Capitulo 9

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Omnisciente.

7 Días para la entrega de casa.

Ambas se abrazaban fuerte al ver como el equipo que habían ido a apoyar había marcado un gol. Gritaron eufóricas y celebraron al ritmo de la barra quienes cantaban por el gol.

-Esto es genial.- decía Rachel volviendo a su asiento.

-Que bueno que te guste pequeña.- sonríe.

Lauren agradecía plenamente que el equipo de chicas hubiera ganado ese partido para así darle la euforia a su hija de ir al estadio.

Lauren había decidido llevar a Rachel toda esa semana a sus lugares favoritos y poder pasarle la cultura que ella tenía en 7 días totalmente.

*
*

Llegaban al restaurante de comida China, donde siempre que ganaba su equipo iba a comer con su papá a ese lugar. Entraron con la chica y la mamá de la chica con una sonrisa. Pidieron su comida donde Lauren relataba lo delicioso que era, entre risas Rachel le acompañaba en su locura.

-Si no te gusta es porque eres muy Fome.- bromea.

-Me va a gustar.- sonríe la pequeña. -Yo no soy Fome, soy ultra divertida.- le saca la lengua.

-Como tú digas enana.- ríe un poco.

La comida llego, y Rachel no dejaba de decir lo bueno que estaba. Lauren tenía una mirada de ternura, de orgullo con lo hermosa que era su hija. También le explicaba que era y le preguntaba en cada momento si le gusto. Camila no decía nada, tan solo se mantenía en silencio para no interrumpir el momento que tenían Lauren y Rachel.

*

5 Días para la entrega de la casa.

Habían quedado con Rachel para que vinieran a conocer su casa, la pequeña insistía en que quería saber más de su tía Lauren, cosa que está acepto con gusto. Lauren había preparado su especialidad, comida italiana por lo que hizo unas pastas, deseaba con todo su corazón que a Rachel le gustara, era lo único que le importaba.

Preparo jugo natural y también le quedo el tiempo para ordenar su cocina. Pocas veces cocinaba ahí, ya que la mayoría del tiempo compraba comida en un restaurante para alimentarse, era cliente principal de los cafés y comida rápida de la ciudad.

El timbre la sacaba de su tarea para sacarse rápidamente el delantal de cocina. Las cosas con Camila eran igual de frías que siempre, luego de la escena que tuvieron hace unos día, decidió no tocar el tema, tampoco quería hablar con la morena de su tema con el alcohol, sabía que a Camila no le importaba nada que tuviera que ver con ella, en fin Lauren simplemente ignoraría todo y seguiría con su conversación de hola y adiós con la morena.

-Rachel.- la abrazo fuerte. -Estás hermosa pequeña.- la toma en sus brazos.

-Gracias Tia Lauren, gracias por invitarnos.- sonríe, se baja de los brazos.

-Pasen.- se hace a un lado.

-Hola Lauren.- dice una sonriente Camila, besando su mejilla.

-Hola.- responde igual de fría que siempre.

-Huele rico.- dice una feliz Rachel, encaminándose y mirando con asombro la hermosa casa de Lauren.

-Pensé que tendrías hambre por lo que cocine algo que espero que te guste.- se acerca a ella.

-¿Que es?.- dice saboreando sus labios.

-Pasta Italiana.- ríe ante la acción de su hija. -Si quieren se sientan y comemos, luego te hago un recorrido por la casa.- propone.

Skin (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora