Subastado. |Harco.

Capítulo tres.

-No es como si fuera que me importe Malfoy -comentó Hermione entrando al departamento que actualmente compartía con Ron; su prometido-Pero es -Dio una breve pausa antes de continuar- sencillamente estúpido que alguien lo utilice para "fines lucrativos"

-No lo sé, Hermione -Habló su prometido- ¿por qué el ministro haría todo esto?

-¿Qué no es obvio? -La chica hizo un gesto oprimiendo la angustia que aquello le ocasionaba- Además, no es tan difícil de deducir. Creo yo, que hay muchísimos mortífagos jóvenes, así que Malfoy no es la única víctima.

Ron interrumpió.
-¿Crees que gran parte de Slytherin estén siendo subastados? Es decir, recuerdo a unos cuantos como Blaise Zabini, Pansy Parkinson. Ya sabes, de grupo de Malfoy.

-Hm -La chica miró de forma de dubitativa al pelirrojo y continuó su camino hacia la heladera- La mayoría estuvo al servicio de Voldemort. Podría utilizar una poción multijugos para infiltrarme y así-

-Me niego, es muy arriesgado-Opinó el joven sentándose en el sofá- Aunque espero que en tus planes no esté el hacerlo. Harry no estaría de acuerdo, y además ¿Nosotros que tenemos? Realmente nada, no tenemos indicios sobre los subastados.

-Desde luego -la chica sonrió peculiar antes de sentarse al lado de su novio- Por eso mismo, podría infiltrarme de alguna manera y obtener algunos documentos.

-Para tí es fácil, ¿No? Pondrías en riesgo tu libertad o reputación. Además, has estado ocupada con nuestros problemas. Dejemos que Harry logre averiguar algo que por supuesto, tiene más posibilidades que nosotros.

Granger estaba por replicar aquello en protesta, abrió la boca sin embargo antes de articular alguna palabra: el timbre sonó.

-¿Muggles? -Preguntó insegura. Su prometido se encogió de hombros, normalmente sus conocidos solían usar la transportación o red flú. La mujer abrió la puerta encontrándose con George Weasley-¡George!

-Hermione, ¿Cómo estás? Luces estupenda. Hm, ¿mi hermano está aquí? -Indagó sin dejar de mirar hacia adentro, encontrándose con un interrogante pelirrojo frunciendo el ceño-¿Puedes llamarlo?

-¿Cla-claro? -Respondió aún confusa. Su prometido al poco instante se encontraba con una mano en el marco de la puerta y ella caminando hacia la habitación.

-¿Podemos hablar? Aquí no. Toma mi brazo-su hermano menor lo miró con incredulidad.

-¿Qué es tan importante que no deba saberlo Hermione?

-¡Por favor, Ron! Son temas de la empresa. Sólo la fami-

-Hermione y Harry son familia -Cruzó sus brazos en un gesto de rebeldía- Llamaré a Hermione en este instante y me lo dirás aquí, ¿de acuerdo?

-Estoy en problemas -Se apresuró a decir antes de que su hermano hablara- Y sabes que tu prometida no dudaría en meterme a Azkaban.

-¿Qué? ¿Qué es tan grave que involucre Azkaban?

-Ese es problema, hermanito. ¿Acaso quieres causarle más dolor a mamá y a papá después de la muerte de Freddie? -Ron frunció el ceño negando- ¡Ese es mi hermano! Ahora, debes venir conmigo. Tenemos mucho de que platicar. ¿Por favor?

-De acuerdo.

Sostuvo su brazo. Pronto supo que su hermano mayor había utilizado la aparición, porque se encontraba envuelto por un callejón y el ruido cotidiano de los autos muggles.

- ¿Es un callejón muggle?

- Así es -Afirmó- No podía contarte esto en el mundo mágico.

Por alguna extraña razón recordó a Harry.

-De acuerdo. Ve directo al grano, sin miedo. ¿Qué es ese asunto grave?

Su hermano mayor se detuvo y sonrió de manera arrogante.

-He comprado a Draco Malfoy.

He comprado a Draco Malfoy.
Aquellas cinco palabras bastaron para formar un eco en sus pensamientos. Como si el mundo fuese a detenerse y sus ideas se acabaran al instante, trató de reaccionar, pero, simplemente gesticular alguna palabra le era imposible.

-¿Q-qué?
Preguntó. Claro que estuvo en silencio por un eterno minuto.

-Que compré a Draco Malfoy por 1.500 galeones. ¿Aún no has oído de las subastas anuales en el mundo mágico? -Su hermano sonrió ya a burla- Oh claro, mi hermanito es un honorable auror.

-¡Por supuesto que sí! -Bramó- P-pero lo de Malfoy me deja sin palabras. ¡Eso fue completamente idiota de tu parte, George! ¡Podrías ir a Azkaban!

-Descuida. Sabía que reaccionarías de esa manera, por ende, he preparado lo que iba a decir -Rueda los ojos y sostiene a su hermano de los hombres para observarlo directamente a los ojos- Necesito de tu ayuda, Ron. Sé que Potter lo está buscando y realmente... no quiero dejar ir a Malfoy. No quiero ir a Malfoy y saber que mamá y papá sufrirán por nuestra causa, y tú, tú perderás a otro hermano. ¿Desde cuándo prefieres a lameculos de Malfoy que a tu hermano, Ron? Yo he estado siempre para ti, ¿no crees que es tu momento de estar para mí?

Ron se preguntaba, inconscientemente, si aquel que posaba sus manos en sus hombros, era realmente su hermano. Porque hasta ahora, no daba indicios de serlo.

-¿Qué planeas hacer con él? -Escupió sin desmesura. Estaba agotado, peor aún, agobiado.

-¿Qué más? -La pregunta fue respondida con obviedad- Utilizarlo, desde luego. Hacer de su vida un gran infierno.

Ron mordió internamente su mejilla. Sus ojos señalaban mucha confusión.

-¿Lastimarlo?

- Hace un rato lo tomé -Habló como si nada, quitando sus manos de los hombros de aquel confundido hermano- Exacto, abusé de él. Si hubieras escuchado sus súplicas, sus lamentos.

- Merlín bendito -No acalla su hermano tras oír semejante declaración.

-Y exactamente, al menos salió bien en algo. Era virgen, supongo que le jugaba al lado de los heterosexuales. Lástima por él.

-¿A-abusaste de él? -Preguntó retrocediendo algunos pasos hacia atrás

-Ya he dicho que sí -Su hermano volvió a hacer aquel gesto de incomodidad- Tiene un pequeño y delgado cuerpo, Merlín. ¿Cómo se puede ser tan hermoso y ser un asco al mismo tiempo? Es la pregunta que me he hecho todo el tiempo.

-¿Dónde lo tienes?

-En mi casa, no es tan difícil. Cuando llega alguien utilizaré algún hechizo silenciador. Como sea, el punto es que necesito de tu ayuda.

Ron reflexionó las palabras anteriores de su hermano mayor. Recordó la devastación que sufrió su familia tras la muerte de Fred. El dolor y el encierro de su madre, su hermana sin probar durante días algún bocado adecuado, a Harry tratando de solucionar sus problemas. Recordó el funeral de su hermano y cómo esperaba que Fred despertara diciendo que había sido una de sus mejores bromas, pero la cruda realidad está ahí; destruyendo a su familia.

No podría darse el lujo de romper el corazón de su madre delatando a George, ni siquiera se imaginaba el sentimiento de Molly al enterarse de ese hecho. Estaba atrapado. Respiró profundamente y asintió.

-Tranquilo. Harry aún no tiene nada, no encontrará a Malfoy.

- Eso espero -Murmuró- Confío en tí, hermanito.

Y Ron nunca se había sentido tan desdichado como en esos momentos.