Anatomía de un corazón

12

-Tengo muchas ganas de salir de aquí y seguir besándote. -Dijo tomándome de la cintura besándome.

-Eso tendrá que esperar. He quedado ir a cenar a lo de Callie y Arizona, y tú también.

-Rayos. ¿Uno rápido en el baño?

-Mark Sloan, vamos tarde. -Tomé mis cosas y salimos de allí.

En el ascensor, nos cruzamos con Derek, que bajaba con nosotros, estaba adelante de nosotros. El nos había explicado una cirugía que iba a hacer pero necesitaba que ambos estemos presentes.

Mark comenzó a acercarse a mi hasta que me tomó de la cintura y cuando estaba por darme un beso, lo detuve pero no había caso.

-¡Sloan!

Derek se dio vuelta y vio a su amigo sosteniéndome por la cintura.

-¿Ustedes estan juntos?

-Algo asi. -Dijo Mark.

-Era hora. -Dijo sonriéndonos y haciendo su mirada de Mcdreamy. -Me alegro por ustedes.

El ascensor se abrió y salimos. Nos despedimos de Derek y fuimos a lo de Callie.

Ellas nos estaban esperando con una botella de vino y pasta casera.

-Me da miedo comer comida hecha por ti Callie.

-Tu te lo pierdes, McStupid.

-Esta muy rico Callie.

-¿Te has enterado de las novedades? -Le dijo Arizona a su novia. Ella negó con la cabeza. -Al fin están juntos.

Me atraganté con el vino.

-Oh mi Dios, ¿Están juntos?

Mire a Mark.

-Hemos tenido sexo una vez.

-Podríamos cambiar de tema. -Dije.

-Hacen una linda pareja. -Dijo Arizona. -Era hora que las cosas se pongan serias. Me refiero a que tu Mark, has estado frustrado desde que llego. No parabas de mirarla. Hasta los pacientes se daban cuenta que estabas enamorado. -Mark se puso rojo. Era una conversación un tanto incómoda.

Comimos y bebimos hasta que se hizo tarde y decidimos volver con Mark.
Me acompañó hasta mi puerta y cuando la abrí comenzó a besarme.

Entramos a mi apartamento y fuimos a mi habitación. Volvimos a tener sexo. Era placentero tenerlo entre mis sabanas besándome hasta el amanecer.

Por la mañana me desperté envuelta en sabanas con Mark abrazándome y el sol entrando por la ventana. Me moví y me di cuenta que Mark estaba despierto mirándome.

-Buenos días. -Dije girándome a el mientras lo abrazaba.

-Buenos días. -Dijo acariciándome la espalda.

-¿Como has dormido?

-Mejor que nunca, ¿tu?

-Igual. Voy a bañarme. -Dije levantándome de la cama.

-¿Puedo ir contigo?

-No. -Dije riendo y metiéndome en el baño.

-Eres cruel.

Me bañé sonriendo. Era lindo tenerlo a mi lado. Cuando salí, me puse unos shorts y una remera grande.

Cuando salí, vi a Mark en la cama leyendo una revista de medicina con bolsas.

-He comprado desayuno.

-Estoy muriendo de hambre.

Comimos donas con capuchino.

Pasamos todo el día juntos, cuando llego la noche le propuse quedarse a comer. Iba a cocinar.

-Ayúdame a cortar las verduras, córtalas lo mas finas que puedas.

Esto iba a ser gracioso. Ver a Mark Sloan intentando cortar verduras en juliana me mataba de la risa por dentro.

Lo ayudé.

Esa noche comimos juntos. El lavó los platos y en medio de besos en el sofá, su buscapersonas sonó.

-Derek me necesita. Tengo que irme. Que oportuno.

-Suerte. Nos vemos en el hospital mañana. -Dije dándole un beso.

-Duerme bien. -Dijo besándome de nuevo.