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Me desperté con el sonido del buscapersonas. Nathan siguió durmiendo, le deje una nota en la mesa de luz

Buenos días. Allan ha recaído, me fui al hospital. Nos vemos mas tarde. X

En el camino desayuné un chocolate. Fui corriendo a la habitación del paciente, le administre lo que necesitaba. Iba a tener que seguirlo de cerca todo el día.
Luego de calmar a los padres, me lo quede viendo desde la ventana.

-Buenos días. Sabía que iba a encontrarte aquí. -Dijo Mark que se paró a mi lado y me dió un café.

-Gracias. Y quiero decirte que lo de ayer no significó nada. Absolutamente nada. Y no quiero que vuelva a pasar, soy una mujer feliz en una relación.

-Es lindo ver como intentas convencerte a ti misma de que no lo fue.

-Yo estoy segura.

Mark se acercó a mi, mojó su dedo anular y lo paso por el costado de la comisura de mi labio. Yo lo miré. Esto era intenso.

-Has desayunado chocolate. -Dijo riéndose.

-Adiós. -Dije alejándome de el, iba a ir a cualquier lugar donde no este. Aunque intentaba que el no me viera, estaba sonriendo.

Me quedé hablando con Derek Shepherd unos veinte minutos cuando volví a vigilar a mi paciente.

En el pasillo, me cruce con Mark, quién me tomo del brazo y me metió al cuarto de descanso, como en los viejos tiempos.

-¡Mark!

-¿Todavía sigues teniendo el anillo?

-Si.

-Escucha, te he amado desde el momento en el que te conocí. Jamas pare de hacerlo y a pesar de la distancia, mis sentimientos no se apagaron ni un poco. Lo he intentado con otras chicas pero créeme, no eres como nadie. Eres inigualable, eres única. Todos esos planes que hicimos juntos, todas las noches soñé con cumplirlos contigo. Si bien tendré un hijo, deseo uno contigo, si bien me mudé deseo hacerlo contigo. Te amo y lo haré hasta el último día contigo porque tu me alegras la existencia. Eres mi alma gemela y créeme estoy muy seguro de eso. Y creo que tu también. Te amo tanto que creo que Elvis Costello se inspiro en ti para escribir la canción She. Cassie, cásate conmigo. -Dijo sacando un anillo de su bolsillo.

-Ay Mark... -Dije tapándome la cara para que no me vea llorar. Lo amaba, definitivamente lo seguía amando. -Estoy con Nathan, yo... no puedo. Lo siento.

-Si me amas, déjalo y cásate conmigo. -Dijo levantando mi rostro con sus manos.

-Aunque lo haga, vivimos en mundos diferentes y no puedes irte, tienes a Sofia. -Dije secándome las lagrimas. -Te odio por hacer esto. -Dije abrazándolo fuerte. El me correspondió. -Tu no entiendes, pero ha sido realmente difícil superarte. Todo me recordaba a ti y volví aquí porque estaba segura que no iba a verte. No quería sufrir por ti de nuevo. Dejaria a Nathan por ti, pero lo nuestro es imposible.

-Si la vida nos vuelve a juntar, quiero que sepas que esta propuesta seguirá en pie. Yo te amo, jamás deje de hacerlo. Lo nuestro es para siempre.

-Esta bien. -Dije secándome las lagrimas.

Abrí la puerta para salir y me encontré a Callie, que entró con nosotros.

-Así quería encontrarlos. Ahora van a explicarme que sucede entre ustedes.

-Nada Callie, solo hablábamos.

-¿Con la puerta cerrada en el cuarto de descanso?

Miré a Mark.

-Le propuse casamiento.

-¡Mark!

-¡¿Que hiciste que?! Ustedes dos no paran de hacerse daño. Son almas gemelas, nadie lo niega pero acercándose cada vez que se ven para luego separarse, los destroza a ambos. Y lo se porque tu ahogas las penas conmigo y tu Cassie con Arizona. Deben parar con esto.

Mark me tomó de la mano y por alguna razón no pude soltarla.

-Los vi, suéltense.

Les dejo la canción que Mark le dedica.😍

Anatomía de un corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora