Un Poco de Amor

Te amo

Te amo

–Wili estaba impresionado esa mujer lo tomo por la nuca y sin que él lo viera venir plantó sus labios sobre los de él, tardó un momento en reaccionar ella se dio cuenta y cuando sintió que se iba a separar él no lo permitió la tomó por la nuca con una mano y con la otra quito delicadamente sus lentes para observarla, ella lo miraba de una manera que lo hacía estremecer, en su vida ninguna mujer lo había hecho sentir todas las emociones que en ese momento estaban sintiendo, colocó los lentes de afrodita colgando en su ropa y con delicadeza acaricio el rostro con sus dedos, delineo sus labios, ella sonrió sutilmente y él se acercó más para besarla, ella se retiró un poco mientras lo miro sonriendo coquetamente y él sonrió su sonrisa fue sincera dulce como tenía años que no lo hacía, Afrodita delineo los labios de él con sus dedos y se acercó a ellos lentamente hasta que sintió como él la pego más a sus labios y estos empezaron a moverse, sus movimientos eran casi perfectos, Afrodita abrió un poco sus labios permitiendo explorar a Wili su boca, él bajo su mano a la cintura de ella pegándola un poco más, ella acariciaba su espalda, el beso iba subiendo un poco de intensidad hasta que se separaron lentamente, él le acaricio la mejilla de una manera dulce–

– ¿Por qué lo hiciste? –su voz era suave y no soltaba su rostro, ella sonrió–

–Las últimas veces que tú lo hiciste nos traía mala suerte –Wili sonrió y se trató de acercar a ella y antes que ella se quitara la tomo nuevamente por la nuca besándola– ¿por qué lo hiciste? –preguntó Afrodita separándose del beso–

–Porque no me pude resistir –Afrodita negó sonriendo– dije algo malo

–No es solo que no te creo, mira Wili vamos a dejar las cosas claras –Wili levanto una ceja– yo parezco tonta pero no lo soy y sé que tu interés en mí es económico, pero –Wili no la dejo seguir hablando la tomo por la nuca con fuerza y la beso pero esta vez con pasión– suéltame –Afrodita lo empujo– eres un salvaje –se limpió los labios–

–Claro si a mí lo único que me interesará fuera tu dinero así serían mis besos, de verdad no te das cuenta de nada

–Por favor Wili mírame bien –le quito los lentes y se los puso– esta soy yo y no soy tú tipo de mujer, dime ¿Qué pretendes? –Wili negó–

–De verdad que eres una pesada –se dio la media vuelta–

–Cómo siempre huyes cuando te digo tus verdades –Grito Afrodita cuando observó que él se iba y ella entraba al restaurant–

–Mayte se separó lentamente de los labios de Eduardo y lo miro sintiéndose apenada–

–Yo creo –Eduardo le colocó su dedo en los labios delineándolos tomándola del mentón y jalándola nuevamente hacía él Mayte no pudo resistirse ella deseaba tanto ese beso, los besos de Eduardo eran perfectos–

–Me encantas Mayte –recargo su frente en la de ella tomando entre sus dedos un mechón de pelo de ella– dame una oportunidad

–Eduardo yo estoy en un proceso un poco difícil de divorcio y no quiero –Eduardo volvió a pegar sus labios–

–Deja que te apoye en ese proceso, yo quiero ser parte de tu vida –Acaricio sus mejillas–

–No quiero fastidiarte, tú te mereces alguien con menos problemas –le acaricio la nariz tiernamente–

–Yo quiero estar contigo y esa decisión ya está tomada, ahora solo necesito que me diga que me lo permites –Mayte suspiro y se acercó lentamente a él–