Besame & Dispara (Justin Bieber y tu)

Capítulo 29: Perdiéndolo todo.

Una vez afuera me di cuenta de que estaba perdido. Estaba rodeado por los ayudantes de Jeremy. Justin me apuntaba al rostro con su arma y yo estaba totalmente desprotegido. Ahora era débil pero pasara lo que pasara no le diría donde estaba (tn). De igual modo me matarían....

Mi celular sonó, y Justin comenzó a ponerse un poco nervioso. Justin no era del tipo de personas desalmadas y frías como lo éramos Jeremy y yo. Justin, tan débil y sensible de corazón… no se atrevería a asesinar a su hermano.

—¿Puedo contestar? —pregunté bajando mi mano hasta mi bolsillo.

—Hazlo, pero di una sola palabra sobre esto y te mato.

Afirme con la cabeza y saque mi teléfono celular. Era (tn), entonces decidí colgar porque si contestaba podrían rastrear su llamada.

—¿Por qué no contestaste? —preguntó Justin extrañado.

—No quiero hablar con esta persona. —Intente excusarme.

Sonrió de lado.

—Era (tn). ¿No es así? —No le conteste. Él ya lo sabía—. Eres un idiota, y morirás como idiota si no me dices donde está tu noviecita.

Estaba bastante preocupada por Jason. Algo no andaba bien. No había contestado mis llamadas y ya era muy tarde. Siempre que se le hacía tarde me llamaba o por lo menos me enviaba un mensaje. No lo había hecho. Tome mi chaqueta gris de la repisa y me dirigí a la sala en busca de mis llaves. Iría a buscarlo.

—¿A dónde crees que vas? —Me detuvo una voz que yo conocía perfectamente.

Jason.

—No imagino para que la quieres.

—Ella casi mata a mi padre.

—¿Y él la busca para tomar venganza? —Me reí en lo bajo.

—No. La busca para que ayude a la mafia Bieber, y sí… para vengarse un rato.

—(tn) ya no sabe nada de lo que pasa con su padre ni mucho menos con la mafia Black. ¿En verdad no lo pensaron? Su padre sabe lo que ocurre. Ella ya no es parte de eso, y yo tampoco.

—Jason, ¿No conoces a los rehenes? (tn) es uno, su padre piensa que está en nuestras manos una vez más. Ahora controlamos al señor Black y necesitamos de (tn) para hacer que esta mentira sea una verdad, antes de que Black se entere de que (tn) no está aquí y comience a atacar.

—Estás hablando mucho, Justin —Interrumpió una voz mayor. Era Jeremy—. A Jason eso no le importa.

—¿Por qué no nos dejan en paz de una vez? Ni (tn) ni yo nos hemos metido en sus asuntos.

—¿No? Ella me dio un tiro y casi me mata. —dijo Jeremy.

—Ella solo se defendió. Nunca lo hubiera hecho si ustedes no la hubieran buscado.

—La necesitamos de igual manera —Insistió mi hermano—. Ahora tenemos la ayuda de la mafia Black y la perderemos si descubre que (tn) está libre.

—Así que habla ahora, ¿Dónde está (tn)? —preguntó aún más amenazante Jeremy Bieber.

—¿Por qué no giras la cabeza, imbécil? —Los tres miramos hacia un lado donde se encontraba (tn) parada apuntando a Jeremy con un arma. Justin dejo de apuntarme y se giró a apuntar a (tn)— Ni un movimiento más, Justin. Ya le disparé una vez a tu padre y puedo hacerlo otra vez.

—¡¿Qué estás haciendo aquí?! —pregunté molesto. ¿Acaso estaba loca?

—Sabía que las cosas no estaban bien —Sonrió y miro a Jeremy—. No se preocupe señor Bieber, mi padre ya sabe que estoy sana y salva. Lejos de usted y de su mafia. —En eso todos nos quedamos sin palabras cuando el señor Black poso su mano sobre el hombro de (tn). La mafia Black también estaba allí.

—Y estoy dispuesto a defender a un solo miembro de la familia Bieber —dijo su padre mirándome—. Suelten a Jason. —Exigió el padre de (tn).

Algo extraño se retorció dentro de mí. Había ganado el apoyo de él hombre al que había traicionado. ¿De verdad estaba pasando? Me sentí muy feliz de que fuera así, porque no estábamos solos.

—De ninguna manera. —hablo mi Jeremy apuntándome con el arma.

—¡Jason! —me llamo el señor Black arrojándome un arma que atrape en el aire y entonces apunte a quien una vez fue mi padre.

Justin apuntaba a (tn), (tn) a mi padre, mi padre a mí, y yo a él.

—Se hará un baño de sangre… —susurró entre risas un ayudante del señor Black.

—Hablare una última vez: Suelta a Jason y dejen en paz a mi hija.

—Hazle caso, Justin. —habló Jeremy con un ademan de molestia.

—Jason, ve con (tn). Tu padre y yo tenemos que arreglar algunas… diferencias. —Sonrió vencedor el padre de (tn).

Yo atendí sus instrucciones y tome a (tn) de la cintura llevándome a un lugar más seguro, lejos de toda esa bola de mafiosos.

Apenas y nos alejamos y una lluvia de balas se hizo presente. Podíamos escucharlas. (tn) se aferró a mi pecho e intento pensar que su padre se encontraba bien. Ahora solo teníamos que huir.

Otra vez.