la derecha, mi maldito teléfono sigue vibrando pero intento evitarlo, solo me quedan un par de cuadras ¿Quién mierda me molesta tanto? Hoy es un día donde no necesito tensiones. Estaciono como puedo en el poco lugar que encuentro, tomo mi mochila y bajo.