Salí de clases y llame a Lucas el chofer de la familia para que me viniera a buscar, unos cinco minutos después estaba en la heladería esperando a mi mejor amiga, mientras jugaba con mi teléfono.
Unos minutos después de llegar ví entrar a una rubia y supe que era ella, me levante y ella se acerco a mi y me abrazo con fuerza, estaba vestida con unos shorts y una blusa blanca sencilla.-Cuando me vuelvas a llamar fea, te mato.-Dijo señalándome, yo reí y me senté con ella frente a mi; Stella era muy linda, su cabello rubio no era tan largo y tenía unas ondas naturales cayendo por sus hombros, su nariz era pequeña y un poco chata lo que la hacía ver mucho más delicada, sus labios eran bastantes gruesos y a diferencia de mi no usaba ni una gota de maquillaje, a comparación de mi que mi cabello era pelirrojo y largo, hoy lo cargaba liso.y con una cola alta, mi nariz era más grande y un poco levantada al final, mis ojos eran verdes pero más claros y muchos más grandes y mis labios eran también gruesos y hoy tenía un labial rojo encima, muestra altura y físico eran muy diferentes; yo era mucho más alta que Stella y sus curvas eran mucho más definidas, comparación de mi que aunque contaba con mis curvas eran definidas pero no tanto.
El mesero nos vino a tomar la orden yo me decidí por un banana split y Stella pidió un helado de pistacho, cuando el mesero se fue la mire espectante, quería saber todo lo que había pasado en su universidad.
-Como te fue a ti en la universidad.-Dije mirándola, ella sonrió y supe lo que venia acontinuación, siempre era lo mismo.-Conocí a un chico. Es muy sexy, se sentó a mi lado y hablamos un rato.-Dijo emocionada, yo sonreí, esa era Stella siempre.-Me pidió una cita, yo le dije que si.
-Que bueno, yo me levante tarde.-Dije apenada, ella volteo los ojos y me miro.
-Cuando tú te levantes a la hora que es, yo me vestiré de ángel y cantare aleluya.-Yo reí y ella lo hizo conmigo, desde el día en el que llegue a la casa había sido así.-Pero es verdad, nunca te paras a la hora que lo tienes que hacer y eso que Cecilia lo intenta.
-Bueno si, pero en mi defensa dormir es muy rico.-Dije seria, ella sonrió y asintió.
-Es verdad y estirada ¿Ningún chico?-Yo voltee los ojos y negué.-Pero por qué, tienes a miles de chicos babeando por ti y a ninguno le paras y no me digas que eres lesbiana porque no te lo creo.-Yo reí, por su manera tan fea de decirlo.
-Primero no soy homosexual, y segundo no tengo ningún interés en salir con alguien.-Dije mirando al chico que traía nuestro helado, el los dejo con un papel para mi, lo leí.
Eres muy linda, deberíamos salir.
Lo vi, y el me guiñó un ojo, era muy lindo, no me había dado cuenta de su apariencia cuando nos tomo el pedido, tendría como unos 20, su cabello era corto y negro, y tenía algunos tatuajes, llamaba mi atención debía decirlo, pero no me encontraba con ganas de salir con nadie en estos momentos.
-Deberías intentarlo, es lindo. Además, ve las ventajas tendrías helados gratis.-Dijo dándole un bocado a su helado, yo reí y metí una buena porción de mi helado a la boca pero fue mala idea ya que sentí frío en mi cabeza lo que me hizo fruncir el ceño.
-Cerebro congelado.-Dije tocándome la frente, Stella me miró y se echó a reír y yo la fulmine con la mirada.-Lo haré, pero solo porque tu insistes, dame un papel y bolígrafo.-Stella aplaudió de felicidad y saco de su bolso lo que le dije, anote mi número, seguimos comiendo y cuando termine que pagamos me acerque al chico, Stella se quedo hablando con la cajera, que al parecer conocía.
-Hola.-Dijo, yo sonreí.-Me llamo Lucs.-Tendió su mano y yo la tome.
-Meredith, entonces te parezco linda.-Lucs sonrió y asintió.
-Si, muy linda. ¿Cuántos años tienes?-Dijo acercándose mas a mi.
-18 ¿Y tu?
-20, ¿Querrías salir a las...-Miro su teléfono.- ocho?, falta poco, mi turno termina a esa hora.-Yo mire mi hora y me di cuenta que faltaba poco para las ocho, pero recordé la cena que tenía con mi padre y otras personas ahí a las 8:10 y maldije mentalmente.
-Lo siento, no puedo, pero aquí tengo mi número, quedamos otro día.-Dije disculpándome, a Lucs se le quito la sonrisa, pero asintió.
-Okey, nos vemos linda.-Dijo yéndose con mi número en su bolsillo, llame a Lucas y me despedí de Stella.
Lucas ya estaba en la heladería me monte.
-Lucas, necesito que manejes lo más rápido que puedas, la cena con mi padre es a las 8:10 y no me acordaba y me tengo que arreglar.-Dije un poco preocupada a Lucas.
-Okey señorita Meredith, Esteban me dijo que le diera esto.-Dijo Lucas sacando algo de su bolsillo, mire la carta y quede paralizada, no puedo creer que sea verdad Estaban, no había hablado más conmigo desde que lo despidieron cuando se dieron cuenta que estábamos saliendo; respiré profundo y agarré la carta decidiendo abrirla, al ver lo que había adentro rompió más mi corazón; era el brazalete que le había regalado una nota, no podía leerla, solo podía ver el brazalete y recordar todo lo que había pasado.
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All the love.

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Dangerously
Teen FictionMeredith luego de la muerte de su madre, es adoptada por Jason Bennet dueño de una de las importadoras de autos mas famosas del mundo, tiene una vida tranquila, aburrida y monótona. Hasta la llegada de una carta y un chico misterioso, haciendo su v...