Capítulo 4 (Revisado)

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Me acerque a su escritorio hasta que quede de pie delante de él, tenía la cabeza mirando hacia mis manos, no podía verlo... sentía vergüenza, no quería que viera lo que mi padre y mis compañeros me hacían, escuche como suspiraba y como movía su silla un poco, y yo solo miraba a cualquier lugar menos a él.

-bueno - gire mi mirada para verlo con los brazos cruzados sobre su pecho - me dirás que paso, o ¿me inventaras otra excusa? - sentí el calor en mis orejas y mejillas ante su pregunta

-yo solo...me- desvié la mirada intentando encontrar una excusa creíble -...me cai esta mañana mientras me duchaba - mi voz fue apenas un murmullo

Hizo una mueca con sus labios al tiempo que evaluaba mi rostro y los golpes en él, y no pudiendo sostenerle la mirada la baje la un segundo después, sabía que no me había creído, escuche de nuevo el movimiento de la silla y después escuche sus pasos, mire su sombra a un lado de la mía, sentí sus manos en mis hombros y como me giraba para quedar frente a él.

- Alice e dejado pasar muchas oportunidades para ayudarte, me eh echo que no me doy cuenta de las marcas con las que cargas, pero ya no voy a hacerlo, si no me dices lo que pasa aquí, o en tu casa, no puedo ayudarte, ¿entiendes eso?

Asentí con la cabeza y pasé saliva antes de contestar.

- solo...me golpe, se lo prometo, fue solo un golpe - me miro un segundo mas, sentí como mis ojos ardían al negarme a parpadear, suspiro y me soltó

-si así lo quieres, tu eres la que esta decidiendo vivir así, aquí entre nos yo sé todo lo que tu padre te hace, no necesitas ser un genio para averiguarlo - me tense en cuanto lo escuche - pero no hare nada... por ahora - me miraba con el ceño fruncido - tu decidirás cuando aceptar ayuda, cuando terminar con el dolor, no yo, eso solo es decisión tuya, no es de nadie más...pero, aun así, estoy aquí para ayudarte si así lo deseas - había algo en su mirada, algo que aun no comprendía, pero que deje pasar

-gracias profesor Jonathan

- de nada, ahora - se alejo un paso de mi y choco sus palmas mientras caminaba de regreso hacia su escritorio- puedes ir hacia tu siguiente clase, no quiero que te retrases por mi culpa - me sonrió

Asentí y sin decir nada más salí del salón, camine hacia mi casillero sin mirar a nadie, ya ni siquiera podía mirar a alguien a la cara, al único que podía mirar así, y no sentir miedo, era al profesor Jonthan y...a mi padre, pero con él era de una forma muy diferente, a él lo miraba con miedo, llegue a mi casillero pero había algo diferente en él, los casilleros que se suponía estaban vacíos esta mañana, ahora estaban ocupados por un chico y una chica, me quede quieta en ese mismo lugar, pase saliva intentando controlar el temblor en mis manos, esos casilleros llevaban vacíos un año, pero ahora había dos chicos parados frente a ellos, hablaban entre si, sopese la opción de no acercarme a mi casillero, pero cuando recordé que necesitaba uno de mis libros que estaban guardados dentro de el, acepte que la opción de darme la vuelta y alejarme, no era posible así que con un valor que no sé de dónde pude sacar, camine hacia allí y me pare delante de mí casillero.

Mis manos estaban temblando y mi respiración era irregular y pesada, las palmas de mis manos estaban comenzando a sudar, sentía las miradas de ambos puestas en mí, habían dejado de hablar cuando había llegado a mi casillero, yo era relativamente pequeña a un lado de ambos, así que me sentía igual a una hormiga, abrí mi casillero y comencé a buscar el libro de mi siguiente clase, mis manos se movían torpemente mientras intentaba encontrar mi libro, pude escuchar que ellos habían seguido conversando entre ellos, sabía que eran nuevos, no era necesario ser un genio para saberlo, mis manos no pudieron seguir sosteniendo el libro y las hojas que sujetaba mientras intentaba encontrar el otro libro y resbalaron de mis manos, se escuchó el golpe de los libros y el sonido de las hojas golpeando en el piso, me quede quieta por un segundo cuando escuche como todos a mi alrededor comenzaban a reírse de el error que había cometido, me incline un segundo después mientras escuchaba sus
comentarios y burlas hacia mí, pero dos voces entre todas las demás sobresalían.

-ni siquiera puedes sostener unos libros, estúpida

El comentario de Joshua solo hizo que mis manos temblaran más, él y Aíme estaban diciendo este tipo de cosas mientras yo intentaba levantar mi libro y todas las hojas que se habían esparcido por el piso, un puñado de estas se habían caído más lejos de mí, mire como dos manos me extendían un puñado de hojas y mi libro, el silencio se hizo un segundo después, levante la mirada y pude ver que las personas que me extendían las manos con mis cosas pertenecían a las dos personas que antes estaban parados a los lados de mi casillero, pude verlos un poco mejor mientras acercaba mis manos a las suyas, el chico tenía sus ojos de un color negro, tan negro como el carbón, y su cabello era igual de negro que sus ojos, y la chica tenía sus ojos de un color café a diferencia de sus cabello que lo tenía de un color castaño, tome rápido mis cosa, pero vi las hojas que habían caído lo suficientemente lejos para que no lograra alcanzarlas, levante la mirada hacia Aimé y Joshua que me miraban con una sonrisa llena de burla y desprecio, estire mi brazo intentando alcanzar mis hojas, pero estaban lo suficientemente lejos de mi para no alcanzarlas, sentí, mas que ver, el pie de Joshua pisar mi mano con fuerza, jale mi mano en u intento de liberarla, pero solo logre lastimarla mas, una mueca se formo en mi rostro producto del dolor en mi mano.

-no, no ,no...vamos rarita tienes que levantarte para recogerlo, anda levántate por que nadie -lo dije en voz alta mientras miraba a los dos chicos que me habían ayudado -te va a ayudar, así que... levántate - negué con la cabeza, lo hice sin pensar - ¿acaso me dijiste no? me dijiste que...no - pase saliva al escuchar el enojo en su voz - lo harás - se acercó a mí y tomo con fuerza mis brazos al tiempo que me ponía de pie, me jalo hacia donde estaban tiradas mis hojas, salían quejidos de mis labios al sentir la presión de su mano en mi brazo derecho, nos detuvimos en frente de mis hojas - levántalo - no lo obedecí, solo me quede quieta mientras sentí su agarre volverse más fuerte en mi brazo, al ver que no me movía, me lanzo al piso logrando que lastimara mis rodillas, se agacho a un lado de mi, sin soltar mi brazo, todo esto a las atentas miradas de todos, y con sus burlas de fondo a lo que Joshua me hacía-levántalo si no quieres que te ocurra algo peor - me susurro al oído, sentí asco cuando su aliento toco mi piel

-por favor - hable bajo, creía que no me escucharía, pero lo hizo

- ¿qué dijiste?, ¡¿por favor?! - había burla y enojo en su voz

Sentí sus manos colocarse con fuerza en mi cabello y jalarlo hacia atrás, mis ojos comenzaron a nublarse por las lágrimas, pero antes de que pudiera pasar otra cosa, sentí como la mano de Joshua dejaba mi cabello en un jalón y desaprecia de mi vista, se formo un silencio en todos los que habían estado mirando lo que pasaba, gire mi cabeza y pude ver a Joshua sentado en el piso con una mirada de enojo e incredulidad, miraba a alguien detrás de mi, mire hacia atrás y pude ver a la persona que me había ayudado, logre ver varias cosas con solo una mirada, era mas alto que yo, tenia un largo cabello rubio, e imponia autoridad, pero eso no fue lo que me llamo la atención, fueron sus ojos, eran de un hermoso color azul, el azul mas vivo y hermoso, solo había visto a una persona con ese color de ojos, y había sido hace tanto tiempo que ya no recordaba quien había sido, pero quien fuera esa persona, estaba en deuda con ella, por que me había ayudado, me había dado algo que no se me había dado en muchos años, me había dado ayuda.

Me había echo sentir merecedora de esa ayuda.

A través De La OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora