Eyes Wide Shut

3.8K 234 33
                                    

Este capítulo contiene escenas fuertes y lenguaje adulto, se recomienda discreción.

Les dejo una sensual foto de Blackwood, y de como me lo imagino 😚😚😘😘 Espero que les guste el capítulo 😉
Está no es la única foto que tengo de Daniel 😈

Estoy acostumbrada al sentimiento vacuo y pesimista que trae consigo la soledad. Estoy acostumbrada a la condescendía y al conformismo personal. Estoy acostumbrada a pensar que no merezco ser feliz.

Sencillamente porque no recuerdo algún momento en mi vida donde me haya autoproclamado la hacedera de mi destino. Soy la esclava de mi propia desdicha porque jamás intente hacer algo al respecto, nunca intenté hacer de mi vida un bonito recuerdo, o un bonito cuento de hadas.

Y estas últimas semanas han sido la prueba de que no estaba dispuesta a cambiar mi vida.
El gris y frío horizonte que prometía a base de mentiras un futuro árido y repleto de arrepentimientos.

Soy pesimista porque no quiero que me decepcionen. Sin embargo, eso ha salido peor de lo que pensé. En mi zona de confort me sentía segura y aprueba de cualquier tristeza provocada por cualquiera, pero en esa búsqueda y ensimismamiento personal me había cerrado por completo a la oportunidad de descubrir ahora, está cosa que crecía en mi pecho y moría en mi vientre.

Lo miro, y no puedo creer que lo tengo a mi lado.

Lo miro, y  no me reconozco.

Lo miro, y tengo temor a que desaparezca.

Lo miro, y sé que me he jodido por completo.

Me ha lastimado más de lo que pensé cualquiera lo haría. Y sí, he sido más infeliz de lo que hasta ahora había sido. Tal vez su presencia era tóxica para mí, tal vez no era lo mejor o lo más sensato, pero por primera vez ya no me importaba ni un poco si salía lastimada.

Quería más de aquel sentimiento, quería más de lo que ese hombre me provocaba.

Me había dado por vencida.

¿Por que debería racionalizarlo todo?

justo luego de haber saboreado el pecado con mis propios labios, justo después de comprender que efectivamente mi alma era mortal, no podía simplemente ignorar lo que en realidad sentía.

Y quería más, y estaba segura que lo obtendría.

Una sonrisa tan grande como la cordillera de Los Andes estaba plasmada en mi pálida cara. No recuerdo haber sonreído tan abierta y honestamente antes. Tanto que me dolían las mejillas, pero es que era inevitable no hacerlo, esta clase de gloria no podía ser legal.

Daniel está junto a mí. En el asiento del conductor. Después de haberme prácticamente comido la boca con sus labios.

Sus labios.

No era la primera vez que me besaba, pero nunca lo había disfrutado tanto como ahora. Y francamente poco me importaba el historial que teníamos juntos.

Yo solo quería beber más de eso, de lo que me había privado por tantos años.

Ahora entiendo a las puercas masoquistas que adoran ser golpeadas por sus maridos.

La Jaula del Petirrojo [Con pecado concebido *01]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora