Hannibal

Rumores absurdos y mentiras peligrosas (Tercera Parte)

//N.A: Tengo dos capítulos mas escritos que solo necesitan ser corregidos así que voy a estar actualizando este fanfic muy seguido, créanme que la cosa se viene intensa xD por cierto, ayer actualice "El ángel cubierto de sangre" otro de mis fanfics Hannigram, y aunque amenazo mucho y no hago nada, si, en cualquier momento me pondré a subir one shots de esta pareja o cosas Madancy, yolo(?) Espero que disfruten el capitulo, en el próximo empezara todo el salseo xD besos!//

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Estar sólo no era tan reconfortante como Will había esperado. Tenía a sus perros con él y la compañía ocasional de Alana, de Beverly e incluso de Matt, pero en las noches, cuando las pesadillas lo asediaban, no podía contar con ninguno de aquellos amigos.

Y de todos modos.... Seguía sintiéndose horriblemente solo. Así como imaginaba que... Se había sentido ella antes de morir.

Y las pesadillas siempre eran iguales. Gloria Madchen intentando comunicarse con él desde el fondo de su mente, convenciéndolo de que lo que le había pasado no había sido para nada un accidente, mucho menos un suicidio.

Casi todas las noches la veía en su habitación y sentía la necesidad de seguirla hacia el exterior, lugar donde ella era atravesada por los cuernos del alce y después terminaba envuelta en fuego. No sin antes decirle una y otra vez "¿Lo ves?"

Sin embargo, una parte de él seguía deseando proteger a Hannibal, porque si ella había sido asesinada entonces el único culpable podía ser su psiquiatra. El único que podía estar interesado en que ella muriera. La otra opción era algún familiar de alguna de las dos víctimas y esa posibilidad se le hacía irrisoria.

Llegado un momento la presión fue demasiado grande, nunca estaría en paz si no aclaraba lo que le había pasado a Gloria, así que una mañana decidió ir a ver a Jack.

Cuando entró a la oficina de su jefe, Jack Crawford estaba con unas gafas puestas y revisando unos papeles mientras los acomodaba, posiblemente cosas relacionadas al caso de Gloria.

-Buen día Jack...- murmuró Will, haciendo notar su presencia.

-¿Qué haces aquí? ¿No te dije que te tomes unas vacaciones después de lo que pasó?- preguntó Crawford con esa voz que siempre sonaba un tanto irritada.

-Gloria no se suicidó... Y lo que le paso no fue un accidente...- murmuró Will en ese momento, soltándolo sin preocuparse demasiado por el efecto que sus palabras pudieran llegar a tener en el futuro.

Necesitaba decirle la verdad a Jack, al menos la verdad sobre ella. Al menos sin delatar a Hannibal... Pero necesitaba hacerlo.

Incluso si eso significaba jugar con fuego.

-Mandaré a que vengan a tomarte la temperatura...- replicó Jack, girándose a mirarlo con los papeles en la mano, lo único en lo que podía pensar al escuchar esas palabras viniendo de Will, era que estaba enfermo otra vez.

-La mataron, Jack. - lo interrumpió Will, haciendo que su jefe tire los papeles sobre el escritorio y lo mire con seriedad.

-¿Quién lo hizo?-

Will se quedó en blanco casi por un segundo al escuchar esa pregunta, su corazón latía con fuerza. Este era el momento en que decidía si decía la verdad o no.

Pero la verdad implicaría pruebas y él no las tenía. Y tampoco podía contar con Abigail como una testigo confiable, ella no se pondría jamás en contra de Hannibal.