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Esa noche llegué a casa y me puse a cocinar. Mark no llegó a cenar, probablemente estaba operando o enojado, quien sabe.
Me fui a dormir y el todavía no había llegado. Eso me hizo pensar en mi vida sin el.

Al otro día fui al hospital temprano. Lo encontré en la sala de radiografías.

-Anoche no has venido.

-Lo siento por no avisarte, tuve una operación de urgencia. -El casi no me miraba.

-Tendría que habértelo dicho antes. Lo siento. Ahora no es el momento ¿Esta bien? La idea me asusta.

-Lo siento yo. No tendría que haberme enojado. Soy un tonto. No voy a forzarte, cuando estés lista me dices porque tu eres la mujer con la que quiero estar toda la vida. Voy a esperarte. Y si no quieres niños, no me importa. Yo soy feliz estando contigo.

Nos abrazamos fuerte.

-Sabes que no puedo pelearme contigo.

Nos despedimos y cada uno siguió trabajando por su cuenta.

Volví a pediatría a atender a mis pacientes. Mi día consistió en cirugías.
Fui a la estación de enfermeras a pedirles que cuiden de un niño que estaba mejor, que ya no necesitaba de mis servicios. Me quedé comiendo pastel con Alex ya que una cumplía años y vi a Mark salir del consultorio.
Pero lo mas interesante fue ver como una mujer alta, rubia platinada y con labios fucsia se acercaba a Mark emocionada, casi gritando.
Lo abrazó y lo besó. Si, lo beso en los labios. Mark pronto la separó y me miró.

-Por Dios. -Dije dejando el plato con torta en el escritorio.

-Sloan esta en problemas. -Dijo mirándome preocupado.

También pude ver a Derek mirando esa escena. Estaba atónito. No sabía si mirarme a mi o a Mark.

-Karev, termina las fichas por mi. -Dije.

Decidir calmarme e ir buscar explicaciones. Tome mi plato de torta y fui a ellos.

-Hola. -Dije cuando estaba al lado de Mark.

-Hola, ¿Te conozco? -Dijo la mujer rubia con una sonrisa en la cara.

-No lo creo. Soy la doctora Hook, mucho gusto.

-Yo también era doctora aquí. Era de cirugía plástica, junto con mi querido Mark hace menos de tres años atrás. Luego trabajé en Los Angeles. Pero ahora me han ofrecido una mejor oportunidad en Canada. -Mark estaba mas que incómodo.

-Cassie...

-¿Querido Sloan?

-¿Ustedes son amigos o que? Hemos estado juntos. Hace un año y ocho o nueve meses me fui a Canada y dejamos de vernos pero supongo que lo nuestro no se rompió.

-¿Un año y ocho meses? Genial. -Lo miré. -No te preocupes, puedes seguir acostándote con Mark.

-Creo que he metido la pata. -Dijo incómoda mirando a Mark.

-Cassie, déjame explicarte.

-Pudrete Sloan. -Dije yéndome de allí.

Corrí para que no me encontrará. Corrí para no escucharlo, para no llorar. Me refugié en mis pacientes.
Cuándo estaba yendo al baño, Mark apareció y me tomo del brazo. Me metió dentro del cuarto de insumos médicos.

-¡No, no me toques!

-Solo escúchame. Es verdad, me he acostado con ella por varios años pero no he...

-Ve al punto, ¿Has estado con ella mientras estabas conmigo?

-Cass...

-Contesta.

-Fue antes de estar de novios, mientras salíamos y...

-¡¿Cuando fue la última vez?!

-La noche siguiente a que te propusiera ser mi novia. Estaba ebrio, ella se iba a Canada, yo iba a dedicar mi vida a ti. Yo... yo estuve mal pero jamás habia tenido una novia, jamás había amado tanto. No hay noche en que piense en eso sin arrepentirme. Siento que no te merezco, mereces alguien mejor.

-¿Como pudiste hacerme algo así? Ella piensa que sigues soltero, que su relación basada en sexo sigue, te vino a buscar.

-No he hablado con ella desde ese día. No llores, que me destrozas por dentro. Ella ha sido mi amiga por años y sentia que si hablaba con ella, te era infiel. -Dijo abrazándome.

-Quizas porque lo eras, no me interesa conocer tus otras amistades. Esta relación se rompió. Esto es el fin de nosotros. -Dije separándome de el y abandonando el cuarto sin dejarlo hablar. -Me quiero un poco y no voy a aguantarme esto. Y hazme un favor, no vuelvas a hablarme si no son asuntos relacionados al trabajo.

Fui a su departamento, donde últimamente convivíamos y saqué todas mis cosas de allí para devolverlas al mío.

Esa noche, Arizona apareció en mi apartamento con dos kilos de helado y un paquete de mis caramelos favoritos.
Le conté todo lo que había sucedido y me abrazó. También me presto su hombro para llorar. Estaba agradecida por ser amiga de Arizona.

-¿Como te has enterado?

-Mark ha ido a casa a buscar a Callie. Dijo que lo había arruinado todo y quería que ella lo ayude a arreglar todo esto.

-Lo odio. No puedo creer que di todo en esta relación. Jamás me había comprometido tanto con alguien. Hasta me vi obligada a la idea a tener bebés. -Me quebré en llanto. -En tu boda me propuso que nos casemos.

-Yo también. Ya se las vera conmigo por meterse con mi mejor amiga. El sabe de lo que se pierde. Eres una increíble y talentosa mujer. No voy a permitirte que ese tonto te haga llorar.  Ahora debes seguir adelante. Divertirte, salir, acostarte con Karev.

-¿Que dices Arizona? -Reí mientras me secaba las lágrimas,

-El es apuesto y tu le pareces bella. No veo porque no.

-Porque no. -Dije riendo. -Hasta hace diez minutos lloraba por Mark.

-Debes mostrarte fuerte, superada. Eso va a matarlo.

Anatomía de un corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora