Sueño cumplido (Luka Dončić)

36. La copa

Llega diciembre y con él, las buenas noticias. A Manu le gustó mucho el artículo que escribí sobre Luka y me dijo que siguiera escribiendo, que me expreso muy bien y que ve potencial en mí.

No contenta con este reconocimiento, mi jefe entra una mañana en nuestra oficina para comunicarnos algo que me hace mucha ilusión:

-Colegas, nos vamos a la Copa del Rey de Baloncesto.

No quepo en mí de felicidad: voy a ver al Real Madrid y eso conlleva ver a Luka. Además, vamos acreditados como periodistas, por lo que tendremos sitio en primera fila y otras preferencias; y todo ello completamente gratis. Querido Marca, me estás haciendo muy feliz.

La Copa del Rey este año se juega en Bilbao, del 8 al 11 de Diciembre. Es un trofeo importante para el Madrid, ya que tiene cuatro seguidos en sus vitrinas; y también será importante para mí: podré ver a Luka a pie de pista.

-¿Entonces vas a verme jugar, eh?-me dice Luka cuando le doy la noticia.

-Técnicamente voy a ejercer de periodista.

-Todos sabemos que no vas a poder quitarme los ojos de encima-contesta engreído.

-¿No será al revés? -contraataco.

Me besa en los labios antes de contestar:

-Intentaré que no, eres una gran distracción-reconoce.

-¿Ah, sí? - lo provoco y él me mata a cosquillas como castigo, dejándome sin respiración.

Cómo lo quiero.

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Jueves 8 de Diciembre, nueve de la mañana. Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas.

Estoy escuchando música de un auricular de Carlos, con la cabeza apoyada en su hombro, esperando a que nos llamen a embarcar. A nuestro lado, Ale, Carmen, Javi y Manu.

Tengo muchas ganas de llegar a Bilbao, es una ciudad muy bonita que visité con mis padres y con María hace unos años y siempre he querido volver. Además, esta vez no voy de mero turismo; esta vez voy a ver a mi querido Madrid y a mi querido base esloveno.

Luka llegó ayer con el equipo y por lo visto están concentrados en el mismo hotel en el que nos instalaremos nosotros, uno cercano al pabellón del Baskonia, donde se jugará al torneo. Sé que no debo ni puedo coincidir mucho con él, pero me conformo con verlo sobre el parqué.

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Narra Luka

Bilbao, pabellón Fernando Buesa. 21:30h, cuartos de final de Copa del Rey contra el MoraBanc Andorra.

Estoy sentado en el banquillo. Hoy no he salido en el quinteto inicial, pero no me preocupa; lo importante es el equipo. El pabellón está lleno hasta la bandera y mis ojos miran a todas partes buscando a una persona en concreto.

Tras un rato, encuentro a Cris en la primera fila de las gradas opuestas al banquillo. Aún no se ha dado cuenta de que la estoy mirando porque está hablando con un chico que está sentado a su lado. Ambos se están riendo y comentado cosas al oído. Una de las veces, ella mira hacia el campo, luego hacia el banquillo y nuestras miradas se encuentran. No hace falta hacer ningún gesto para entendernos. Tenerla aquí me infunde confianza y tengo muchas ganas de salir para que me vea jugar.